—¡Carajo, Jungkook! ¿En qué estabas pensando?
El menor ya había despertado, pasó toda la noche inconsciente y en ese tiempo tuvieron que llamar a sus padres, su madre se desmayó al enterarse y ahora SeokJin estaba regañándolo.
—En saber si tenían a Jimin.—respondió con sinceridad.—Se que parezco seguro de lo que digo la mayor parte del tiempo, pero es difícil también para mi y si tengo que partirme las costillas para obtener información suya, lo haré.—expresó con determinación.—Después de todo, si me matan ahora, solo levantarán sospechas, no pueden hacer nada más que golpearme.
—¿Quieres encontrar a Jimin?—preguntó NamJoon desde el otro lado de la habitación y este asintió.—No vas a lograrlo si estás muerto o herido de gravedad, solo retrasas la agonía y no solo hablo de la tuya. Mantente fuerte porque falta mucho y solo estás ocasionando problemas.
La mirada de este era calmada, como de una playa sin olas en un atardecer, su aura tranquilizadora aunque su palabras siempre eran un poco más precisas y cortantes.
—Lo siento.—no lo había pensado de esa manera.
—¿Encontraste algo?
El menor asintió.
—Ellos están tan desesperados por encontrara a Jimin, como yo.—confesó y esto llamó la atención de Taehyung, quien se acercó a él casi corriendo.
—Cuéntamelo todo y exagera.
Jungkook trató de sonreír, pero solo apareció una mueca de dolor en su rostro.
—Creyeron que me había desmayado, uno de ellos dijo que su jefe los mataría si no encontraban al paquete y que por lo pronto no podían matarme o despertarían sospechas.
Jimin estaba en algún lado, esperando a volver a encontrarse, no había duda, estaba un paso más cerca y eso llenaba su corazón de paz porque se atormentaba con ello, no dormía preguntándose si debía creer en esas palabras en el almacén, porque incluso podía tratarse de un nuevo juego que su novio había estado preparando antes de que todo sucediera, pero ahora solo esperaba que estuviese bien y así como él, mantuviese la esperanza de volver a estar juntos, de cumplir sus promesas, de no perderse de vista y de nunca soltar sus manos.
—¿Jimin? En dónde estás?—preguntó y la dulce voz del chico, no se hizo esperar.
—Aquí, en el jardín. Ven un momento, Jungkookie.—le llamó y este se apresuró a llegar hacia él.—Mira, esta flor ya casi está lista para mostrarnos su encanto. ¿No te parece?
—Es hermosa y es gracias a tu devoción al cuidarlas, todo lo que haces es hermoso. Tomaré muchas fotos de ella y las podremos guardar en el álbum de fotos. ¿Te parece bien?
Jimin saltó a sus brazos, emocionado, le fascinaba que fuera tan atento con él, le hacía sentir tan amado, sin duda había encontrado a su otra mitad, una persona que estuviese con él incluso cuando no lograra entenderse.
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Tinta Negra
FanfictionJimin es hijo del jefe de una de las mafias más grandes de Corea. Jungkook es su novio, con el que ha estado saliendo por tres años. Durante todo este tiempo le ocultó la verdad por miedo a involucrarlo. Todo da un giro de 180° cuando una mafia enem...