Capítulo 13

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Contactos.

Kalissa Morton.

Un tiro tras otro sale de mi arma, pegando todos en los blancos que quiero.

¿Cómo me siento?

Mal, decepcionada y furiosa.

Hace días dejé que la rabia me controlará, sin embargo eso no es lo que me más me molesta.

Lo que me molesta es el hecho de que yo sabía que había un niño, yo estaba consciente de eso pero por algún motivo al entrar, verla y escucharla decir pura basura lo olvidé.

Deje que el niño presenciara como tres hombres de negro le apuntaban a su madre hasta el punto de que ella lloraba sin parar, así como también dejé que presenciara como yo le daba varios golpes que dejaban sus mejillas rojas mientras le gritaba.

¿La mujer lo merecía? Ella se lo buscó.

¿El niño lo merecía? No, ni de cerca.

Al momento que clavé mi mirada sobre él pude recordarme a mi misma viendo la muerte de mis padres en vivo y en directo.

Ellos eran buenas personas y no merecían lo que les paso...

Una sonrisa triste se forma en mi rostro.

Claro que no lo merecían, solo me estaban protegiendo.

Me comprometo en todos mis casos pero la razón por la que me siento mucho más interesada con este en especial es por el mismo hecho de que mis padres murieron tratando de protegerme de esta misma red que tanto trato de destruir.

Esto no es algo nuevo, este no es un mercado moderno, simplemente que ha crecido tanto hasta no pasar desapercibido, pero esto ha estado funcionando hace siglos.

No quiero que otros niños tengan que quedarse sin padres o tengan que crecer solos y con traumas por el hecho de pertenecer a un mundo que está mal.

Esa es la razón por la que cree mi clan, claro, mis amigos me apoyaron en todo momento y todos terminamos especializándonos en diferentes ámbitos hasta llegar a ser lo que somos ahora...

Alexander no se encontraba ese día, extrañamente se encontraba con uno de sus amigos que había hecho en primaria los días anteriores, mamá y papá le dieron el permiso pensando que eso podría ayudarlo a integrarse mejor, lo que él realmente nunca supo fue lo que pasó esa noche.

Para cuando volvió a casa al día siguiente mi abuelo y yo concordamos decirle que nuestro padres habían muerto en un accidente automovilístico, lo que tenía bastante sentido dado que ellos solían ir en el mismo vehículo ya que sus trabajos quedaban a solo unas cuadras de distancia.

Cuando el clan se creó él no dudó en unirse, siempre me ha seguido, y yo a él. La familia es siempre primero, es lo que decimos y si bien es real que la razón detrás de esto es la justicia, no es la historia completa.

Quizá algún día se la cuente, sé que debo hacerlo pero la verdad es que después de tantos años aún no tengo el valor suficiente para mirarlo a los ojos y decirle que todo fue por mi culpa, que los mataron por mí...

-¿Por qué estás tan seria?- me pregunta la voz de Marcus en mi espalda mientras posa sus manos en mi cintura tirando mi parte inferior un poco para atrás.

¿Y él cuándo llego aquí?

-No quiero hablar.

-No necesitamos hablar...- sus manos se aprietan sobre mi cuerpo.

-Marcus...- lo reprendo.

-¿Estas de malas?

No contesto, solo disparo por primera vez desde que él está aquí, y por primera vez también fallo.

Vindicta ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora