𝐈𝐧𝐝𝐞𝐥𝐞𝐛𝐥𝐞- 𝐂𝐞𝐝𝐫𝐢𝐜 𝐃𝐢𝐠𝐠𝐨𝐫𝐲 [+18]

18. Era una vida perfecta

Cedric iba muy preparado a la habitación de Sophie, llevo la caja de condones porque...

¿Por que no?.

No sabía cuantos ocuparía y de solo pensarlo se sentía duro, cuando pasó una hora acostado seguro al 100% de que sus padres estaban durmiendo se levantó de la cama para ir a hurtadillas donde Sophie, su novia.

Que genial se oía...

Su novia.

Entro y al parecer ella lo estaba esperando porque ahí estaba encima de la cama sin taparse mirando hacia la ventana. La luz era tenue y ella llevaba un lindo camisón, carajo... un camisón.

—llegué.— susurró emocionado para gatear hasta ella, al parecer Smith ansiaba mucho su llegada porque al verlo gatear hasta ella sonrió abriendo sus piernas esperando a que llegara y se pusiera en medio de estas. Cedric tomo sus muslos haciendo que lo rodeara y soltó un gran gemido de satisfacción en sus labios besandola sin pudor.

Podía sentirla igual de desesperada que el lo que le gustaba aún más pero cuando ella lo volteó se sorprendió.— ¿Te gusto que fuera arriba Ced?.

El cerro los ojos al sentirla moverse, un calor recorrió su espalda y su erección pedía ser liberada.

—montame, haz lo que hiciste la otra vez...— susurró en un hilo de voz aguda.

Sophie sonrió tomando un condón mientras lo besaba, lo podía sentir gemir bajo ella lo que le gustaba aún más, pudo sentir como el se sentaba y quedaba cara a cara con ella.—... harás que me corra ¿No Sophie? Siempre has sido buena chica... lo serás hoy para mí ¿Cierto?.

Ella asintió rápidamente, diablos ¿Por que aceptaba las órdenes tan rápido?... es más, ¿Por que se mojaba más cuando el le daba órdenes?.

Gracias a su pantalón de pijama de tela ligera podía acariciarlo fácilmente, no quería parar sus caderas moviéndose sobre el porque sentirlo duro bajo ella definitivamente era algo tan caliente, más le gustaba sentir sus grandes manos apretar su piel mientras dejaba besos mojados y sonoros por su cuello y labios. Cedric ya no aguantaba más porque empezó a subir su camison hasta la cintura y se separó unos momentos para mirarla a los ojos dándole una sonrisa aturdida y excitada.

—¿Puedo?.— preguntó con las manos en su camisón, Sophie asintió y elevó los brazos haciendo que fuera más fácil el quitarlo, Cedric la volvió a apegar hacia el y se le fue el aire al ver sus pechos tan cerca, la miró a los ojos unos segundos y luego sus pechos nuevamente para subir su mano a tocarlos.

Cuando un gemido quejumbroso sonó de los labios de la chica fue suficiente para volverse loco y proseguir a pasar su lengua por su pecho para ver su reacción. Esa cara... lo ponía demasiado, tomo el condón y lo abrió pasándoselo para bajar su boxer liberando su erección.

—ponemelo tú.— susurró en medio de sus pechos, Sophie mordió su labio y asintió para presionar la punta y ponerlo en su miembro, el cerro los ojos disfrutando el contacto de la mano de ella, tan calida y agradable que lo hacia retorcerse. No pudo esperar y llevo su mano dentro de sus bragas para sentir lo húmeda que estaba.

—estas muy mojada.— soltó casi sin aliento, la siguió tocando y pasando sus dedos fácilmente por sus labios, es que la sentía moverse disfrutando su tacto y ya... ya no aguantaba más.— ¿Estas lista cariño?.

—si... si, quiero hacerlo ya.— murmuró corriendo su braga a un lado, el solo miro como la chica sola se acomodaba y bajaba sobre el con seguridad. La sensación de la primera embestida era tan buena que sus piernas se recogieron ligeramente, cuando llegó a la base cerró los ojos.