No eres un heroe

Corto 5: "El ciervo"

Las guerras nunca empezaron
por un león

Siempre fue el ciervo al descubrir
que podía morder la mano
que le daba de comer

Que podía revelarse

No sé porqué confié en él

Quizá porque nos pareciamos.

✎⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝⸝

Aguanté la respiración, me encontraba recostada en el piso, meditando, o al menos, intentaba dejar los pensamientos fluir, no quedarme con ellos, sin retenerlos, simplemente, dejarlos correr, con mis manos estiradas, casi tan concentrada como para escuchar a alguien aproximarse.

El ruido del agua era más fuerte.

-¿Funciona?.

Me levanté de inmediato, asustada, rodé por el piso para tomar la katana con mis manos y apenas manteniendo el equilibrio por la velocidad del giro, logré amenazar con el filo.

>>Vengo solo- levantó sus brazos con una sonrisa, mostrandome sus manos vacías.

Vacías, excepto por una carpeta.

>>No quiero pelear- lanzó la carpeta hacia mi y soltando la katana, confié mi seguridad en ella, la abrí al instante.

Fotos de mi madre cayeron al momento en que separé ambas tapas, una hoja de información médica que me daba igual y luego, un informe de misión titulado.

Operación contenedor N°021

Un número muy grande como para ser real, pero me lo creí.

-¿Desde cuando somos amigos Kabuto?.

Sonrió sentandose frente a mi, no llevaba su banda, sin embargo, si sus guantes con placas de metal.

Me mostró sus dientes en la sonrisa, como si estuviese embelesado ante la torpeza de mi pregunta.

-¿Desde cuando me llamas Kabuto?.

Sonreí de regreso, tan falsamente como él, porque al final, no era confianza lo que sentíamos por el otro.

-¿Como está la mano que te da de comer?.

Levantó sus hombros.

-Vivo, al menos...- no como la mía claro está, la mala broma se contaba sola.

Volví mis ojos al papel.

Estado de misión: Fallida, cerrada.

Realmente no había nada del otro mundo allí, un informe de misión como cualquier otro e información poco relevante, pero para alguien que no sabía nada como yo, era todo.

>>Lord Orochimaru no va a extrañar esos papeles después de todo... Pensé que tal vez querrías alguna foto o algo así- estiró su mano hasta mi, girando el papel, enseñándome lo que era una fotografía de mi, como una bebé.