Mi Bella Durmiente |Juliantina

Capítulo 13.

Libro: El Perfume.

"Su tesis era que la vida sólo puede desarrollarse a cierta distancia de la tierra, ya que está emana constantemente un gas putrefacto."

੭

De nueva cuenta le dio un trago a su bebida, estaba aburrida, y pensaba que esa palabra quedaba corta con lo que en verdad sentía. Juliana se encontraba en una fiesta, ¿de quién? Lexa la había invitado.

"Tienes que relajarte de vez en cuando Juliana."

¿Relajarse? Se siente completamente relajada, no tienen por qué decirle esas cosas, suspiro y miró alrededor.

La música era suave, no te llegaba a molestar, las pláticas entre los invitados eran constantes, el olor a cigarros provenía de la parte de afuera, justo en el patio trasero de la casa de Tarah, en dónde se realizaba la fiesta. El motivo una pequeña fiesta de graduación de la chica, pues había logrado terminar la universidad y había invitado a la mayoría de sus amigos y compañeros.

El olor ligero del alcohol se sentía en el aire caliente, Juliana se encontraba en la sala de estar, de hecho, la mayoría se encontraba allí, miro en otra dirección, Katherine se encontraba platicando animadamente con un par de chicos de los cuales Juliana no tenía ni idea de quienes se trataban.

En otra parte se encontraba Laila escondiéndose de Janice, pues no quería que la cacharán plena calada de cigarrillo mentolado. Lexa había ido por otra cerveza, mientras que Isabella se la pasaba en su celular, seguramente jugando o leyendo algo, pero por las risas que soltaba a veces, Juliana supuso que estaba seguramente leyendo chistes.

—¡Hey Juliana! —dijo alguien a sus espaldas.

La pelinegra se giró sobre sus talones para ver de quien se trataba, un chico pelinegro se acercó a ella, era Sergio.

Juliana no era de palabras con Sergio, ¿razón? Valentina, resulta que a Valentina siempre lo alejaba o aparecía antes de que una conversación sucediera de verdad con esos dos, pero Valentina tenía sus razones para hacer eso.

—Hola, Sergio —dijo Juliana su tono de voz no salió tan animado.

—¿Qué te parece la fiesta? Divertida, ¿no crees?

—Sí, mucho —Juliana no se estaba divirtiendo, al contrario, quería irse de allí.

Sergio le sonrío.

—¿Cómo va Carvajal? —pregunto.

—Ha mejorado, poco a poco, espero despierte pronto —dijo Juliana más para sí misma que para aquel que la observaba.

Sergio sonrío, era una buena oportunidad para él, después de todo no se encontraba Valentina.

—¿Qué dices Juliana, quieres salir conmigo?

La pelinegra había escuchado la pregunta, pero Sergio en vez de recibir una sonrisa de parte de Juliana, recibió solamente una mirada seria.

—No estoy interesada —contesto la pelinegra.

—¿Por qué no? No está tu guardaespaldas, así que deberíamos, ¿o qué? ¿Te gusta la chica vegetal?

Juliana no aguanto, chasqueo la lengua y enseguida le dio un golpe de puño cerrado en la mejilla izquierda de Sergio, el chico perdió el equilibrio y cayó al suelo mientras se sobaba la mejilla lastimada, miró a Juliana.

—¡No vuelvas a nombrarla de esa manera, imbécil! —espeto Juliana y seguido salió de la casa bajo la atenta mirada de todos.

੭

Dio un gran suspiro cuando entro a la habitación, miro a Valentina quien aún seguía en su profundo sueño.

—Hola Val —sonrió—. ¿Me creerías que he golpeado a alguien? Lo sé, me dirías que la violencia no es lo correcto para arreglar algo, pero... a veces si es necesaria.

Respiro profundo.

—He traído un nuevo libro para leerlo para ti —dijo—. Creo que te diste cuenta, he mejorado mi habilidad lectora, siento que incluso leo cada vez más rápido para ti, ¡no quiero leerte rápido! Me gusta más lento, es como saborear las palabras.

Juliana abrió el libro y allí se encontraba una nueva nota, aquellas notas ya era tan familiares para ella, que inclusive se le hacía extraño cuando veía otros libros, pues no contenían la nota que Valentina siempre dejaba escrita a puño y letra.

"¿Te imaginas crear o tener algo tan increíble y único? Juliana, la verdad es que no puedo, no existe tal cosa, o ¿tú ya encontraste lo que para ti es increíble y único? Algo con lo que puedas decir, que no necesitas nada más en este mundo."

—Sí, lo he encontrado, y lo estoy viendo justo ahora, Valentina eres ese algo que puedo decir que no necesito nada ni a nadie más en mi vida y en este mundo.