Capítulo 10.

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Libro: Nada.

"Nada importa. Hace mucho que lo sé. Así que no merece la pena nada. Eso acabo de descubrirlo."

Juliana se encontraba en el apartamento de Katherine, ambas se habían reunido para platicar un rato, tenían ganas de estar con una amiga, era la décima semana y ella aún no despertaba.

—¿Irás? —preguntó Katherine mientras le entregaba una taza de chocolate caliente.

—Sí —suspiró—. Hoy inició con el décimo libro para ella.

Katherine le dio un trago a su bebida, era tan dulce. Juliana miraba el contenido de su respectivamente taza, quería esperar a que se enfriará solo un poco, no quería quemarse la lengua.

—Dile que despierte, quiero hacerle una taza de chocolate caliente. Estos fríos cada vez parece que empeoran.

—Tienes razón, y le diré tu mensaje, ¿pensé que a Valentina no le gustaba el chocolate caliente?

—No le gusta, dice que el café es el Dios de las bebidas calientes.

Juliana sonrió.

Era cierto, Valentina se mantenía siempre con su taza de café en las mañanas, a veces tomaba uno en las noches y muy pocas veces en las tardes, no solía pedir más que un americano, frío o caliente le encanta, aunque a Juliana no le gustaba la idea de que no lo consumiera con azúcar.

—¿Qué libro le vas a leer ahora? —pregunto Katherine.

—Pues —le enseñó la portada, era gris con letras grandes que decían claramente la palabra "NADA"—. Es este, ¿lo has leído?

Katherine se acercó a ver la portada de aquel libro que le mostraba Juliana cuando lo vio, recordó que había acompañado a Valentina a comprarlo, más no lo había leído.

—No lo he leído. Supongo que también es la primera vez que lo vas a leer ¿no?

—Sí, espero que le guste, bueno es obvio que ya lo ha leído, pero a vece siento que no leo lo suficientemente bien para ella.

—Sabes que Valentina no diría lo mismo —dijo Katherine dándole una palmadita en el hombro derecho a Juliana—. Para Valentina tú siempre haces las cosas bien.

Y Katherine no se equivocaba, Valentina siempre apoyaba a Juliana en cualquier cosa que hacía, sobre todo cuando Juliana se sentía derrotada en algunas ocasiones, Valentina allí estaba para apoyarla, Juliana se sentía muy comprendida al lado de aquella chica rubia.

Juliana le dio un sorbo a su bebida caliente, el frío era tanto que había entibiado el chocolate caliente en su taza, así que para ella fue más fácil y rápido tomarlo.

—Me tengo que ir Katherine, nos vemos después —dijo Juliana mientras ponía su taza en el lavavajillas.

—Nos vemos luego Juli, envíale un abrazó a Valentina de mi parte.

Juliana dio un gesto de asentimiento y con el libro en sus manos salió del apartamento de Katherine para dirigirse al hospital.

—Diez semanas Val —dijo y dio un suspiro—. Ya es mucho tiempo y aún te traigo libros para entretenerte.

Juliana tomó su respectivo asiento y puso el delgado libro en su regazo.

—Este libro es muy corto, ¿no crees? —comento mirando el libro—. Pero trataré de leerlo en una semana completa para ti, me pregunto ¿a qué se refiere con nada? Aún no lo entiendo.

Miró a Valentina.

—Apuesto a que si estuvieras despierta me dirías que para entenderlo hay que leerlo, y bueno tienes razón, después de todo es la única manera de quitarme de la duda —hizo una pausa—. Katherine te envía un abrazó, lástima que no pueda dártelo, siento que si lo hago posiblemente te desconecte de alguno de esos aparatos ¡y no quiero que eso suceda!

Juliana agarró la mano de la más pálida y la acarició con sumo cuidado, como si tuviera ella temor de que la mano de Valentina se rompiera, era como si estuviera acariciando los frágiles pétalos de una flor.

—No me han informado de los avances que has tenido hasta ahora, pero supongo que a Madeline si le han dicho, después de todo es quien pide más información de tu estado de salud.

Juliana dejo de acariciar la mano de Valentina.

Abrió el libro de nueva cuenta una nota escrita a mano en aquella página en blanco.

"¿En verdad nada importa? Juliana, recuerda que todo tiene un significado, así sea lo más patético y absurdo, así sea lo más importante, así sea lo que menos creas importante, todo tiene un significado, y a pesar de que todo sea repetitivo, lo único importante es vivir cada día como si fuera el último."

—Todo vale la pena Valentina, cada minuto que paso contigo vale la pena, y a pesar de que algunos piensen que no es así, que pierdo mi tiempo leyéndole a alguien que tal vez ni siquiera me escuche, sé que lo que hago vale la pena, porque lo hago para ti.

Mi Bella Durmiente |JuliantinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora