☆•𝐂𝐀𝐓𝐎𝐑𝐂𝐄•✩

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Sin duda algúna, despedirse esa noche de Gulf, fué lo más difícil de su vida, estar con él eran los únicos momentos buenos de su vida , por más que lo pensara una y otra y otra vez, no podía creer que todo aquello iba a desaparecer sabrá Dios por ...

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Sin duda algúna, despedirse esa noche de Gulf, fué lo más difícil de su vida, estar con él eran los únicos momentos buenos de su vida , por más que lo pensara una y otra y otra vez, no podía creer que todo aquello iba a desaparecer sabrá Dios por cuanto tiempo , iban a separarlo de él, y no solo eso , de su mundo entero, sus libros, sus estudios, de todo , y todo esto , a causa de...

— ¡¡Querido Hermanito!! ¡¿En dónde estás?! — La voz de San nunca le había parecido tan frustrante y desagradable como le sonó en esa ocasión — Sabes, planeaba despedirme de tí como se debe antes de que te fueras —

— Lárgate, por supuesto que no quieres despedirte . ¿Tú piensas que soy idiota? —

— Un poco, sí. —

— Imbécil — Balbuceó Mew.

— ¡Mira! Ahora sí te defiendes , aunque claro , tan imbécil no soy, después de todo he logrado sacarte de la casa ¿Cierto? — le guiñó un ojo.

— Por supuesto que sí, querido hermanito — Aquello hizo a San fruncir el ceño, años habían transcurrido desde que Mew no lo llamaba así — Pero déjame preguntarte algo San — El nombrado guardó silencio —  ¿Lograrás mantenerte alejado de todo esto? —

— ¿A qué te refieres? — Preguntó con voz seria, el gemelo mayor.

— Ow — Mew hizo un puchero fingido — El idiota de mi hermano es tan estúpido que necesita una explicación — San lo miró Furioso — Pues aquí te va tu explicación: Durante muchos años he intentado respetarte y quererte, incluso aunque tú no lo hayas hecho conmigo. He intentado ser paciente hasta más no poder a pesar de que tu patética y estúpida vida se basaba en hacer la mía imposible y fastidiarme hasta el cansancio. Nada . Nunca en la vida te hice , ni te he hecho nada, aún así , te volviste mi verdugo desde los doce años , te volviste mi tormento y mi diablo personal — San tragó grueso, el solo hecho de la seria voz de Mew lo había descolocado un poco, pero no le daría el gusto de demostrarlo, claro que no.

— ¿Y qué con eso? — Intentó sonreír de forma segura — Si tu intensión es decirme algo importante, pues hazlo ahora , recuerda que ya no te queda mucho tiempo en esta casa — Mew sonrió.

— Claro — Río , San frunció el ceño, estaba nervioso, Mew siempre solía guardar silencio y simplemente agachar la cabeza — Lo lograste , te libraste de mí... — San se encogió de hombros y sonrió victorioso — Por ahora — Aquella frase lo descolocó un poco más , frunció el ceño — Déjame recordarte hermanito, no me quedaré en ese lugar para siempre, voy a salir , voy a volver , y cuando lo haga... — Mew clavó sus ojos sobre los de San, y este por un momento sintió que sus piernas flaquearon — Te juro por Dios que no seré tan amable, no, mejor dicho sería: ya no seré nada estúpido. ¿Todo este tiempo has creído que te molesto? , espera a que vuelva, ya verás San , seguramente jamás te has detenido a pensar en lo que podría hacer — San tragó grueso.

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