☆•𝑴𝑨𝑹𝑮𝑰𝑵𝑨𝑫𝑶•✩ - [✓]

☆•𝐕𝐄𝐈𝐍𝐓𝐈𝐒𝐈𝐄𝐓𝐄•✩

Es extraño, cuando algúna vez creíste en el hecho de que alejarte de alguien a quien amas, te haría sentir bien a tí y a esa persona , o que tal vez era lo mejor . Pero tu corazón sufre su ausencia, llora su presencia y en cada latido reclamas el escuchar su voz, en cada parpadeo añoras contemplar sus ojos y aquella hermosa sensación que provoca en tu interior.

Es extraño . Es extraño que hagas algo bueno que termina siendo malo únicamente ,es doloroso que tomes una decisión cuando tu corazón está roto y que pongas tus esperanzas en que esa decisión cambiará para bien absolutamente todo , pero que al final no hace más que destruirte y llevarte al mismo infierno.

¿Algúna vez lo has experimentado?.

Bueno, Bae Yong sí. Hace más de diecinueve años que decidió abandonar a la única persona que su corazón llenó, a la única persona que logró cautivarlo , aquel bello ser que siempre fué seguro de sí mismo, aquel que no hizo más que traerle alegrías y sonrisas. Nunca supo porqué temió tanto en aquel entonces, sus piernas habían flaqueado y su corazón golpeteaba con fuerza cuando se le fué anunciado que se volvería padre.

¿Padre? . ¿Qué rayos sabía él de ser padre con tan solo 22 años?.

Si había algo de lo que él se arrepentía, eso era de haber sido un completo estúpido aquella noche, esa noche en la que incluso el cielo lloró junto a Chai el abandono de Bae. Por su mente muchas ocasiones cruzaron las preguntas : ¿Habrá sido niño o niña? ¿Habría sido un buen padre? ¿Chai lo estará haciendo bien?. Muchas veces intentó volver, regresar , arrodillarse y pedir perdón tantas veces como fuere , pero sucedía que su conciencia remordia y le decía que el fruto de su amor estaría mejor sin él .

Sin el hombre que en una noche lluviosa y con rayos azotando , abandonó a su padre de rodillas frente a su casa , sin el hombre que a pesar de las súplicas que le fueron dadas, abandonó a la única persona que algúna vez amó. Su llanto no valió nada esa noche, hasta el llanto de un cocodrilo podría tener más valor comparado al suyo , la cobardía de esa noche no se la perdonaría JAMÁS, y se culparía por todo.

Y era ahora , en este preciso momento en el que se culpaba aún más por todo . Si tan solo él jamás hubiera actuado tan estúpidamente, si tan solo él no se hubiera ido esa noche, si tan solo hubiera estado presente para sus hijos. Esto no estaría sucediendo, si tan solo él hubiera apoyado a Chai, San hubiera tenido una mejor educación y jamás se hubiera vuelto el verdugo de su propia sangre, de su propio hermano.

Sus piernas temblaban y su corazón latía descontrolado, sus manos sudaban y el viento a su paso era capaz de arrebatarle las lágrimas que se aproximaban por sus ojos. Todo su cuerpo temblaba y la angustia era capaz de devorar todo dentro de él. No era un buen padre, nunca lo hubiera sido , se alejó diecinueve años y ahora que la vida le daba otra oportunidad , también había hecho todo mal.

Su hijo estaba ahí, tirado en el suelo, su abdómen sangrando mientras él estaba completamente inconsciente, la razón le susurraba que estaba muerto, más su corazón le dictaba otra cosa.