Capitulo 13

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El apodo de "Hollywood" se lo habían puesto quince minutos después de que firmara su primer contrato con Los Angeles Condors, lo que seguramente decía algo sobre su "magnetismo".

Guardó silencio. Los reporteros eran como las hormigas. Si se interponían en su camino, los pisaba. Si se quedaban a un lado, los ignoraba.

Ella lo siguió.

-¿Es verdad también que no conocías a Clare Garrison hasta ayer, cuando la policía te detuvo por voyeur?

Harry se preguntó si la reportera habría hablado con la amiga de Clare. Mantuvo la vista fija en la entrada del hospital.

Ella alzó más el micrófono, acercándolo a la boca de él.

-¿Por qué has venido aquí?

Harry se limitó a sonreír, principalmente porque la pregunta resultaba irritantemente divertida.

-Quizá -continuó ella- no estés al tanto de que Clare Garrison se ha marchado con Ryan Michael Garrison hace solo unos minutos.

Harry empujó la puerta giratoria del hospital, dejando a la reportera fuera.

Ryan Michael Garrison.

No, no lo sabía, pero no iba a aceptar la palabra de aquella chica. Clare no tenía que salir del hospital hasta el día siguiente. Le había dicho que esperaría su visita antes de rellenar ningún documento importante.

Cinco minutos después, él llegaba a la habitación de Clare y la encontraba vacía. El olor a antiséptico y a limpiador de pino penetró en su olfato. Una voluntaria de ochenta años entró tras él. Llevaba el pelo canoso sujeto con una cinta roja, a juego con el color de sus labios.

Él dejó el ramo de flores sobre la cama vacía.

-Se ha ido -dijo.

La anciana le sonrió.

-Ha dicho que usted lo entendería, puesto que ella tenía que empezar los preparativos para su boda.

-¿Boda?

La mujer le dio un codazo.

-Perdón. Olvidaba que su amiga ha dicho que era un secreto -se llevó la mano a los labios y fingió que cerraba una cremallera.

Harry forzó una sonrisa.

-¿Sandy? -preguntó.

-Sí, Sandy. Una chica muy simpática.

-No lo sabe usted bien.

Harry tomó las flores y se las dio a la anciana.

-Para usted -dijo.

Salió de la habitación y fue al ascensor. ¡Y pensar que Clare había tenido el valor de llamarlo mentiroso cuando ella tenía pensado escapar!

-Le dijo la sartén al cazo... -murmuró para sí.

****

-No puedo creer que haya llegado a esto -dijo Clare-. Me siento como una fugitiva.

Sandy soltó un bufido.

-Los fugitivos huyen. Tú te vas a casa. No has hecho nada malo. Ese hombre no tiene derecho a cobrar por su semen y luego pedir que se lo devuelvan como si solo hubiera dado una sudadera o algo así.

-Mamá -preguntó la hija de cuatro años de Sandy desde el asiento de atrás-. ¿Qué ez un cemen?

Sandy miró a Clare y luego volvió mirar la carretera.

-He dicho examen -explicó a Lexi-. Es algo que se hace a los estudiantes para que me demuestren lo que saben.

-¿En el colegio?

-Pues sí.

-¿Cómo está Ryan? -preguntó Clare a Lexi, aunque podía ver perfectamente a su hijo desde el asiento del acompañante-. ¿Sigue durmiendo?

Lexi miró el bulto del asiento de atrás.

-Ha movido la pierna. Creo que quiere zalir.

-Ya casi hemos llegado, hijita -intervino Sandy-. Solo unos minutos más.

-¿Qué voy a hacer? -preguntó Clare-. No puedo creer que haya llegado a esto.

-Tienes que mantenerte fuerte. Harry Styles quiere a su hijo. No me gustó desde que lo vi en el parque sentado en ese coche pijo suyo. Y cuando vi a su abogada en las noticias, confirmé mis sospechas. Quiere a Ryan y hará todo lo que pueda, todo, por quitártelo.

-No sé -repuso Clare-. No me pareció el tipo de hombre que quiera quitarle un niño a su madre. Tendría que haber hablado con él antes de irme del hospital. Salir huyendo un día antes de tiempo me parece un poco precipitado.

-Antes de que vuelvas a hablar con Harry Styles, tenemos que buscarte un buen abogado. Además, necesitamos contactar con CryoCorp y ver lo que pasa. Si alguien está filtrando información de clientes, tienen que saberlo. Yo, por ejemplo, no quiero a ya sabes quién -hizo una seña con la cabeza; Clare sabía que se refería al padre biológico de Lexi- llamando a mi puerta cuando menos lo espere.

También es mi hijo  || H.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora