Chris P.O.V
No sé por qué, lo único sé es que últimamente he estado yendo mucho a la enfermería de Daniel. Antes en ninguna ocasión había tenido necesidad de acudir con el enfermero, ni siquiera si me golpeaban cuando jugaba (porque nunca me golpean), y ahora asistía casi todos los días.
Desde aquel día comencé a terminar herido cada vez que jugaba, en todos los partidos, en cualquier deporte.
Y aquí voy de nuevo:
Abrí la puerta, siendo cegado por la luz.
–Ah, hola, ¿de nuevo aquí, Chris? ¿qué acaso juegas fútbol americano?– preguntó molesto.
–¡Cállate, no es eso!– lo silencié –Deberías de cambiar ese foco, aluza demasiado– y entré, sentándome la silla que está junto a la ventana..
–Sí, tienes razón– miró hacia el techo, yo también lo hice.
Nos quedamos un par de minutos como idiotas viendo el foco.
–Bien, ¿y ahora qué pasó?–
–Estaba jugando soccer y entonces me patearon en la pierna con los tacos. Duele como el infierno-- – estaba explicándole, hasta que me interrumpió.
–¡No digas groserías!–
–¿Quién dijo groserías?– pregunté confundido.
–Dijiste "como el infierno". Eso es grosero para mí– se puso ambas manos en la cadera.
–¡Pero eso no es grosero!–
–Se supone que no deberías decir groserías. Eres demasiado lindo como para que tus labios digan tales blasfemias–
–¡¿Li-lindo?!–
Asintió.
Me sonrojé y me hundí en mi asiento, cruzado de brazos.
–¡¿M-Me vas a revisar ya o qué?!– pregunté avergonzado.
Levantó una ceja y sonrió seductoramente.
–Parece que alguien está impaciente porque lo toque– comentó divertido, aún sonriendo.
Me sonrojé de pies a cabeza.
–¡N-No es eso!– me apresuré a decir.
Rió.
Me hundí más en el asiento.
–Bueno, veamos lo que tenemos aquí–
Tomó mi pierna y la movió.
–¡No! ¡Duele!–
–A lo mejor te torciste algo– lo movió un poco más y me volví a quejar.
Siguió revisando un poco más.
–No, estás bien. Aparecerán unos cuantos moretones, pero sólo es eso–
Suspiré aliviado.
Él se giró para escribir algo en su cuaderno.
–De todos modos, ¿por qué has resultado lastimado en los últimos días? ¿Antes no practicabas deportes o qué?– me preguntó sentándose en la punta de su escritorio, mirándome de frente
–No es eso. No sé porqué, desde la primera vez que estuve aquí he tenido accidentes en los juegos y me han lastimado– yo estaba serio. En serio, antes no tenía estos problemas –Cada vez que estoy jugando, me siento raro y…una sensación de soledad y nostalgia me recorre el cuerpo– dije abrazándome a mí mismo.
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Amor Primaveral (Yaoi) (Editando la redacción)
RomanceHaruo es un estudiante ganador de una beca en América, por lo que es transferido a la escuela Fiore casi a finales de año, en primavera. Junto con su llegada al país aparecen nuevos amores, rivales y situaciones comprometedoras que pondrán a prueba...