Amor Primaveral (Yaoi) (Editando la redacción)

Una chica extraña

Haruo's P.O.V

Al final, no fuimos al cine porque me acobardé en el momento en que Nathan pedía las palomitas; sentía que robaba al cine. Así que, pasamos a comprar dulces por ahí, pero la mayoría se los comió él.

Me besó un par de veces en público, a lo que yo respondí avergonzado por la gente que nos miraba al pasar. Algunos tomaron fotos, incluso con flash, ¡y a Nathan le importó un rábano! ¡Yo sólo podía patalear intentando que me soltara!

Ahora, regresábamos a la habitación, caminando por un largo y blanco pasillo lleno de luz, aunque las aulas ya estaban con seguro y ni un ánima caminaba por aquí.

—¿Te divertiste? —me pregunta sonriéndome.

—Sí —respondo cansado. Aún estoy un poco conmocionado.

Y ahí está su mano, de nuevo, burlándose de mí y mi gran cobardía.

¡Ya qué importa!

Tomé su mano y entrelacé nuestros dedos.

—Uh, ¿Haruo?– pregunta entre incrédulo y extrañado, con una gran sonrisa.

Me sonrojé.

—Ah, yo, no... —estaba nervioso —. ¡Lo siento! —estuve a punto de separar nuestras manos pero no me lo permitió, y apretó con más fuerza las nombradas.

—¿Qué haces? — se le notaba irritado —. Primero tomas mi mano y luego la sueltas.

—Yo p-pensé que t-te había dis-disgustado.

—Me sorprendió, sí, pero no quiero que te alejes —Y apretó un poco más.

Recorrimos el resto del pasillo de esa forma: tomados de la mano. Yo sonriéndole a Nathan y él a mí, mirándome con su penetrante mirada azul, y yo a él con mis ojos amarillo pollo.

Y de entre todas las personas que esperé encontrarme por aquellos pasillos, en plena noche, ¡nunca imaginé que me reencontraría con Matthew-senpai!

—¡Matthew-senpai! ¡Matthew-senpai! —exclamé alegre, jalando a Nathan para que me siguiera ya que todavía estábamos tomados de la mano.

Matthew-senpai dirigió su mirada hasta nuestras manos que se encontraban unidas, apreciándolas con una sonrisa, y al darme cuenta de a dónde estaba viendo el senpai, no pude evitar ruborizarme.

—Vaya... —exclamó mirándonos pícaramente, con una sonrisa de la misma naturaleza.

—¡No, n-no es...! —Me sentiría extraño si el senpai supiera que mantengo una relación con otro hombre, pensé que comenzaría a repudiarme o ya no se me acercaría, evitando el contacto físico conmigo, el asqueroso homosexual.

Mas, él sonrió.

—Tranquilo —habló tranquilo con su profunda voz, revolvió mi cabello y siguió su camino mientras encendía un cigarro.

Lancé un largo suspiro; al menos él tampoco se había alejado de mi lado.

Nathan chasqueó su lengua y apretó mi mano, provocando que yo dejara salir un pequeño gemido de dolor.

—Lo siento... —Nathan se mostró preocupado, arrepentido al escuchar mi quejido.

—Só-Sólo apretaste u-un poquito mi mano...–

—Lo lamento, no me gustó ver a ese tipo.

—¿Quién? ¿A Matthew-senpai?—pregunté mientras seguíamos avanzando.

Asintió apretando la mandíbula.

—¿Por qué? —pregunté inocente.

Un leve rubor se plasmó en sus mejillas; no me respondió.