Amor Primaveral (Yaoi) (Editando la redacción)

El pollo es bueno

Blake's P.O.V

Me siento horrible. Me duele la cabeza. Me duele el trasero. Me duele la garganta. El pecho. Los ojos. La espalda. Las piernas...

¡Me duele todo!

No sé qué diablos pasó anoche, pero siento que de alguna manera me acerqué más a Ethan. No sabría explicarlo.

"Hey, Ethan" le envié un mensaje. Hace como media hora que le he enviado el mismo y no ha recibido ninguno. ¿Y si el idiota se cayó del techo en la fiesta, murió y yo no me enteré? 

Me sujeté el pecho por un momento.

No, él es torpe, pero tiene suerte.

Estoy recostado sobre la cama, pensando en lo jodido que me siento. Preferiría matarme, yo, del techo a tener que seguir soportando esta migraña, además, tener la lengua seca es horrible; necesito a mi mamá, o alguien como mi mamá...

Alcé la cabeza buscando a James.

—Jaamess...

Rayos. De verdad no está.

Okay, probaremos con el suicidio entonces. Me acosté boca abajo en la cama, cansado hasta la médula.

★★°°★★°°°

Hace años que estoy buscando el maldito cereal para ese vago y no encuentro nada en este basurero. ¡A quién se le ocurre esconder una pepita de bronce dentro de una caja de cereal! Lo peor de todo es que el vago escondió la caja en un basurero. ¡ME LLEVARÁ AÑOS ENCONTRARLA! ¡Y LA NECESITO PARA ANTES DEL ANOCHECER SI NO QUIERO PERDERME LOS FUEGOS ARTIFICIALES DENTRO DE LA FUENTE DEL PIRATA!

Todo esto es tan estresante, en especial porque si antes de que los tres Soles caigan en el horizonte no encuentro la pepita, las ratas gigantes vendrán a comer mi cabeza.

Maldito vago.

"—¡Apúrate! "

Y me arrastró por todo el Antlantártico hasta llegar a un lugar hecho de nubes de colores, a las que si presionabas, se escuchaba música y salían rayos lásers. La música es muy fuerte y te obliga a bailar con ella; como mi tía Margaret.

"—¡Vamos! ¡No tengo tu tiempo, dormilón! " insistió.

"—¡Ethan, no me apresures que si no, te tiro al hipopótamo! "le respondí cansado.

Es que en serio Ethan no sabe que tengo prioridades con los animales semi-acuáticos del Parque Nacional de Me Importa Una Berenjena. Sus siglas son PANA...PANAME...¡PANAMERICANO! Tutututu, tututututu turu.

Aún así, Ethan, el físico astronómico especializado en mamadas, consiguió llevarme hasta el lugar donde las gordas nubes productoras de música bailaban. Pero de pronto estamos en un lugar pequeño, muy pequeño. De hecho, voy apretado. Ethan está a mi lado y hay algo que hace que no pare de rebotar; también, adelante de nosotros, hay una niña rubia de cinco años con dos coletas y un vestido rosa esponjoso que sostiene la mano de Haruo mientras no paran de tragarse entre ellos a besos , "—¡Cállate, llorón! ¡Métete en tus asuntos! " chilla esa niña molesta y estúpida.

Ethan está a mi lado y de un momento a otro, me besa.

Dios, qué bien se siente.

—Ah, sí, Ethan... —sonrío bobamente.

—¡Animal! ¡Animal! —alguien me está empujando, pero no sé quién.

—Ethan... —Lo nombro en su búsqueda.