—¿Te vas a ir?.— Me acerque a ella poco a poco y la tome de la cintura.
Puse mis manos en su cuello. —No, lo que siento por ti Juan, este gran amor que vive dentro de mi es más fuerte que todo. A lo mejor no tenemos culpa, fuimos víctimas del destino pero a mi en este momento ya no me importa nada, no me importan las consecuencias.— Me acerque un poco a el y lo bese lentamente. —Me muero por volver a ser tuya...
Seguí besandola la cargue y enredo sus piernas en mi cadera, la recosté en la cama y bese su mejilla, baje a su cuello poco a poco y ayude a desvestirla, baje su pantalón, acaricie su feminidad y eso la hizo estremeser, en cuanto pude yo también me quite toda la ropa, besaba su espalda y su pecho dejando marcas.
El me besaba por todos lados lento y placentero hacía todo tan lento que eso hacía que yo gimiera tan audible para que notara que lo estaba disfrutando y arañaba su espalda.
—Me encantas.— Decía mientras tomaba uno de sus pechos en mi mano y con la otra haciendo circulos rítmicamente en su clítoris.
—Quiero sentirte, te necesito dentro de mi Juan.— Decía casi sin aliento y sentí como acomodo su pene en mi entrada sentí como comenzo lentamente a introducirse y gruñi. —¡Aah!. Mmm... J... Juan.— apenas y podía decir su nombre el besaba mi cuello, subía a mis labios, luego bajaba por mi pecho y mi abdomen enrede mis caderas en sus piernas y le indicaba que me diera más y cada vez más fuerte, así lo hizo hasta que sentí que me venía... —Juan ¡Aaahhh!!.
—Te amo!!...— dije agitado solo salí dentro de ella me acomode a su lado y la abrace para de ahí quedarnos dormidos abrazados y tranquilos.
—Te amo Juan. Cada momento que e pasado a tu lado es tan perfecto como todo cuando estoy contigo.
—Daría lo que fuera porque en este instante ir a pedir el divorcio a mi esposa y que los dos estemos juntos para siempre.
—No digas tonterías.
—Oye, no es ninguna tontería hermosa. ¿O qué?. ¿Tu no lo harías?. ¿No te divorciarias?.
—No lo se, es complicado, no quiero lastimar a mis hijos ¿Sabes?. Ellos son la causa por la cual yo sigo casada con Carlos.
—Mejor dejemos de hablar de todo eso y hay que dormir hermosa. ¡Descansa!.
—¡Descansa Guapo!.— me abrace de el y me recargue en su pecho para cerrar los ojos y quedarme profundamente dormida.
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Llegue a la casa y solo me fui a bañar rápido, fui a hacerle el desayuno a mis hijos, me despedí de ellos y me sente a esperar a que Carlos despertará, vi que se movía y decidí mejor no hacerle ruido. Desperto y me vio. —¡Buenos días!.
—Hola mi amor, ¿a qué hora te levantaste?.
—A tiempo para darle de desayunar a los niños y que se fueran a la escuela.
—¿Y qué hora es?.
—Van a dar las 8. Ten.— Le di un jugo que le prepare. —En un momento le digo a Manuela que te suba el desayuno. ¿Cómo te sientes?.
—¡Mejor!.
—¿Y el dolor?.
—Ya casi no se siente.
—¿De verdad no quieres ir a el hospital?. Yo pienso que deberían hacerte una radiografía o algo.
—No, de verdad no tiene caso, mi amor el pie se va a sanar solo ya verás.
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~•DIECINUEVE•~
RomanceInfidelidad, muerte. ¿qué es peor?. Tu solo quieres estar con el hombre que amas, es solo una "aventura" ¿Qué podría pasar?. Itati debe decidir si mantener su familia estable y su matrimonio a flote o estar con el hombre que de verdad ama.