—Pero hija ¿A dónde vas tan bella?.
—Alexis me invito a una fiesta en su casa mamá, tengo que ir.
—¿Llegaras temprano?.
—Lo más probable no creo quedarme mucho tiempo de seguro sera aburridisima. ¿Porqué?.
—No, nada más. Tati pero quedate más tiempo no veo necesario que te vallas rápido de la fiesta.
—Ay mamá no estoy ahorita de ánimos para quedarme hasta las 3 de la mañana en una fiesta y mucho menos porque no quiero dejarte sola con los niños, ya vez que mi papá se fue a Argentina y no regresa como en dos semanas. Incisto en que te hubieras ido con el.
—No ¿y dejarte a ti sola con tu problema?. Mejor me quedo a cuidarlos. Y los "niños" como les dices no lo son ya son muy grandes y pueden cuidarse solitos.
—Pero la que más me preocupa es María, es con la que más e discutido y solo quiero llevarme bien con ella.
—Ya veras que todo se va a resolver.
—Bueno me voy madre, regreso como a las 10.
—Esta bien, me avisas si se pone buena la pachangona y si te quedaras más tiempo.
—No lo creo pero yo te aviso ma.
.
.
.
.
Llegue a la fiesta y todo mundo se me quedó viendo, tome una copa y Alexis vino a saludarme.
—¡Itati!. ¡Llegaste!.
—Claro que si, no podía faltar en esta fiesta maravillosa.
—Dame un momento, tengo que ver a alguien rápido ¿okey?. No te vallas.
—Mjhm.— Dije que si con la cabeza. De pronto todos se empezaron a poner a mi alrededor y comenzaron a intimidarme y hacerme preguntas.
—¿Cómo estás Itati?.
—Muy bien.
—¿Oye que tú no estabas embarazada?. ¿Porqué estás tomando?.
—Si, lo estaba hace poco perdí a mi bebé por un accidente que tuve y estuve en el hospital.
—Pero que raro eso no se hablo en las noticias ni nada.
—No, no quería que se supiera y me causara más revuelo.
—¿Y tú marido?. ¿No vino contigo?.
Eran tantas preguntas que me habían hecho entre todos que me incomode mucho, me quería ir pero tampoco quería ser grosera, de pronto sentí como alguien me tomo de la cintura.
—Lo siento señoras, señoritas y señores se las tengo que robar por un momento.— La saque de esa bolita en la que estaba atrapada y la traje a un lugar donde solo estábamos los dos. —¡Hola Itati!.
—¡Juan!.— Lo abrace. —No sabes cuando te extrañe.
—Yo también te extrañe muchisimo, perdóname mi amor, perdón por todo lo que te dije antes.
—No es necesario, no tengo nada que perdonarte. Soy yo la que debe pedirte perdón, me entregue a Carlos cuando se suponía que te amaba a ti pero jamás quise hacerlo.
—¿Te obligo?. ¿Te hizo daño?. ¿Te maltrato?.
—Hh...
—¿Te hizo algo?. Dime y en estos momentos voy y la parto toda la cara.
ESTÁS LEYENDO
~•DIECINUEVE•~
RomanceInfidelidad, muerte. ¿qué es peor?. Tu solo quieres estar con el hombre que amas, es solo una "aventura" ¿Qué podría pasar?. Itati debe decidir si mantener su familia estable y su matrimonio a flote o estar con el hombre que de verdad ama.