No lo dude ni tantito, me puse los zapatos y me fui corriendo a verlo. —Valla, hasta que te dejas ver. ¡Desapareciste!.
—Perdoname de verdad.
—No te preocupes, se que estuviste muy mal. Dime ¿fuiste a la fiesta de Gala?.
—Si, pero me fui rápido porque vi a un amigo y nos tomamos unos tragos.
—Debe ser un gran amigo para que no fueras ni a saludarme.
—Pues no estabas tan sola eh digo porque yo te vi muy bien acompañada de ese tal Pedro Fernández.
—¿A si?.— Reí un poco. —¿Celos?.
—No ps, poquitos nada más y te digo poquitos para que no te la vallas a creer.
—Ay no.— Carcajie. —No me la creo, soy bastante codiciada.
—¿A si?.— Comencé a acercarme poco a poco. —¿Qué tan codiciada?.— La agarre de la cintura y la bese de sorpresa, sentí como pasaba su mano por mi cuello, nuestras bocas se extrañaban, extrañaba ese aroma único que tiene.
A la mitad del beso me separé algo apenada. —Juan, juan es mi casa.
—Acompañame.— La subí al coche.
—¿Qué haces?.— Me subí.
—Te invito a pasear.
—¡Estás loco!.— Me acerque a el y lo volví a besar, nos besabamos con tanta pasión, el beso era rápido y apasionado.
Comence a besar su cuello de manera que hacía que soltara pequeños gemidos audibles, baje y subí mi mano por su vestido acariciando su pierna e intentando llegar a su entrepierna y la acomode en el asiento intentando subirme arriba de ella pero me detuvo.
—¡Aah!. Noo, no Juan, Juan, Juan espera no.
Me acomode en mi asiento agitado sintiendome deseoso por estar con ella y por accidente toque el claxon.
—Shh, ¿no ves dónde estamos?.
—Sssi, si perdon es que, me encantas mucho.— Dije un poco agitado —Y no puedo aguantarme disculpame, de verdad.— Volví a besarla pero esta vez lentamente, se volvió a recargar en el asiento abrazandome y profundizando nuestro beso. —Te extrañe tanto mi flaquita hermosa.
—Y yo a ti güero precioso.
—¿No quieres que nos vallamos a un lugar más privado?.
—Voy a donde quieras llevarme.
Arranque el coche y me fui directo a el hotel que siempre nos veíamos, pedimos una habitación, ella se acomodo en la cama y hablo.
—Quiero ser tuya.
No lo pense dos veces, me quite el saco y la camisa rápido y me fui acercando a ella volviendo a besarla lentamente, por todo el cuerpo, baje el cierre de su vestido y lo quite poco a poco. Nuestra respiración se aceleraba, vi como estaba postrada en la cama, me acomode en sus piernas para penetrarla, entre poco a poco y ella gimió de placer.
—¡Juan!. ¡Aah!.— Enrede mis piernas en sus caderas, sus embestidas eran cada vez más rápidas y fuertes hasta que mi cuerpo no resistió más, me movi rápido y ya estaba encima de el saltando arriba y abajo y moviendo mis caderas lentamente. Se paro para quedar en horcajadas y yo clave mis uñas en su espalda y mordiendo suavemente su hombro. Sentí como eso hizo que los dos nos corrieramos al mismo tiempo y caímos rendidos en la cama.
Mi cuerpo cayo al lado suyo hundiéndose en un silencio donde solo se escuchaban nuestras respiraciones agitadas y entonces volvimos a besarnos para apagar el fuego de pasión que se volvió a encender.
.
.
Amaneció y al verla a mi lado me puso tan feliz, di un beso a su espalda y la abrace. —¡Te amo!.— Dije en susurro para no lograr despertarla.
—¡Buenos días mi amor!.— Lo abrace, los dos nos encontrabamos enredados en las cobijas, se acomodó y puse mi cabeza en su pecho. —¿Ya sabes que te amo?.
—Por supuesto.— Bese su frente. —Pero yo te amo más.
—Oye.
—¿Mjh?.
—Mañana que regrese mi marido pienso hablar con el. Quiero que me de el divorcio cuanto antes.
—¿De verdad?.
—Si, lo mejor será terminar con esa relación que ya no nos lleva a nada. Además quiero estar contigo siempre y sin ninguna culpa.
—En ese caso yo también trataré de hablar con Maki de lo mismo.
—Ya dije, no quiero que sientas presión.
—Para nada, no veo porque seguir en una relación en la que no hay futuro. Me es mucho mejor estar contigo.
—No se que hice para merecerte, de verdad te amo mucho.
—¿A dónde quieres ir a desayunar?. Te invito mi amor.
—Mejor vamonos ya al foro, se nos hará tarde y si quieres ahí pedimos de comer.
—Okey.
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—¡Hermanos!.
—¿Qué pasa María?.
—¿Les puedo hacer una pregunta?.
—¡Claro dinos!.
—Si mamá y papá se divorciaran. ¿Con quién se irían ustedes?.
—¿Qué?. ¿Porqué dices eso?.
—¿Acaso se van a divorciar?. ¿O sabes algo María?.
—No Edu, es solo una simple pregunta.
—Pues que pregunta más rara, ¿segura no sabes algo?.
—No, sera mejor ir por mis cosas. Los abuelos deben estar esperandonos.
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Ya es 6 de agosto, mis hijos cumplieron años hace tres días pero como no estuvieron conmigo decidimos hacerles una fiesta, ya estaba casi todo listo, solo falta que lleguen los invitados y mis hijos que estan con sus abuelos ya no deben tardar, Carlos llego en la mañana y se fue a comprar todo lo necesario para este gran evento, invite a algunos compañeros del foro incluyendo a Juan, solo que no me confirmo si vendría o no.
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~•DIECINUEVE•~
RomanceInfidelidad, muerte. ¿qué es peor?. Tu solo quieres estar con el hombre que amas, es solo una "aventura" ¿Qué podría pasar?. Itati debe decidir si mantener su familia estable y su matrimonio a flote o estar con el hombre que de verdad ama.