Capítulo 3️⃣0️⃣

119 22 35
                                    

—¿Otra vez tú?. ¿Qué quieres aqui tan tarde Carlos?.

—¡Buenas noches señora Itati!. Vengo por mis hijos.

—¿Qué?. ¡No!.

Entre a la casa a la fuerza y comencé a llamar a gritos a mis hijos. —¡¡MARÍA, ROBERTO, EDUARDO!!.— Ellos vinieron corriendo.

—¿Qué pasa papá?. ¿Porqué entrás asi?.

—Vengo por ustedes vamos subanse al coche.

—Carlos no te los puedes llevar.

—Claro que si son mis hijos y también tengo derechos sobre ellos. Y como veo que su madre es una irresponsable que se fue a una fiesta en vez de cuidarlos me los tengo que llevar.

—Itati no esta y no te puedo permitir que te los lleves.

—Me los llevo porque son mis hijos, ahorita su hija debe estar muy ocupada con quién sabe quien y ellos usted aquí como si nada sola. ¡Rápido suban sus cosas a el carro!.— Me subí.

—Carlos entiende que no te los puedes llevar.

—Digale a Itati que si quiere volver a verlos que tiene que regresar conmigo y si no que se valla olvidando de ellos.— Arranque y me fui directo a la casa.

—¿Pa pero porqué entraste así a casa de la abuela?. ¿Qué sucedió?.

—Maria no nos quiso explicar nada solo nos dijo que arreglaramos nuestras cosas.

—Su madre es una irresponsable niños, se supone que debe estar cuidandolos cuando anda de fiesta. ¿Para eso quiere el divorcio?. ¿Para irse ella y dejarlos a ustedes solos con su abuela?. Eso no hace una madre tenganlo muy en claro.

—Pero ella tiene derecho a divertirse y...

—No la justifiques Eduardo y ahora van a estar conmigo mejor que con sus abuelos.

—¿Ya no vamos a ver a mi mamá?.

—No se María, tu mamá ahorita esta enfocada en cosas más importantes que ustedes.

—Papá pero tu trabajas en la casa solo esta Mine, ella no nos puede cuidar, no nos puedes alejar de mamá así como así.

—¡Ya BASTA EDUARDO!. YO SE LO QUE HAGO, USTEDES SOLO OBEDECEN.

—Pero-.

—Pero nada y te callas ya.
.

.

.

.

Ya eran más de las 12 de la noche, todo era perfecto los dos juntos otra vez bailando al compas de la música como si solo existieramos nosotros dos, nos admirabamos mutuamente, yo sonreía y el a mi, le di un beso suave pequeño y delicado el me abrazo para tenerme más cerca y yo recargue mi cabeza a su hombro. Hasta que mi madre me llamo, no pense que fuera algo urgente, no quería que nada nos interrumpiera hasta que volvio a sonar el celular. —Dame un segundo.

—¿Qué sucede?. ¿Todo bien?.

—Si, me llama mi mamá debe estar preocupada y de seguro quiere saber dónde estoy. Deja contesto rápido.— Me aparte del ruido de la música y conteste. —¿Bueno?.

—Itati ¿dónde estás?.

—Sigo en casa de Alexis mamá pero te oigo muy mal ¿pasó algo?.

—Todo esta mal tienes que venir ya.

—¿Qué pasa?. No me asustes así.

—Vente corriendo para la casa Carlos se llevo a los niños.

—¿Qué?. ¡No me digas esoo!... En este momento voy para la casa.— Colgue enojada y preocupada, corrí por mi abrigo Juan me vió muy acelerada y me detuvo.

—Itati ¿qué sucede?. ¿Porqué estás así?.

—No puedo explicarte ahorita me tengo que ir. 

—Dejame llevarte me vas contando en el camino.

—No Juan lo mejor será que te quedes aquí mañana te llamo e intento explicarte, ahorita solo dejame resolverlo.

—¿Me lo prometes?.

—Si te lo prometo.— Estaba apunto de correr y el me volvió a detener.

—¡Oye!.

—¿Mandé?.

—¡Te amo!.— La tome de las mejillas y le di un beso.

—Yo también te amo.— Le di otro.

—¡Piensa en mi!.

—Siempre mi amor.— Le lance un beso desde la puerta del carro, me subí y arranque lo más rápido posible. Iba en camino a buscar a Carlos lo llame y no contesto y para colmo llamaba a mis hijos también y menos contestaban. *Que no sea lo que estoy pensando señor por favor Carlos no me puede alejar de mis hijos.* me persine en el camino y en cuanto llegue me baje corriendo. Desde afuera comence a gritar. —¡CARLOS!. ¡CARLOS!. ¡ABREME LA PUERTA!.

.

.

—Abrele a la señora Manuela.

—Si señor.

—¡VOY A LLAMAR A LA POLICÍA!. ÁBREME YA CARLOS.— Vi que venía Manuela a abrirme.

—Señora tranquila.

Abrio la reja y en eso la avente y corri adentro. —¿Qué te pasa?. ¿Dónde están mis hijos?. ¡MARÍA ROBERTO EDUARDO!.

Me puse frente a ella.—No están.

—¿Cómo no van a estar?. Mis hijos Carlos ¿dónde estás?. ¡TRAIME A MIS HIJOS!.— Vi que no se movía a buscarlos lo empuje.— ¿No?. los traigo yo.

—¿Ahora si te acuerdas que tienes hijos?.

—¡YA CÁLLATE QUE YO TRABAJO PARA ELLOS!. ¡YO LOS PARI!. SI NO ME DICES DONDE ESTÁN LLAMARE A LA POLICÍA.— Comencé a recorrer toda la casa e incluso sus cuartos y gritando sus nombres. —MARÍA ROBERTO EDUARDO.

—Buscalos por dónde quieras ya te dije que no están aquí. Los vas a volver a ver solo si regresas conmigo. Por favor vamos a hablar.

Lo mire directamente. —No pienso discutir más contigo, tu y yo siempre volvemos a lo mismo. Tu con quien vas a hablar es con mi abogado. Ahora si te pasaste Carlos esto no te lo voy a perdonar. Te metiste con lo más sagrado.

—¿Qué vas a hacer?. ¿Demandarme?. Son mis hijos también y que no se te olvide que yo te puedo acusar de adulterio y quitartelos para siempre.

—No me puedes hacer esto Carlos.— comencé a llorar de la desesperación. —Lo único que quiero es vivir tranquila, tu y yo lo mejor será que nos divorciemos por el bien de todos. Piensa en tus hijos en el daño que les estas haciendo.

—¡NO ITATI!. ENTIENDE QUE EL DIVORCIO NO. TU LO QUIERES PARA IRTE CON EL IMBÉCIL DE TU AMANTE. ASI QUE LÁRGATE DE MI CASA.— La tome del brazo y la saque a la calle. —Si no te sacas esa idea de la cabeza olvídate de ver a tus hijos otra vez.

Me quede afuera llorando me subí al carro pensando en que hacer ¿cómo Carlos fue tan malo para alejarme así de ellos. Intente pensar en una solución pero la única que se me ocurrió era regresar con el con tal de estar con ellos, ahorita no estoy para pensar en nada mejor encendí el coche y me fuí rumbo a con mi Mamá.

.

.

.

.
















Hay no que triste va a estar esto.😭😭😭😕

Ya voy a actualizar más seguido lo juro. 🥺❤️❤️

💬 &⭐

~•DIECINUEVE•~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora