Capítulo 35

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Me bajo de mi auto feliz y avergonzada.

— Mami ... ¿Qué hace usted aquí?

— Visitándote. ¿Acaso no puedo? Y que clase de recibimiento es ese, deberías estar feliz.

Entrecierro los ojos. ¿Visitándome? No, eso no es tan fácil. Para que mi madre suba a un avión ...

— Hay ... ya, mi querido yerno nos invitó.

Le hecho una mirada matadora a Yibo. Necesito explicación de esto; pero después. Ahora estoy feliz de tener a mi mamá aquí.

Por otro lado ¿escuché mi querido yerno?

— ¿Cómo "nos"? ... ¿están los demás aquí?

— Si...vamos, están en tu departamento con Lin Yi. Hasta que conocemos a tu amiga. Es un amor, aunque no le entiendo nada ...tus hermanas nos traducen, es encantadora esta chiquilla.

Mi mamá me tira hacia el ascensor. Yibo va tras nosotras.

Cuando llegamos al departamento puedo ver a toda mi familia. Está Ana, Flor, papá y ¡Nini!

Mi abuela. ¿Cómo viajó tantas horas?

Todos están en la mesa comiendo, Lin Yi está feliz con Nini, aunque no le entienda nada, ella es feliz con una ancianita a su lado.

— ¡Hijita!

Mi papá se levanta para abrazarme.

— ¡Papito!

Los dos nos abrazamos y mi papá me llena de besos. Este día se convirtió del más extraño al más feliz.

Mi familia reunida.

Flor y Ana se suman al abrazo. Por último, voy donde nini que esta bellísima.

— Nini, viniste a verme

— Claro hijita...tu casa es hermosa, aunque te digo que en el aeropuerto toda la gente era igual.

Reímos al dicho de Nini.

Lin Yi ve a Yibo y sonríe. ¿Sonríe?

Yibo entra y comienza a saludar a todos.

Yo tomo a Lin Yi y la llevo a la cocina.

— ¿Qué está pasando aquí? ¿tu planeaste todo esto? ¿lo ayudaste?

Lin no dice nada. Solo quiere escapar.

— Te coludiste con el enemigo

— Hay, es que estabas triste y el me lo pidió ...además organizo traer a tu familia ¿acaso no estas feliz?

Miro hacia donde están todos reunidos. Mi familia. Mi novio recién perdonado. En fin, si estoy muy feliz.

— Gracias, amiga

Lin Yi corre hacia a mí y nos abrazamos.

— Traicionera — le digo en el abrazo.

Lin me abraza más fuerte.

— Nunca lo hubiese hecho si no fuera porque quería que estuvieras bien Auri...eres mi hermana de otra madre y padre.

No hace falta decirlo, sé que jamás haría algo para que estuviera mal. Ella ayudo a Yibo para que yo me sintiera mejor y se lo agradezco.

— Y Yibo ... ¿cómo va Auri como tu asistente? — Pregunta mamá. Flor traduce la pregunta que ha hecho.

— Bueno la verdad es que...

Desde el otro lado del mundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora