7. Exclusiones negativas.

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Benjamín Harris. 

Mark ha muerto y varios sentimientos se mezclan en mi mente; siento odio, rabia, impotencia, quiero vengar su muerte. <<Quiero acabar con los Petrov y Corwin>> El maldito impulso de venganza me carcome la cabeza y no sé si podré mantenerme estable cuando esté frente a frente con Corwin, mi padre, el culpable de toda esta mierda.

No he podido dormir desde que vi el cuerpo de Mark anoche, la culpa me está matando. Mark iba a dejar el negocio con Corwin hace unos meses, pero le pedimos que no lo hiciera para poder seguir sus movimientos. Grave error... Si se hubiera retirado de ese negocio aún estaría vivo, tal vez si no le hubiésemos dicho aquello aún estaría aquí. Es culpa nuestra...

—Papá —Sky me saca de mis pensamientos. Ya estamos en la mansión de Corwin, el único aquí es Eliot, los demás están haciendo un trabajo y sé que ese trabajo debe estar relacionado con Liam. Eso me recuerda que tengo que llamar a Angélica a la madrugada para saber qué pasó con la medicina—. Come algo, hoy no desayunaste, ni almorzaste. —me entrega el plato donde una de las criadas dejó mi cena. Cena que no me apetece consumir.

—Luego.

Sky se cruza de brazos con autoridad, reflejando seriedad. Luego toma un tenedor y trata de darme ensalada. Analizo su acción y no soy capaz de rechazar la comida.

—Tú dices que si no como, me puedo enfermar, así que debes comer. —me entrega el tenedor y sonríe esperando que coma.

Consumo la cena, ya que tengo que darle ejemplo a Sky. Puedo dejarme morir cuando esté solo en mi miseria, pero no delante de mi hija. Ella no tiene que ver a su padre vuelto mierda.

—¡Sky! —exclama la hija mayor de Eliot <<Ivy>> corriendo hacia Sky para abrazarla— ¡Tío! —ahora me saluda a mí.

—Se supone que ella ya debería estar durmiendo, pero los quería saludar. —Eliot interviene entrando al comedor.

Las niñas empiezan a hablar entre ellas y yo hago lo mismo con Eliot. Él y yo nos vemos a menudo y hablamos tranquilamente; sea lo que sea, sigue siendo mi hermano y aunque no nos tenemos mucha confianza, tratamos de mantener una relación tranquila. Claro que en mi mente no puedo olvidar todo lo que realiza, hace poco me informaron que hizo algo contra Liam en una pasarela por órdenes de Corwin. Vaya hermanito tengo.

Conforme pasan los minutos, se escucha el sonido de la puerta principal y las voces de varias personas.

—Han llegado. —dice Eliot en voz baja.

Eliot y yo caminamos hacia el lugar de donde provienen las voces mientras nuestras hijas nos adelantan. Cuando llego quedo algo confundido por lo que veo; en la gran sala de la mansión están Corwin, los mellizos, Liam con las manos atadas y... Angélica. ¿Qué diablos está haciendo aquí?

<<Sigue actuando Benjamín>> me repito. Tengo que mantener mi actitud de mierda, tengo que demostrarle a Corwin que todavía estoy a la altura de los Harris.

—¡¿Qué están haciendo estas ratas aquí?! —exclamo con autoridad y Liam se ríe de mi acción, convirtiendo todo en una descontrolada discusión.

Eliot hace que la niñera se lleve a las niñas para que no tengan que presenciar esto.

Yo discuto con Corwin sobre la presencia de Liam y Angelica.

Eliot también reclama la presencia de Angélica.

Y los mellizos discuten sobre mi presencia.

Todo esto inicia la discusión familiar, todos hablamos, todos peleamos, todos nos comportamos como los malditos Harris que somos. Todo hasta que Liam se libera de sus ataduras y nos silencia a todos de una manera autoritaria.

DAIMON - [Promesas, mentiras y traiciones]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora