Nathaniel debía de tener una muy buena explicación acerca de su ausencia por estos días, a pesar de que fui yo misma quien le recomendó marcharse a Italia nada le permitía el no haberse comunicado para conocer sobre nosotros.
—Te escucho —le respondo limpiándome las lágrimas.
Él suspira se sienta a mi lado y me toma de las manos.
—Recibí la noticia en medio del parlamento, no podía dejar mis obligaciones, aunque lo quise hacer, la prensa, el embajador, los demás miembros del consejo, todos tenían su vista puesta en mí, no podía faltar a mi palabra, había pospuesto esta reunión muchas veces.
—¿El medico hablo contigo? ¿Te conto todo lo que sucedió?
Asiente a mi pregunta.
—Quise regresar antes de tiempo, pero no se me permitió, te llame, pero Celine contesto diciéndome que estabas en cama durmiendo, creí que escuchar palabras de mi parte no serían suficientes para consolarte en algo como esto. No a menos que estuviera a tu lado.
—Estoy muy asustada Nathaniel, esta casa es enorme, se llena de gente extraña cada vez que te vas.
—No podía regresar antes de mi viaje pero si podía hacer algo, así que me tome mis días para investigar sobre esto, para conocer si hay una solución, contacté con un médico, nos ayudara Gisele, haremos lo posible juntos. Yo estaré aquí.
—Ya no sé si creer en esas palabras.
—Está bien que dudes, me lo merezco —respira profundamente—. Pero quiero que sepas que no lo hice porque no me importasen, porque si me importan muchísimo, solo no quería que esto se hiciera un chisme por las calles, no quería estuviera por todas las noticias y tu vieras algo tan horrible como eso.
Las palabras de Nathaniel acerca de aquella situación para los dos se volvían como un nudo en mi garganta, podía sentir su dolor al decirlas, y estaba más que segura que estaba soportando en su interior las ganas de no romperse en mil pedazos delate mío.
—Solo quiero que veas que no te he dejado sola ni un segundo —aprieta con fuerza mis manos en las suyas—. He llegado después de un largo viaje de Italia y solo he venido a ti, porque mi familia es lo que más me importa en el mundo ¿De qué manera puedo demostrártelo?
—No alejándote más de mi lado —le respondo mientras mis manos lo rodean para sentir su cuerpo pegado al mío.
**
Las cosas doloras nos enseñan quienes están en cada momento de nuestra vida, quienes a pesar de todo permanecerán a nuestro lado, nos enseñan a ser fuertes y a sobrevivir a lo que nos causa dolor. No entendía aquella parte hasta que perdí a mi madre, me sentía sola, destruida y sin un lugar a donde ir, entonces apareció Nathaniel y sentí que volvía a aquel lugar seguro, y después sentí que ese lugar seguro estaba lejos de hacerme sentir tranquila.
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Danzando con el Destino
RomanceGisele se ha esforzado en cumplir su sueño desde niña, el tener un puesto en una de las prestigiosas academias de ballet de Paris, su talento es único y admirado por muchos a pesar de la difícil vida que ha llevado. Nathaniel Muller, candidato reco...