Sonreí porque sentí besos por toda mi cara, luego oí sonar el despertador. Cuando se separó de mí, me quejé y lo abracé.
── Espera ──apagó el despertador y luego me abrazó a él── Buenos días bebé.
── Buenos días ──froté uno de mis ojos── ¿A qué hora llegaste? No te sentí.
── Tarde ──peinó mi pelo── ¿Anoche cenaste?
── Sí ──besé su pecho y me bajé de la cama── ¿Lo pasaste bien?
── Sí.
Nos arreglamos y bajamos a desayunar. Una vez en el coche, atendió una llamada. Estuvo varios minutos al teléfono, habló sobre unas reuniones y luego colgó.
── A mi salida de trabajar iré a cenar con mi hermano, así que nos veremos en casa.
── ¿Cuándo me lo vas a presentar? ──sonreí.
── Todavía no le he hablado bien de tí porque no lo he visto, primero quiero ponerlo en contexto.
── De acuerdo. Cuando lo creas conveniente invítalo a cenar a casa.
── Está bien ──Nos detuvimos en mi trabajo. Tomó mi cara con ambas manos y me besó. Sonreí en medio del beso── Nos vemos en casa ──Asintió. Bajé y esperé a que su coche se alejara. Christopher bajó de uno y se acercó. Desbloqueé mi móvil y llamé a Lorenzo. Me dijo que su tía estaba en recuperación porque todavía estaba muy débil. Me despedí de él y entré con Christopher, que salió minutos después.
En mi descanso, salí y fuí a un bar.── Siéntate a comer conmigo ──Se me quedó mirando un momento── Venga, Chris, no le diré nada a Kilian.
── Bueno ──Se sentó en frente de mí y pidió su comida.
── Hola ──Miramos a la rubia que se sentó a mi lado sin ningún permiso── ¿Por qué dos hombres tan guapos están solos? ─La observé atentamente. Hizo algo que suelen hacer muchas mujeres, cogió uno de sus rizos en sus dedos y me miró coqueta. Sonreí y negué.
── Eso conmigo no funciona.
── ¿Perdón? ──Frunció el ceño sin entender.
── Que me gusta lo mismo que a ti; los hombres, así que pierdes el tiempo ──Me siguió mirando con el ceño fruncido hasta que fué relajando su cara.
── Ni siquiera sé por qué me sorprende, casi todos los hombres guapos soléis ser gays ──Miró a Christopher, pasó la mano por encima de la mesa y la acercó a la de él── ¿Tú qué, guapo? ──Éste separó su mano.
── Yo también soy gay ──Lo miré un poco sorprendido.
── Joder, hoy no doy una ──Se puso en pié── Discúlpen la molestia ──Asentí. La observé alejarse y luego lo miré a él.
── ¿De verdad eres gay?
── No, pero ella no lo sabía, así que he usado esa mentira para que se fuera ──Dijo divertido. Sonreí y negué.
── Ahora estamos en descanso, puedes ligar sin problema ──Negó con la cabeza.
── Yo no estoy de descanso hasta que lo dejo a usted en casa, además, tengo novia, pero a esa rubia no se lo dije porque seguro se hubiese quedado usando como excusa que mi novia no se enteraría.
── Mmm, entiendo. Te pido una disculpa por decirte que ligues sin saber que tienes novia ──Sonrió.
── No se preocupe.
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Conquistando a un millonario
Chick-Lit¿Qué estarías dispuesto a hacer por nuestro amor? Fue la pregunta desencadenante de los problemas que empezaron a tener Elián y Lorenzo. Elián siempre había estado dispuesto a hacer todo por la relación de ambos, hasta que se da cuenta que durante...