36 Una nueva oportunidad?

87 9 19
                                    

Había salido huyendo otra vez. Pero es que no era su culpa. Era de ellos, los estúpidos alfas. Siempre haciendo cosas extrañas, siempre haciendo burla de su jerarquía, queriendo aprovecharse de él. Malditos estafadores que sólo buscaban una jodida cosa.

Y lo peor es que su pequeño tampoco abría los ojos ante esa inminente realidad. Y sí, el alfa que le había tocado al chico no le hacia nada aún, eso si se exceptuaba el hecho de que le puso los cuernos.

Se sentía sucio, bajo, e inmundo... Aún cuando su corazoncito sabía que no era él culpable, su mente le quería joder la vida. No estaba su querida Jennie noona para decirle que estaría bien y que no se preocupase.

Estaba llorando y corriendo sin parar hasta que chocó con una espalda firme.

-P-perdón señor... No quería... —se disculpó con la vocecita quebrada y aguda por el llanto mezclado con los nervios—

-¿Señor? No estoy tan- ¿Sun? ¿Por qué lloras? ¿Quién ha sido el imbécil?

-¿SeungMin? —se quedó quieto en su lugar por unos segundos viéndole con desconfianza— Eso no te importa...

-Vamos... Ya ha pasado mucho... No puedes seguir así. —insistió—

-Puedo. Sí. —sorbió su naricita y desvío la vista a cualquier lugar qué no fuera donde estaba su hermano— Además por qué te va a interesar?

-Sunnie... Soy tu hermano mayor, me importas y tu vida me interesa.

-Tanto qué por un fácil te largas y me dejas.

-Número uno, esta víborita no eres tú. Dos, a mi omega no le hables así ni mucho menos lo metas en el tema qué bien sabes que yo no salí de la casa por él. Tres, es bien conocido por todos ustedes que fuí a perseguir mi sueño de hacer mi servicio militar para ser policía. ¿Por qué no puedes ser igual de feliz por mí qué el resto de la familia?

-¡PORQUE CUANDO TE FUISTE YO DEJÉ DE SER FELIZ! —no sabía en qué momento se había puesto a gritar, sólo sabía que no habría vuelta atrás— PORQUE CUANDO TE MARCHASTE A PERSEGUIR TU DICHOSO SUEÑO... ¡ME ABANDONASTE Y JAMÁS VOLVISTE KIM SEUNGMIN!

-Sun... Sunsun... Calma... No lo sabía, no me pude dar cuenta... Quería que mi pequeño sol estuviera orgulloso de mí, y no me di cuenta cuando te aparté de mi vida... Lo siento, de verdad lo siento.

-TÚ NO TE IMAGINAS CUAN- —por un momento su lobito y su corazoncito se quedaron en una frase— T-tú... ¿De verdad lo sientes? —lo miró con los ojitos dudosos—

-Sí, en serio lo siento mucho. Has sido de las personas más preciadas que tengo, después de mamá y Chan, tú y mi noona son lo más hermoso.

-Papá me quiso... Obligar a...

-Sunoo, no sé bien esa historia. Pero sí de algo estoy seguro es que papá jamás lo hubiera hecho con mala intención. Eras su favorito.

-Su favorito por ser el omega de la familia, al que podía casar con quién y cuando se le diera la gana.

-No digas eso. Ven, cálmate ya y cesa ese llanto que las lágrimas de tristeza no son dignas de recorrer tus mejillitas —dijo para así secar sus lágrimas con los pulgares, acunando el rostro joven en sus manos—

El lobito de Sunoo se sintió más tranquilo y sumiso ante la actitud protectora de su hermano. Se animó a dejar su muro de defensa a un lado, acercándose al mayor llorando y sollozando.

-Hyung... Te extrañé mucho... —su frágil voz quebró al mirar a los ojos al chico, sus ojitos vidriosos y acuosos—

-¿Quién es él? —se oyó una voz que Sunoo no reconocía, acompañada de un olor dulce—

Ice heart [JakeHoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora