25: Alfas

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Su pie se movía rápidamente. Estaba sentado en el sofá de la sala de estar del departamento con la televisión encendida, en ella estaban transmitiendo uno de sus dramas favoritos pero ese no era el tema. El tema era que su niño ya no compartía tanto tiempo con él. Era viernes por la tarde (casi de noche) y había salido desde temprano en la mañana. El hecho de que fuera feriado en nada justificaba que se desapareciera así como así.

¡¿En dónde diablos estaba metido?!

El reloj marcaba las 6:49 de la tarde. Si fueran las 12 del medio día tal vez no estaría tan desesperado bueno, a esa hora también estaba ansioso. Pero no tanto, había que aclarar.

Sí, claro.

La puerta fue abierta.

Entonces saltó y abordó al que apenas estaba entrando.

-¡¿A DÓNDE TE FUISTE?!

-Hey... Tranquilo hyung... Sólo salí a caminar al centro comercial. Con un amigo.

-¡¿Qué clase de amigo puede ser alguien como Park SungHoon?! —solía exagerar las cosas, pero a la vista de JungWon se estaba pasando—

-Uno bueno, que no es entrometido y que trata de comprenderme.

-Pero... ¡Pero él ha estado con Jay!

-¿Y eso qué me importa a mí? —dijo viéndolo con sencillez, como si realmente no le afectara ni un poco la idea—

-No lo sé... Quizá me pareció lógica la idea de que al menos fueras reservado con él. Pero en lugar de eso, lo único que estás haciendo ¡es hacerte su más íntimo amigo!

-¡Y haga lo que haga es mí problema! No el tuyo, si me disculpas, quedé en llamar a mi novio en un rato y estaré en mi cuarto. Ah sí, quiero pedirte algo de lo que quizás tú desconoces SeonWoo, se le dice P-R-I-V-A-C-I-D-A-D.

Tomó sus cosas con algo de prisa y se adentró por el pasillo. Había dejado a Sunoo helado literalmente. Los colores se le habían ido de la cara la emoción ansiosa y furiosa que lo desbordaba pocos minutos atrás ahora era de confusión. La más grande. El ruido sordo del portazo resonó en sus oídos y lo hizo caer de nuevo en el sofá.

¿Por qué todo se estaba sumando en su contra? El problema no era suyo. Las fotos no eran suyas. En el salió ni siquiera debía estar su primo.

No pensó en nada cuando tomó las llaves de casa y salió corriendo a quién sabía dónde. Las lágrimas surcaban sus mejillas pálidas como si su vida dependiera de llorar.

No era justo para los 4 chicos del problema en sí. Pero, ¿qué más podía hacer él? Aunque la pregunta en sí debería ser ¿por qué lo desesperaba no poder ayudar a nadie?

No sabía lo que hacía. Pero, su primo es envuelto en un problema y además engañado, perdonó al chico bien... Pero luego, se fue alejando de él... Por alguien que acababa de conocer.

¿Por qué todos lo dejaban por alguien mejor?

Esa duda siempre estuvo ahí, pero cada vez que encontraba un nuevo refugio se desvanecía. Su querido primito, JungWon siempre había sido el refugio permanente, de todas las personas que en su momento lo fueron. Sunoo siempre sintió que sin importar nada JungWon iba a estar a su lado así como él quería estar también. Se habían apoyado entre los dos desde toda la vida.

Sí, su hermano volvió, ¿y qué? No iba a reemplazar a JungWon, de ningún modo nadie lo haría. El pequeño omega había sido su hermano, mejor amigo, su todo. Y ahora por un alfa idiota lo estaba perdiendo, todos los alfas eran una mierda, ¿no se suponía que eran más fuertes y que estaban para proteger? Todos los alfas de su vida lo habían dejado.

Ice heart [JakeHoon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora