JUGUEMOS

8. Juguemos... a ser doncel

Xiao Zhan tenía 16 años cuando su vida cambió por completo.

Dos años antes había conocido a una linda chica de nombre YangZi, la chica más linda y tierna que había visto en su vida, en poco tiempo se hicieron amigos y rápidamente se dieron cuenta que ambos se atraían por lo que pasaron a ser novios, unos meses más adelante, ambos habían tenido su primera experiencia sexual.

Para Xiao Zhan fue un momento mágico, amaba a la joven pelirroja y podía trazar en su mente sin problema alguno un futuro con ella, tener hijos y envejecer juntos, pero una noche todo cambio.

Su cuerpo se sentía exhausto por la presión de los exámenes para la universidad porque dentro de su ambición no sólo quería estudiar la carrera de administración de empresas para poder manejar el negocio familiar, sino también perseguiría su sueño de arte contemporáneo.

Dejó a YangZi en su casa prometiéndole un fin de semana romántico y entró a su recamara con la idea de estudiar para su examen del día siguiente, pero de pronto se sintió caliente, creyó que enfermaría y tomó un par de pastillas para la gripe las cuales terminaron por darle sueño.

Sin ánimos de nada más, detuvo sus estudios cuando se percató de que no retenía nada de información y se recostó sin cubrir su cuerpo.

Era entrada la noche cuando se despertó de un sueño que no pudo recordar, pero que le había dejado una erección en su entrepierna y la necesidad de acariciarse, en su mente, como cada vez que se masturbaba, pensó de YangZi, estaba aún medio dormido cuando su cuerpo alcanzó el delicioso orgasmo, pero este había sido diferente, sintió las sábanas húmedas por todos lados y con disgusto se levantó para cambiarse de ropa al sentirse muy sudado, pero al cambiar su ropa interior la sintió demasiado húmeda, demasiado para que fuera sólo semen, además de que sentía una humedad incómoda proveniente de su trasero a la cual no le dio importancia por el momento.

Unos días después, justo cuando se daba por terminado el semestre, paseaba con la tierna YangZi de la mano, al final llegaron a un lugar un poco más privado de un parque y comenzaron a besarse, besos que empezaron tiernos y terminaron por subir la temperatura.

Si bien, Xiao Zhan como cualquier adolescente a esa edad tenía las hormonas alborotadas, pudo notar que se había excitado demasiado pronto, con unos simples besos ya tenía una erección entre sus pantalones, cuando YangZi la notó se sintió un tanto tímida ya que estaban en un lugar público y con vergüenza le pidió a la pelirroja que le diera espacio para acomodarse "aquello", pero por más que intentó calmar su mente, las imágenes de su novia invadían su mente excitándolo cada vez más, aunque después de unos minutos sintió un extraño calor en su vientre y la imperiosa necesidad de tocarse de pronto el terror lo invadió, pues pudo sentir claramente un líquido salir de entre sus nalgas, un líquido que mojó su ropa interior.

Con pánico se alejó del lugar huyendo a su casa apenas mandando un mensaje a YangZi explicándole que había tenido una emergencia. Tenía una sospecha de lo que aquello significaba pues el tercer género lo explicaban en la clase de anatomía, dos días después tenía la confirmación de su condición entre sus manos: era un doncel. ¡UN MALDITO DONCEL!

Intentó por todos los medios ocultar su condición, al final seguía siendo un hombre y seguía perdidamente enamorado de YangZi, pero una tarde, en que la joven pareja estaba en la recamara del pelinegro, los besos y caricias se hicieron presentes, afortunadamente los padres de Zhan no se encontraban y aprovecharían la oportunidad.

Las prendas se iban perdiendo poco a poco, YangZi estaba ansiosa y excitada, le hizo una rápida felación a Zhan quien sin poder soportarlo más la alejó de su miembro erecto y se puso un preservativo, abrió las piernas de la chica mientras acariciaba y mordía aquellos montecitos que eran sus senos, se encontraba tan perdido en su excitación que no logró entender aquello que la chica le decía.