capitulo 28

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La noticia de la boda se había expandido con rapidez por todo el palacio y todos estaban felices.

Fueron tres meses en la cuales todas ayudaron a la sultana Hafsa con los preparativos para su boda.

—Solo falta un mes para mi boda Nurhan —comenzo feliz Hafsa.

—Lo se mi sultana, cada ves está más cerca de casarse con el hombre que tanto ama —le dijo Nurhan.

La puerta de los aposentos de Hafsa se abrió dejando ver a Sanem hatun un poco preocupada, está hizo una reverencia.

—Mi sultana, la sultana Ece se siente mal y se niega a ir con la doctora porque dice que ya se le va a pasar, por favor vaya e intente convencerla de ir —le pidió Sanem.

—Sanem ve rápidamente por la doctora, Nurhan vamos —le ordenó Hafsa.

Mientras que Sanem se iba por la doctora, a paso rápido Hafsa fue a los aposentos se Ece.

—Sultana que la trae por aqui—le pregunto Ece.

Sanem no mentía, Ece estaba pálida y apenas se había podido parar de su lugar.

—Por allah Ece que te pasa, como no vas a llamar a la doctora mira como estás —exclamo preocupada Hafsa.

—Estoy bien sultana, no se preocupe ya se me va a pasar —le aseguro Ece.

La puerta de los aposentos se abrió e ingreso Sanem junto a la doctora y sin poder negarse Ece se dejó revisar.

—No es nada malo mi sultana no tiene que preocuparse, la sultana Ece está embarazada—le informo la doctora.

—Oh allah que maravillosa noticia, escuchaste Ece vas a tener otro lindo bebé —le dijo emocionada Hafsa.

—La escuché mi sultana—comento feliz Ece.

—Nurhan ve a darle la noticia a mi madre —le ordenó Hafsa.








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—Hurrem debes estar feliz vas a tener otro hijo, no tienes que estar mal por Ece, tanto ella como las demás seguirían teniendo hijos al igual que tú, preocúpate por cuidar de tus hijos y por su salud —le dijo Gulbahar.

—Le prometo que desde ahora me voy a enfocar en mis hijos —le prometió Hurrem.

—Muy bien Hurrem vuelve a tus aposentos—le indico Gulbahar.

Ella se paró e hizo una reverencia para después salir de los aposentos de Gulbahar.

—Sultana, la sultana Güzel está en la puerta—le aviso una criada.

—Que pase.

—Disculpe la molestia sultana, solo quería traer a los niños para que los viera —le dijo Güzel.

—Traiganme a mis nietos —ordeno Gulbahar.—Sientate Güzel.

Ella se sentó dónde le había señalado mientras que Gulbahar agarraba a los pequeños Safiye y Kasim de nueve meses.








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—Aaah.

El grito de enojo que soltó Fahriye sorprendió a Nurten y Tanyeli, nunca la habían visto tan enojada, hasta que lágrimas comenzaron a salir de sus ojos.

—Porque allah que fue lo que te hice para que ellas siguieron teniendo hijos que ponen en riesgo la vida de mi principe —sollozo Fahriye.

—No llore mi sultana —le pidió Nurten.

—Usted es mucho más fuerte que ellas, su hijo es el príncipe mayor y tiene aliados —le dijo Tanyeli.

—Pero ellas siguen teniendo hijos y yo no—exclamo Fahriye.

Batalla de Sultanas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora