Los hijos de la Mafia (Editando)

Capitulo 40

Ni lo pensé y empecé a correr hacia la salida.

No miré hacia atrás.

Logré zafarme de las manos de Charles cuando pase por su lado y seguí corriendo.

Quería saber si Connor me seguía, así que por lo testaruda que soy, gire mi cabeza hacia atrás.

Lo único que pude ver fue a Charles venir hacia mí y detrás de él venía Connor. Por detrás de Connor alcance a ver como Daniel y Marcus peleaban.

Mierda.

Antes de que pudiera salir, sentí dos brazos tomarme.

¡No! — Grité y me sacudí.

Creíste que podías escapar de mí. — Se burló. — Que estúpida. —

¡Suéltala! — Giré mi cabeza para ver como Connor intentaba golpear a Charles, pero como si se tratara de una película, Charles sacó el arma de la cintura de sus jeans y me apuntó en la cabeza.

Connor se detuvo y el oficial se acercó, mientras éste también sacaba un arma y apuntaba a Charles. La gente cuando se dio cuenta de lo que sucedía empezaron a gritar y salir corriendo a diferentes direcciones.

¡Aléjense o le vuelo la cabeza! — Sentí como mi alma abandonaba mi cuerpo, cuando soltó el seguro y presionaba con fuerza la punta en mi cabeza.

Apreté los ojos y los volví a abrir.

Retuve las lágrimas en mis ojos.

Así no tenía que terminar el plan.

Así no tenía que terminar una película.

Como si se encendiera la bombilla sobre mi cabeza, recordé la navaja que me dio Daniel.

La apreté con mucha fuerza y con toda la voluntad que pude reunir, se la encajé en el estómago.

Me apresure en salir de sus brazos mientras él retrocedía un paso, soltando el arma y sujetándose el estómago. Me miró con la boca abierta donde le salía un poco de sangre y con los ojos abiertos.

El oficial se colocó detrás de Charles y le sujetó las manos con unas esposas. Tomó su radio.

Aquí el oficial Lawrence, cambio. — Se escuchó el típico ruidito de radio y luego la voz de otro hombre.

Sí. ¿Qué sucede? —

Hay un hombre herido, en el... — Dejé de escucharlo, cuando Connor hizo que me girara. Lo miré a los ojos.

No me había dado cuenta de que estaba llorando hasta que él paso sus pulgares por debajo de mis ojos y me abrazó.

Tranquila. Ya todo pasó. —

Daniel.

Me separe rápidamente de él y miré como Daniel estaba en el suelo arrodillado con las manos en su cintura y lo peor de todo es que Marcus estaba enfrente de él apuntándolo con un arma.  

Fue como tener un deja vú.

Dirigí mi mirada hacia el arma que soltó Charles, caminé a paso rápido hacia ella antes de que el oficial pueda tomarla.

La tome, pase por al lado de Connor rápidamente sin que pudiera detenerme.

Era como si tuviera una adrenalina por todo el cuerpo.

Me coloqué a unos metros de Marcus, pero no tan lejos. Levanté el arma que temblaba levemente.

No tenía el seguro puesto, así que lo único que tenía que hacer era disparar.

Sabía que no teníamos que confiar en ti. Sin embargo lo hicimos. — Daniel levantó la cabeza.

Miró a Marcus primero, para que después su mirada llena de pánico llegara a mí.

Un hilo de sangre le salía por la boca y la piel se le estaba volviendo pálida. 

Negó rápidamente.

No. — Murmuré.

Me armé de valor y apreté el gatillo.

Lastimosamente mi puntería seguía siendo una mierda, por lo que acabe disparándole en la pantorrilla. 

Genial.

Más tonta no puedo ser.

Tengo que empezar a mejorar mi puntería.

Marcus lanzó un grito, y se tomó de la pantorrilla, pero eso no lo hizo soltar el arma, en cambio se giró mirándome furioso.

¡Hija de puta! — Gritó y levantó el arma. — ¡Pagarás por eso! — Antes de que pueda dispararle yo, alguien me arrebató el arma de la mano y le disparó en el pecho.

Miré a mi lado con los ojos abiertos.

Connor... — Susurré pasmada.