La debilidad de un psicópata²

Capítulo 12

La pelirroja se encontraba dando vueltas por todo el departamento en la espera del castaño. Desde de que saliera de esa manera del departamento, después la llamada de esa pregunta y ahora que él no le estaba respondiendo ninguna de las llamadas, se estaba preocupando.

Ni siquiera había dormido bien porque no entendía lo que estaba pasando.

La puerta fue abierta y la pelirroja rápidamente fue hasta ésta con la intención de saber todo y el castaño debía decirle cómo sea, ya que el día anterior no le dijo nada.

— Adam, ¿qué ocurrió? ¿por qué no contestabas mis llamadas? — le preguntó.

— Son muchas preguntas Coral — susurró y se acercó a ella para abrazarla.

— Dime, por favor...

Un suspiro se escuchó.

— Ayer quisieron saquear en la organización.

— ¡Qué! — ella se separó un poco, pero al instante fue abrazada nuevamente.

— Quisieron robar la información confidencial, pero no pudieron. En las cámaras se observó al mismo sujeto que estuvo en el parque, aún no sabemos si será la misma persona o que sus cómplices son parte de una organización. El guardia que estaba a cargo de esa zona fue dormido con un químico demasiado fuerte que casi lo lleva a la muerte — suspiro nuevamente — No sé cómo carajos pasó, pero alguien entró a la habitación de él y... lo mataron.

La pelirroja se había quedado pasmada y en shock por todo lo que había dicho el castaño. Tantas cosas habían pasado en un solo día y en el peor momento porque ella había estado descansando por su enfermedad.

— Te deje solo en esto — se culpó, porque de seguro el castaña había estado con estrés y frustración en todo el día, llevando a cargo todo lo que sucedía dentro y fuera de la organización.

— No digas eso Coral, tú has hecho muchas cosas por mí y para la organización. Tú tenía que descansar para volver ejercer tus funciones, no podía arriesgarme que tú salieras después de haber tenido mucha fiebre y tu estado no era el más favorable para que salieras.

— ¿Por eso no quería decirme por teléfono?

— Si, sabía lo terca que te pones cuando una cosa así suele pasar. Te conozco perfectamente.

Pero no mis sentimientos.

— Por una parte si — susurró la pelirroja — Pero no creerás que voy a estar hoy de vaga, no señor, hoy voy a la organización.

— Ay no, Coral te lo dije — le separó un poco de ella.

— Ya no estoy enferme Adam, puedo cuidarme y hacer las cosas sola.

El castaño suspiró, porque sabía que no le podía llevar la contraria a la pelirroja si así fuera el caso, demasiado tenía con todo lo que estaba pasando en la organización como para venir a discutir con Coral sobre su sobreesfuerzo que estaba haciendo todos los días a su lado. Peor, tener en su mente la confesión de la pelirroja que le daba vueltas.

— No te diré más — se separó de ella — Iré a descansar, después iré al velorio del guardia Fred. Tienes que estar recuperada por favor, necesitamos encontrar a los responsables de su muerte y seguir con la investigación.

La pelirroja solo asintió, ya no sabiendo que decir. El castaño se veía cansado y frustrado, talves su insistencia de volver a su trabajo también le estaba agobiando, pero es que no quería quedarse con los brazos cruzados y ver al castaño llevando el peso de la investigación.

Aunque en su mirada se reflejaba dudas ante ella, talves la pregunta rara que le había dicho antes de salir del departamento era la razón, pero por más que intentaba recordar algo, no le venía nada.