Capítulo 50

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— En la parte superior de la mansión, hay un tipo de sótano que conlleva a un túnel largo y extenso, y da salida a la ciudad.

— ¿Y esta zona? — le indicó.

— Esa zona es donde entierran a las personas que son víctimas de las prácticas y conjuros que los hacen como un modo de tener comunicación con el más allá. Hasta ahora no han tenido éxitos, pero por esa mierda muchas personas mueren.

— Nunca pensé que llegarían tan lejos para tener más poder.

— Ya sabes cómo son sus creencias, nadie les pone un alto porque no saben nada de ellos, hasta ahora que el FBI sabe toda la verdad. Ni siquiera fueron inteligentes.

— De acuerdo. El plan es este... — sacó una hoja y un bolígrafo del escritorio — ... Primeramente vamos a poner a Lilly y a Annie en un lugar seguro, y tu amigo va a colaborar en esto, llevándolas por ese túnel. La bomba ya estaría en este lugar — le indicó la parte  central de la mansión — La activaremos al instante con el tiempo suficiente para matar a cualquiera que se nos interponga en nuestro camino, hasta matar a Dolly, Paulet y a esa mujer que se hace llamar como Jefa. Nadie va a quedar vivo y haré todo lo posible para desaparecer esta mierda en esta madrugada.

— ¿Estas diciendo que todo el plan se va a llevar a cabo esta misma madrugada?

— No tenemos tiempo, Terry, si síguenos aplazando el plan, ellos podrían hacer algo en contra de ellas y se nos dificultará luego.

— Entiendo.

***

— Aquí están... — la Jefa le indicó la celda donde se encontraba la pelirrubia y la niña — Pero antes de que entres, te advierto Dolly que no hagas nada estúpido. Si queremos traer de regreso a Bunny, tenemos que mantener la compostura de no hacerles nada.

— Lo sé, pero yo soy la única que puedo manipularlo. La droga solo debes ponerla en un vaso rojo e invocar el alma de Bunny.

— Es lo que hemos querido saber que droga usaste para manipularlo.

— Dile a Scott que llame al sujeto de la pandilla de Los Lobos, ellos son quiénes administran la droga.

Ella asintió y dio la orden al chico llamado Scott lo dicho por Dolly, después dio la orden de abrir la celda. Cole se quedó sorprendido al ver a Dolly frente suyo como si fuera el mismísimo diablo, pero le entró un poco de miedo al ver que ella iba a entrar a la celda donde se encontraban Lilly y Annie.

— Después de cuatro años, las vengo a tener bajo mis garras par de bastardas.

Lilly sintió que alguien entró a la habitación, por lo que poco a poco abrió sus ojos. No debió hacerlo. Al frente suyo se encontraba esa persona que odiaba con todo su ser y la que más daño le hizo a ella hace cuatro, la misma que mató a sangre fría y cruelmente a Lucy y a Zoe.

Un click en su cabeza se activó al recordar que su hija también se encontraba en el mismo lugar que ella, así que se levantó rápidamente en busca de su hija. Pudo respirar de alivio al ver a su pequeña hija en el mismo lugar, durmiendo.

— Nos volvemos a ver, bastarda...

— Aléjate de mi, maldita — siseó la pelirrubia, estando alerta en cada movimiento.

— No has cambiado en nada, sigues siendo la misma estúpida de siempre. De seguro a Bunny ha de estar tan desesperado en poder encontrarte y también a la bastarda menor — dijo con tanta burla que Lilly apretó sus manos en el pequeño colchón.

La debilidad de un psicópata²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora