La debilidad de un psicópata²

Capítulo Final

— La zona debe estar bien resguardada por algunos militares. Algunos oficiales vendrán con nosotros y que el helicóptero vigile la zona — dio la orden el castaño, sacando dos armas de la cajuela del carro.

La pelirroja estaba poniéndose el chaleco antibalas mientras que el Agente hacia lo mismo. Peter le dio una arma a la pelirroja y agarró también otra arma. Los demás oficiales se alistaron para empezar la nueva misión y los otros  empezaron a moverse por toda la zona.

— ¿Hay una puerta que no sea la principal? — preguntó el castaño a Cherry.

— Si, en este camino les va a llevar a una puerta solitaria.

— Entendido — cerró la cajuela — Coral — la llamó — No te separes de mí, no se qué haría si algo malo te pasa allá.

— Eso jamás, tú también prometeme que no saldrás herido.

— No lo haré — se acercó para darle un casto beso en los labios — Acabemos con esto lo más rápido posible.

Coral solo asintió con algo instalándose en su pecho. La amarga sensación de que algo malo pueda suceder allá eran muy grandes, debido que no solo estaban yendo hacia Bunny, sino también a la secta.

Todos comenzaron a moverse cuando el castaño dio la orden. Algunos oficiales iban con Adam y los dos Agentes, unos en sus espaldas y otros al frente. El castaño sabía que lo que se avecinaba era una masacre completa, ni siquiera con la posibilidad de que alguien pudiera salir con buena pinta.

Él solo quería acabar con el enemigo y hacer justicia.

Por otro lado, Bunny tenía una guerra con los miembros de la secta, los cuales no querían bajar la guardia en ningún momento y tampoco ser asesinado a la primera por Bunny. Él ya se estaba quedando sin municiones, y eso que había robado las armas de los miembros que murieron bajos sus garras.

Elians estaba junto a él, debido que no iba a permitir que Bunny hiciera todo el trabajo de asesinarlos cada uno y tampoco que saliera lastimado. Los dos eran un equipo, y gracias a que pudo poner a salvo a su mujer y a su hija ahora se sentía con más fuerza de seguir batallando hasta el final con tal de buscar venganza por lo que acabaron de hacer con su familia.

A su familia nadie podía tocarles ni siquiera un pelo y tampoco hacerlos sufrir, pero la secta se había metido con ellas de la forma tan cruel y cobarde, poniendo a una niña en peligro y a la crueldad del mundo, y a su Lilly al sufrimiento que un día parecía olvidarlo.

Bunny iba acabar con todo lo que le vinculaba. Él no pidió ser traído de vuelta a este mundo, peor para hacer cosas inútiles como la avaricia de poder de la secta, pero Bunny no hizo caso y fue directamente al cuerpo de un niño que lo llamaba instintivamente a él  como un hilo. Vaya que fue buena elección, porque dejaría que el niño descansará después de tanto sufrimiento que tuvo que pasar con ese maldito hombre que lo adoptó.

Elians era parte de Bunny y Bunny era parte de Elians.

A pasar los años, los dos crearon un vínculo inquebrantable y que iba a ser difícil que alguien lo sacará de ese cuerpo que estuvo por muchos años. Si él moría, Bunny también lo hacía, pero aquella vez que Elians regresó a la vida fue porque él no estaba del todo muerto, aún su corazón latía débilmente y sus pensamientos solo era de Lilly, y fue Bunny quién lo ayudó a recuperar la conciencia y lo guío hasta la salida hasta que fue encontrado por aquella señora.

Los dos estaban allí, manteniendo la cordura y la tranquilidad para no bajar la guardia antes los disparos que los demás daban. El fuerte instinto que tenía tanto Bunny como Elians fue tan grande que pudieron evadir un disparo que iba justamente a su cabeza, logrando esconderse en uno de los muebles.