Say you won't let go 🌻 |Jenlisa|

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Tome su mano para poder irnos abajo junto a mi familia, Su-Ji y Hyun nunca habían conocido a Lisa así que yo creía que era el mejor momento, igual si eso implicaba que mi madre se desmaye en ese momento.

-Tengo mucha vergüenza -dijo quedándose estática en su lugar.

-No va a pasar nada, quiero que conozcas a mis hermanos -le dije y negó.

-Te juro que quiero pero aún no me siento preparada o al menos no si tus padres están ahí -asentí.

No la obligaría a bajar, además mis padres tuvieron mucho que ver en todo esto más mi padre pero, es algo que aún no logro perdonar.

-No te enojes, por favor -dijo tomando mi mano y sonreí.

-Claro que no me enojo -respondí- Tienes todo el derecho a decidir y cuando tu estés lista yo estaré esperando -continúe hablando.

-Es que te amo -dijo y sabía que mi cara estaba no color carmín si no rojo- Te amo demasiado -volvió a decir.

Me derreti de amor, sentía que mi vida estaba tomando un buen giro, todo estaba acomodándose y por supuesto que tenemos que hablar de muchas cosas pero solo con el hecho de tenerla aquí yo ya era demasiado feliz.

-Yo te amo muchísimo más -dije y le di un corto beso- Anota mi número y mi dirección -le dije y negó.

-No te preocupes yo voy a llegar a tu departamento -dijo y la mire con cara de no entender absolutamente- Cómo crees que llegué hasta aquí? -cuestionó.

-Obvio que yo la busque, la llame y la convencí para que venga -dijo Nayeon atrás- Pero está advertida, ella solo será la amante porque yo soy la oficial de esta relación -dijo acercándose.

Rei a carcajadas, Nayeon jamás podría terminar con sus ocurrencias.

-Te amooo -grité y me tire sobre ella.

-Jennie no seas castrosa, por favor -respondió y me empujo- Aquí no chikistrikis y menos frente a tú otra mujer.

Espero que algún día puedan tener una mejor amiga como la mía.

-Te debo mucho -admití y negó.

-Lo que me deben las dos es que la primera hija que tengan lleve mi nombre -respondió y negué.

-Y que repita tú historia? -cuestioné- Ni con diez psiquiatras podría recomponer a mi pobre hija -bromee.

Lisa solo nos observaba y se reía de las dos, ambas decíamos muchas estupideces.

-Por cierto, tus padres te están esperando hace un buen rato -recordó rápidamente.

-Le diré a Nayeon que te mande la ubicación y te veo ahí en la noche -dije acercándome de nuevo rápido, besé sus labios y luego su frente.

-La verás en la noche, vamos -dijo Nayeon tirándome del brazo.

Llegamos abajo y Hyun ya estaba con cara de pocos amigos, pobre de mi padre, el único que parecía tener un poco de humor en la familia era Su-Ji.

Que por cierto este bicho raro hacía rato estaba mirando a Nayeon, que ni se le ocurra mirarla. Ella tiene 27 y el 22, no hay mucha diferencia pero para mi ya es algo y mucho más turbio pensar que ambos pueden llegar a tener algo.

-Hija te fuiste a limpiar los palcos o que? -cuestionó mi padre y negué.

-Necesitaba insuflar un poco -mentí- Ya sabes esto de la defensa me ha dejado como una loca.

-A tu madre se la ha ocurrido ir a cenar algo juntos -hablo Su-Jiu- Crees que puedan venir? -dirigió su pregunta a Nayeon.

-Yo estaría encantada -respondió ella y le di un codazo.