"Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias"
Pero ¿Y si ese hilo conecta tres personas?
¿Eso es posible?
Lυcнαr pαrα ѕoвrevιvιr, ѕoвrevιvιr pαrα αмαr⸻ ϟ
#1 EN STEPHENST...
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(Capitulo extenso ♡)
Un año más tarde.
—Melody cariño, es hora — toqué su puerta al pasar mientras me ponía la chaqueta para ir a dejarla a la escuela antes de irme a la base, fui a mi cuarto. Cogí mi bolso, las llaves del auto y cuando volví a pasar aún no había salido. En cambio, me encontré a Stephen con un oído pegado contra la puerta, rodé los ojos — solo tiene nueve.
—Y está actuando como una adolescente — murmuró divertido — apuesto a que hago que salga — subió y bajó las cejas y alejó la taza de café humeante de sus labios. Aproveché para quitarla de sus manos y llevarlas a las mías.
—Adelante — me hice para atrás encogiendo los hombros. Me apoyé en la pared con la taza calientita de café en las manos — inténtalo.
Me guiñó un ojo y se aclaró la garganta antes de tocar una sola vez la puerta.
Silencio.
—¿Elena acaso sabes donde voy a dejar estas entradas al concierto Tour de este...? ¿Cómo se llamaba? — me quité la taza de los labios y lo miré boquiabierta — Este que canta — y comenzó a moverse — As it was... As it was... You know...
Melody abrió la puerta antes de que pudiera tomar aire para respirar, su cabello rubio cayó a un lado y sus enormes ojos azules se fueron directo a Stephen junto a la puerta de brazos cruzados.
—¿Conseguiste los boletos?
Stephen encogió los hombros desinteresadamente.
—Talvez sí, tal vez no ¿Quién sabe?
—¿Tú? — luego me miró — ¿Los consiguió? ¿Ya te... dijo?
Parpadee.
—¿Decirme qué?
Stephen sonrió y acercó a Melody agachándose a su altura.
—Primero un beso y luego te digo si las tengo — Melody se puso a reír y a dar saltitos emocionados. Lo abrazó colgandose del cuello y le dio un beso en la mejilla. Stephen, como un perfecto malcriador silencioso movió los dedos y cuatro boletos para el concierto tour de Harry Styles aparecieron en las manos de mi hija.
—¡Eres el mejor papá del mundo! — dijo volviendo a abrazarlo.
—Eso lo sabemos pero no lo digamos en voz alta — le respondió besándole la cabeza.
—¿Pero cuatro?
Melody y yo nos miramos confundidas.
—Yo también iré, obviamente — dijo, el hechicero supremo apareciendo por un portal tras Stephen — no es que, me guste pero...
Stephen suspiró y agachó la cabeza.
—Tienes tu iPod lleno de musica de Styles, Wong — lo acusó con voz grabe. Wong se puso a reír nervioso y luego lo miró como si lo fuera a degollar vivo.
