Porchay ha sido novio de Kim Theerapanyakul por más de dos años. A simple vista parecían una pareja perfecta, incluso para Chay, Kim era el hombre de su vida. Pero había un pequeño problema; los celos y la posesividad de él. Lo de ser un mafioso era...
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Kim es tan guapo, ¿por qué terminaste con él?
Maldita sea, ¿quieres tener sexo conmigo? Es decir, ahora que estás solo.
Me detuve completamente disgustado por el último comentario, me volví hacia el chico pelirrojo frente a mí.
─¿Qué dijiste?
Él sonrió.
─Vamos, todo el mundo lo piensa, yo soy el único que ha tenido agallas para decirlo.
─Eres... ─fui interrumpido por una voz detrás de mí: profunda, ronca y con ira.
─¿Qué fue lo que dijiste?
Me dieron escalofríos ante lo enfadado que sonaba Kim. Todo el mundo se había callado, lo cual era un alivio para mí, ya que me habían bombardeado de preguntas desde que había entrado, una multitud se había reunido a mi alrededor durante toda la mañana.
El pelirrojo se quedó inmóvil mirando a Kim. Se humedeció nerviosamente los labios.
─Has tenido el atrevimiento de decir, ¿el qué? Respóndeme ─dijo Kim con las manos alrededor de mi cintura, tirando de mí hacia él.
Me relajé un poco contra él, feliz por la barrera invisible que había creado entre los chicos y las chicas desesperadas.
─N-no lo decía enserio, s-solo le pregunté, ahora que está solo... ─ dijo.
Kim gruñó.
─¿Cómo te atreves? ─rugió, se movió hacia delante, empujándome detrás de él.
Me aparté en silencio, era mi única oportunidad de escapar.
─¡Lo siento, hombre! ─se disculpó el pelirrojo, alejándose cada vez que Kim se acercaba.
Corrí hacia una esquina, aprovechando que todos mantenían su mirada en Kim y el chico.
Sentí pena por él, pero lo que había dicho estaba fuera de lugar.
Puse la mochila en mi hombro. Oí un grito que provenía de mi derecha, miré a Kim, quien me veía. Me detuve resbalando y vi a Macao esperándome.
Me reí a pesar de que me sentía culpable, el Sr. Chop era un buen hombre y un buen maestro.
Entramos en la clase de Matemáticas, caminamos hacia nuestros asientos, que estaban adelante. El resto de la clase llegó mientras sacaba los libros y Macao se quedó quieto, girando un pequeño hilo alrededor de su dedo.
─¿Por qué estoy aqui? ─preguntó.
─Debido que esta clase es importante ─respondí abriendo mi libro.
─Sí, claro ─resopló.
Iba a hablar cuando fui interrumpido de repente, la puerta de la clase se abrió. Todos nos giramos para ver quien era... P'Kim.
─¿Qué haces aquí? ─preguntó Macao molesto.
Él no le hizo caso, tenía un papel en la mano que le entregó al Sr. Chop, luego salió de la clase sin mirar o hablar con nadie. Me quedé sorprendido, por un momento creí que había venido por mí.
─P-Porchay, t-te bu-scan e-en di-re-cción ─dijo el profesor en voz alta.
Inmediatamente todos comenzaron a murmurar, todo el mundo se preguntaba lo mismo que yo. ¿Por qué el director me quería en su despacho?
─¿Por qué? ─preguntó Macao.
El profesor lo ignoró y se acercó a mí con la nota en la mano y me la dio.
─Ve-ve-vete.
─Está bien ─murmuré, dejé mi mochila y el resto de mis cosas─. Te lo diré cuando vuelva ─dije a Macao, haciendo caso omiso a todos los demás y salí del aula.
─¡Más te vale! ─gritó Macao antes de que cerrara la puerta.
Miré hacia abajo y leí la nota:
"Porchay Kittisawasd, está citado en el despacho del director en relación al incidente que se produjo esta mañana en el pasillo, a las 10:35.
Clase B12. Hora 11:15. Profesor Sr. Chop".
Un segundo después de dejar de leer, una mano me tapó la boca aislando mi grito de sorpresa, alguien me metía en un cuarto oscuro.
La puerta se cerró, y luché, quien quiera que fuese, me liberó la boca dejándome respirar.
Me enderecé contra la pared y luego una luz se encendió. Miré a mi alrededor y me di cuenta que estaba en la habitación de objetos perdidos, y entonces lo vi.
