Capitulo 3: Miradas

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Luego de unos minutos de charla más entre Julián y su amigo, terminó de arreglarse la chica que él esperaba, Scarlet, al ver que la rubia despampanante se acercaba hacia ellos, le sonrió con entusiasmo.

- ¿Nos vamos Julián? – cuestiono Scarlet, sujetando los hombros de Julián mientras permanecía parada detrás de él.

- Si, amor, vámonos – respondió Julián.

- ¿Irse? ¿Te vas?, no me dijiste que iríamos al bar hoy, ¿olvidas que dejamos pendiente una partida de billar? – exclamo Jack sorprendido.

- Lo siento Jack, pero hoy tengo algo más importante que hacer – tras decirlo se paró y sujeto por la cintura a Scarlet – te veo luego hermano.

- ¡Suerte con eso! – le respondió Jack con una sonrisa.

Jack al verlos salir juntos y abrazados, solo sonreía, bien sabía a lo que se refería su amigo. Así que llego a la conclusión que él haría lo mismo con Andy, otra modelo de la agencia, quien parecía andar cerca y lo había estado observando con una sonrisa y gestos de seducción. Sin embargo, justo cuando se paró y estaba por avanzar rumbo hacia donde se encontraba su objetivo, noto una figura muy particular atravesarse en su paso.

- ¡Jack! ¿Dónde está Julián? – exclamo Melissa con enfado, llegando allí de improviso.

- ¿Julián? – cuestiono Jack.

- Si, ¡Julián!, tu amigo, mi novio ¿acaso sufres de amnesia Jack? – cuestiono Melissa con sarcasmo.

- No Meli, sé perfectamente a quien te refieres, es que ¿sabes?, ya se fue – dijo Jack encogiéndose de hombros.

- ¿Se fue? ¿A dónde? ¿Con quién?, estoy segura que se fue con alguien Jack, no intentes engañarme, ¿dime dónde está? – reclamo Melissa.

- No lo sé Melissa yo no soy su niñera – respondió Jack – si me permites, me están esperando – le dijo a Melissa haciéndola a un lado con su brazo y caminando hacia la chica castaña que aguardaba por él.

- ¡Ash! ¡maldita sea! ¿Dónde demonios estás Julián?, este estúpido de Jack seguro me mintió, no es más que un encubridor – dijo Melissa para sí misma.

Melissa no estaba errada, conocía muy bien a su novio y sabía que esas sesiones fotográficas por lo regular terminaban en la cama con alguna modelo. Así que sentía rabia solo de pensarlo, no obstante, decidió buscar en cada rincón del edificio, sin éxito alguno, pero cuando creyó perderlo todo noto que el auto de Julián aún estaba en el estacionamiento.

Dentro del vehículo se hallaba Julián quien estaba besándose y acariciándose apasionadamente con Scarlet, sin percatarse que Melissa había distinguido el coche. Pero justo antes de que la novia de Julián se acercara; a él se le ocurrió agacharse a buscar las llaves del apartamento que tenía en algún lugar de su auto. Por lo regular dejaba esas llaves en la casona de sus padres, aunque deseaba tener la suerte de hallarlas esa noche.

- Las llaves, no las encuentro, no puede ser – exclamo Julián, buscando en todos los compartimientos del coche, justo cuando se hallaba hurgando los compartimientos superiores, vio en el espejo retrovisor a Melissa acercarse - ¡Rayos!, Melissa viene para acá, debemos irnos.

- ¿Melissa? ¿Tu novia? – cuestiono Scarlet, quien de igual forma miro hacia atrás del auto y vio que efectivamente la joven alta de cabellos lacios y rubios se acercaba a prisa, aunque aún no estaba lo suficiente cerca como para notarlos. Ya que el lugar era iluminado por una luz tenue.

- Iremos a mi departamento, allá le diré al portero que me dé acceso, vámonos, no quiero que Melissa me arme un lío – tras decirlo, Julián se acomodó la camisa desabrochada rápidamente y arranco el vehículo poniéndose en marcha a la salida, sin importarle que su novia se encaminaba furiosa hacia él.

Deseo y sacrificioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora