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— Está terminado. — dejó suavemente el USB sobre el escritorio de su jefe. Nam asintió lentamente y lo tomó entre sus dedos para guardarlo en un cajón a su derecha. — Hice mi mayor esfuerzo, Hyung.

— No me cabe duda de eso. Te daré una respuesta la próxima semana.

— De acuerdo... — miró alrededor en la oficina, sin duda era muy al estilo de Namjoon. Jugaba con sus dedos nervioso preparándose para preguntar algo que fácilmente se podría malinterpretar. — Tú hermano... ¿Sigue en la estación Metropolitana de Busan?

Kim lo miró con el seño fruncido, dejando de teclear y soltando un suspiro.

— Sí. ¿Porqué lo preguntas?

— Sólo... Curiosidad. — le sonrió inocente haciendo que el pelinegro vuelva a su labor en la laptop. — ¿Qué haré mientras me das una respuesta?

— Tal vez dormir cuatro días seguidos y sólo despertar para comer. Te ves terrible.

El castaño se encogió en el asiento frente al escritorio. Viendo a Namjoon tan concentrado en su trabajo, dudó en contarle lo que le pasaba por la mente.

— No creo poder hacerlo. — Kim lo miró confundido. Jimin tragó saliva viendo la oscura madera cerca de él. — El criminal Jeon Jungkook ha dejado muchas dudas en mí. Y si te soy sincero, creo que no debí haberlo puesto en mi informe porque podría ser el motivo para que no lo acepten.

— ¿Y eso porqué?

— No coincide con lo que yo supongo. Todos los demás sí, pero lo único que podría llamarse traumante en su vida entes de volverse un asesino, es el suicidio de su madre. Además, dice que no recuerda nada sobre los asesinatos.

— Según sé, estaba bajo las influencias de las drogas.

— No hay manera de comprobarlo.

— Jeon era un consumidor constante.

— Pero nada asegura que en el momento de los homicidios, él estaba bajo las influencias de las drogas. Pudo haberlo inventado, tampoco es como si luego de estar bajo los efectos perdiera la memoria sobre lo que hizo.

El mayor suspiró dejando de mover sus dedos sobre las teclas y se acomodó en la silla forrada en cuero café, miró a Jimin seriamente.

— Es posible. ¿Haz oído acerca del más temible asesino coreano?

Por supuesto que lo conocía.

— Lee Chungjae.

— No. Chungjae es el asesino más grande de Corea, y yo pregunté por el asesino coreano más grande.

— Pero Hyung, es él. Asesinó a quince personas sin piedad, sus crímenes son los más infames del país.

— Pero Kang Hosun es el asesino coreano que atormentó el Seúl en los dos mil, con un total de diecisiete victimas. Se volvió drogadicto luego de la muerte de su esposa y perdía el control con ataques de ira. Si le sumas las influencias de las sustancias que consumía, lo volvía completamente inconsciente de sus actos. El consumo constante le provocaba lagunas mentales. Así que el que Jeon no recuerde, es muy posible.

— En algún momento los recuerdos regresan y han pasado tres años, es más que suficiente.

— Como sea. Jeon ya está tras las rejas pagando por lo que hizo, no sé a donde quieres llegar con todo esto.

Se quitó las gafas en signo de cansancio. El castaño lo miró con seguridad.

— ¿Y si realmente no está pagando por todo lo que hizo? Que al igual que Lee Chungjae, Jeon Jungkook pudo haber matado a muchas otras mujeres, ese hombre se guardó para si mismo catorce víctimas y sólo estaba pagando por una. Hyung, he notado en Jeon un comportamiento extraño cada que se menciona o ve a las prostitutas y-

En la mente de Jeon | KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora