En la mente de Jeon | KOOKMIN

031

En el momento en que abrió la puerta color madera, fue bastante notorio el pesado ambiente dentro de la oficina de Kim.

Su jefe estaba sentado en su escritorio, con el cuerpo desparramado en el asiento y la mano derecha sirviendo de soporte debajo de su barbilla, miró a Jimin tan pronto como éste apareció en el umbral de la puerta. Parecía enojado.

Y el hecho de que aquel corpulento detective estuviera sentado frente al escritorio, pudiendo ver sólo su espalda, nuca y cabeza, pues parecía ignorar la presencia del castaño; le decía a Jimin que algo tenía que ver con el aparente disgusto mañanero de Kim Namjoon.

Tras tragar saliva y prepararse mentalmente, dio el primer paso hacia adentro, escuchando el resonar contra el piso pulido y sintiéndose asfixiado cada vez más por la mirada de su jefe.

— Ya estoy aquí. — se detuvo frente al escritorio, mirando al de piel trigueña e ignorando a Mingue sentado a su lado. — ¿Para qué me ha llamado?

— Me he enterado de algunas cosas.

Dijo sosegado, componiendo su postura y quitando su vista de Jimin.

El castaño se puso rápidamente en alarma.

¿Era por su encuentro con Mingue?

¿Dormir con Kim Taehyung?

¿El desastre que hizo borracho?

¿Investigar a Jeon?

¿Supieron de su beso en el baño?

¿Que se contactó con Seungmin y lo sobornó por información?

¿Los perfiles que le pidió a Hoseok?

¿Que fue a la antigua casa de Jungkook?

¿La visita con Jeon del día anterior?

¿Que casi folla con él?

¿Qué diablos era?

— ¿Q-qué cosas? — se mantuvo de pie, tomando sus propias manos detrás de su espalda.

— Mingue encontró cosas en tu departamento. Estás investigando a Jeon.

Abrió su boca para responder, quedando las palabras atoradas a media garganta. Primero que nada...

— ¿Cómo sabe Mingue que...

— Ese día que discutieron, dejaste la puerta de tu departamento abierta y él entró. No fuiste discreto al dejar todo lo que tenías sobre la mesa de centro.

Soltó una risa irónica, soltando la perilla y metiendo las manos en los bolsillos. Un error.

— ¿Entró a mi casa y revisó mis pertenencias sin un permiso? Hyung, eso es ilegal ¿Porqué tendría que-

— No cuestiones, Jimin. Tienes cola que te pisen.

Se quedó callado de nuevo. Mingue volteó a verlo por primera vez, fue burlón y le hizo sentir inferior.

Entonces Nam sabía.

— Sólo estoy investigando a Jeon, nada malo, al contrario, quiero que se haga justicia.

Se excusó sin que se le acusara de algo todavía.

— ¿Y crees que tus métodos son los correctos? ¿Tienes siquiera motivos para iniciar una investigación?

— Los tengo ahora. He estado hablando con Jeon, admitió haber asesinado a otras seis mujeres, mis sospechas eran ciertas.

— ¿Y porqué no se lo notificarte a un superior? Ese recluso puede estar jugando contigo.