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Abro mis ojos rápidamente observando a mi alrededor, aquella húmeda y sucia habitación solo contaba con las paredes grises sin ventanas, una luz sobre mi cabeza. Intento moverme, pero algo impide que lo haga, siento como mis muñecas duelen al igual que mis tobillos, como si estuviera atacada a ella.

Muevo mis muñecas, confirmando que estaban atadas—¿Dónde estoy?—Murmuro con un poco de dolor en mi cabeza.

Me sigo moviendo y siento a otras dos personas detrás de mí—¿Qué rayos?—Susurra Rosie—Ahora uno no puede dormir, dejen dormir—se queja.

—¡Rosie! Chicas despierten.—Digo, feliz por saber que estaban bien y que estaban a mi lado.

—Cierra la boca Summer, me duele la cabeza—murmura Nala.

—¿En dónde rayos estamos?

—Me alegra que estén bien—susurro.

—¿Qué tanto...madre mía, ¿en dónde carajos estamos?

La puerta se abre, dejando entrar la luz, aquello hizo que cerrara los ojos—Que bueno que despertarán las pequeñas zorras—aquella voz, me recordó a Samantha. Sigo intentando adaptarme a la iluminación de afuera pero no es posible.

—Esa voz es de la zorra con patas—dice Rosie.

—¡Cierra tu maldita boca Rosemary! O como quiera que te llames, ¿en que estaba pensando tu madre cuando te coloco ese nombre?—Responde cerrando la puerta.

La risa de Rosie se escucha—lo mismo que tu madre cuando te coloco Samantha—escucho como golpea a mi hermana—puedes golpearme todo lo que quieras, pero jamás dejarás de ser una zorra.

Respira profundo—no me voy a comportar como ustedes—dice colocándose frente a mi—ahora, las reuní...

—No, nos secuestraste—le corrige, Nala.

—¿Pueden cerrar sus lindas boquitas, por una vez?—Murmura Samantha con una sonrisa en sus labios.

—¿Qué quieres de nosotras? ¿Qué te hicimos para que nos tengas aquí?

—¿Y me lo preguntas? ¿De verdad? ¡Cuando fueron ustedes las que arruinaron nuestras vidas!

—¡Tu misma arruinaste tu vida al obligar a Jimmy a casarse con tu hija!—Le grito, furiosa.

—Yo no obligue a nadie—me dice, elevando la voz.

—¿Ahora no lo obligaste? ¡Le mintieron! Le dijeron que sería papá, ustedes lo engañaron, lo estafaron—digo, recordando aquellos días. La forma en la que me sentía.

Ella me mira molesta—me las pagaras—saca un cuchillo enorme de su espalda y me apunta en el hombro con el—Por su culpa mi hermosa hija no pudo tener una familia.

—¿Familia? Con solo mentiras—Le digo, sin importar que mi vida corriera peligro.

—¡Cierra la boca!—Ocasiona un corte, no tan profundo para dejar cicatriz, pero sí lo suficiente para sangrar.

—¿Te molesta que te digan la verdad?—Pregunta Nala, con todo el valor del mundo—no fue solo Summer, fuimos todas las que ideamos un plan para que no tuviera la vida que tu hermosa hija le iba a ofrecer a Jimmy.

—¿Y sabes qué?—Dice Rosie—lo haría una y otra vez—entonces Samantha, se alejó de mí y escuche a Rosie y a Nala quejarse.—¿Sabes, por qué? Porque mi hermana es feliz con él

—Puedes hacernos lo que quieras, pero no cambiaras nada de lo que paso.

Sin embargo, la puerta se abrió dejando pasar a tres hombres que se colocaron uno al frente de nosotras—¿Ahora si me tomarán en serio?

What we thought was lostDonde viven las historias. Descúbrelo ahora