What we thought was lost

7

Mire a las chicas, sin entender lo que estaba pasando.

Mi hermana, ¿podría ser tan cruel que engañaría a Jimmy?

—Vamos por ese soldado.

Las tres corrimos en dirección hacia el soldado, pero no lo vimos.

—Bien, debe estar en la cocina.

Entramos a la cocina y ahí estaba el. Apoyado en la isla que está en medio de la cocina.

—Buenas soldado.—Dijo Nala "seductoramente"

Él se iba pero Nala y Rose corrieron, interponiéndose en ambos extremos de la mesa, impidiéndole el paso.

—Yo...—Aquel soldado estaba muy nervioso.

—¿Que hay entre tú y Peytato? —Preguntó, muy seria.

—Peyton.—La corregí.

—Como sea, Peytato y Peyton es lo mismo. ¡Responde!

—No...

—La verdad soldado o haré que sufra las consecuencias.

—No sería capaz.

—Mi amiga aquí, trabajo con los del FBI y la CIA. ¿Adivina quién hacía los interrogatorios?—Asustó Nala.

Aquel hombre trago saliva, a decir verdad, jamás las había visto tan serias en mi vida. Hasta a mí, me daba miedo.

—Señorita Summer...

—Brandon. Te recomiendo que respondas.

Nala amenazó con golpearlo. Pero un pequeño grito femenino se escuchó de su boca mientras cubría su rostro.—No hay nada.

—¡La verdad soldado! Porque te juro por lo más sagrado que tengo, que te romperé los huesos y haré una sopa con tus costillas.

—Estoy entrenado para no decir nada—dice, lleno de valor.

—¿Ah, sí? —Sonrió Nala, mientras que iba maquinando un plan, para hacerle hablar.

—Vendrás con nosotras.

Ambas lo tomaron por sus brazos—¿Qué piensan hacer?

—Ya verás.

Y en poco tiempo, nos encontramos en la habitación de Nala; con el soldado colgado de cabeza y siendo sostenido por mis dos mejores amigas.

—Será mejor que hable soldado, porque mi mejor amiga es muy delgada—dijo Nala—y en cualquier momento lo puede soltar.

—Me gusta la vista, por mí no hay problema.

—Chicas, creo que esto está mal.

—Cierra la boca—me dice Nala—tiene 5 soldado.

—No me soltaran.

Pero, Nala hace como si se le resbalara y aquel hombre grita como mujer, por segunda vez—Van a despertar a todos en la casa.

—Hable soldado. ¿Vale la pena seguir guardando el secreto?

—Está bien, está bien—Dice asustado.

–Hablé—dice Rose.

—Sólo nos encontramos un par de veces....

—¿Sexual?

—¡Si!

Todo se vino abajo, ¿Cómo podía hacerle eso a Jimmy?

—¿Sabes algo si Jimmy sabe?

—No señora.

—¿Que mierda le pasa a mi hermana?