Capítulo 6: El Círculo.

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Las salas del círculo estaban llenas de cadáveres...Templarios....magos que mas daba todos ellos eran personas.

-Pobres diablos quedaron aquí atrapados como ratas- dijo Alistair rompiendo el silencio que había al nuestro alrededor.

-Tal y como estamos ahora nosotros - dijo Zevran.

-Ni los niños se han salvado, ¿que culpa tienen ellos ?- se lamento Leiliana.

-Ninguna, pero debemos seguir adelante- les dije a mis compañeros.

Por extraño que fuese las habitaciones estaban realmente calmadas y no había signo de que hubiera enemigos acechando en los rincones.

Investigamos cada una de las habitaciones que nos encontrábamos a nuestro paso, rebuscábamos en los papeles y en todo lo que había para intentar averiguar qué diablos había pasado ahí, a falta de encontrarnos supervivientes creímos que era lo mejor.

Abrimos la última puerta del pasillo cuando oímos unos gritos. Al entrar en la habitación vimos que un demonio había traspasado lo que parecía una barrera mágica e iba a atacar a una joven maga.

Intente llegar a ella lo más rápido que pude para protegerla pero una anciana maga conjuro un hechizo de frio lo que hizo que el demonio se disipara tan punto toco muerto el suelo.

-Quieta donde estas, si das un solo paso más te fulmino - dijo la anciana dándose la vuelta.

-¿Wynne? - pregunte extrañada.

-La recluta de Duncan - dijo con un tono más sereno.

-Si soy yo - le afirme.

-¿Como os han dejado entrar los Templarios? - me pregunto.

-Están esperando la orden de anulación- le respondió Alistair.

-Así que creen que ya no tenemos esperanza - dijo la mujer con voz abatida.

-Wynne si vosotros habéis sobrevivido hasta ahora puede que encontremos más supervivientes, los magos no sois personas indefensas, debemos peinar el resto de la torre- le dije a la mujer.

-El Caballero Comandante solo aceptara que el Círculo es seguro si el mismísimo Primer Encantador se lo dice en persona - le dijo Alistair.

-Pues tendremos que encontrarle sea como sea no hay más remedio- dijo Wynne.

Entonces se le acerco un niño pequeño.

-Pero Wynne si quitas la barrera los monstruos podrán entrar ¿no? - pregunto el muchachito con miedo.

-Tranquilo - le dije arrodillándome delante suyo - ninguno de ellos podrá tocaros, los matare a todos.

El niño me dedico una pequeña sonrisa, la misma que me dedicaba Oren cuando creía que yo era como uno los héroes que había en los libros que le leía. Fue una sensación agridulce.

-Tienes mucha confianza en ti misma, esperemos que eso no nuble tu juicio joven amiga- me dijo Wynne con una sonrisa.

-Te aseguro mi noble maga que nuestra Guarda es capaz de eso y mucho más - dijo Zevran en un tono zalamero que me hizo arrancar una sonrisa.

-Disculpad Wynne, siento pediros esto sin conoceros, pero hirieron a Freyja durante nuestro camino ¿alguno de ustedes podría sanarla? - pregunto Leiliana.

-Ya ni me acordaba - dije sacándole la lengua a Leiliana.

-Por supuesto que si querida - le dijo Wynne a Leiliana - déjame ver la herida Freyja.

Wynne, Leiliana y yo nos dirigimos a un lugar más apartado de la sala donde estábamos para que pudiera quitarme la armadura sin la atenta mirada de Zevran posada sobre mí.

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