Capítulo 7: Atrapados en el Velo.

58 9 0
                                    

Me desperté en una cama que no era la mía y mire alrededor extrañada, donde se suponía que estaba no podía recordarlo y era algo inquietante.

Alguien se movió a mi lado en la cama y al bajar la mirada para averiguar quién era....

-¡Alistair!- grite por la sorpresa.

-¿¡Que! - pregunto mientras se incorporaba de golpe.

Se levanto a tal velocidad que la sabana dejo al descubierto su cuerpo desnudo al mismo tiempo advertí que yo también estaba desnuda. Cogí la sabana como un rayo y me cubrí mis pechos desnudos.

Alistair miro a su alrededor y al ver que no había peligro se volvió hacia mí.

-¿Qué ocurre? - Me pregunto con aire divertido - ¿una pesadilla?

Negué con la cabeza y él me miro con una mirada ardiente de deseo

-¿Qué hacemos en la cama juntos y desnudos? - pregunte mientras sentía enrojecer.

-Dormir, pero antes de dormir creo que todo el plació habrá oído tus gemidos- me dijo.

-¿¡Cómo!- exclame.

Alistair me cogió por la cintura y tiro de mí hasta que estuve totalmente tumbada en la cama y empezó a besarme el cuello, resiguiendo la línea de la mandíbula con sus besos hasta llegar a mis labios. Me los beso con furia tanto que pensé que iban a sangrarme en cualquier momento, me sabían tan distintos al beso que se suponía que debía recordar y no acababa de ubicarlo.

Su mano se fue directa a mi pecho, cogiéndomelo con una fuerza parecida a la de sus besos, luego se traslado de ahí a mí estomago y la continúo bajando hasta el interior de mis muslos. Intente refrenarlo con mi mano y entonces alzo la mirada.

-Esta noche no me has detenido- me dijo con una mirada lasciva.

-Alistair por favor para no puedo concentrarme - le dije suplicando.

-¿Y en qué quieres concentrarte? ¿A caso no te está gustando lo que estoy haciendo?- me dijo antes de coger uno de mis pezones entre sus dientes haciéndome sentir un escalofrió de placer recorriendo mi columna vertebral.

-¿Que es eso de plació? - pregunte en un momento de claridad mental.

-Esta mañana estas muy extraña mi vida- me dijo- ¿vivimos aquí no lo recuerdas?

-No- dije tímidamente- ¿Qué ha pasado con el Archidemonio, la plaga y los engendros tenebrosos?

-Lo matamos a él y a todo engendro tenebroso que hubiera - me conto.

-¿Así la ha acabado la Ruina?- le pregunte.

-Si, Cailan estaba tan agradecido con nosotros que al final me reconoció como su hermano, creo que te pidió que fueras su amante pero le rechazaste para casarte conmigo y por eso vivimos en palacio- me conto.

-¿Qué estamos casados? - pregunte incrédula.

-Bueno literalmente no hace ni un día ¿Tanto bebiste anoche para no acordarte de nada?- me pregunto con mirada picara.

-No recuerdo haber bebido y ¿Dónde está Duncan? - pregunte.

-Luego tenemos que reunirnos con el pero ahora....- antes de que pudiera acabar la frase volvió a besarme.

Pero no me gustaba la manera que me besaba y me tocaba, había algo en todo aquello que no encajaba y me era muy difícil concentrarme.

Freyja concéntrate ¿donde estabas? Concéntrate me dije a mi misma. Entonces en un rincón escondido de mi mente vi la torre del circulo y a la criatura que habíamos visto cuando cruzamos la ultima puerta y entonces todo encajo en mi mente.

Esta es mi historia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora