3| En quiebra ☀️

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—¡Cabalgas como tu abuela!

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¡Cabalgas como tu abuela!

—¡Al menos la mía está viva!

Calam hizo su mayor esfuerzo para rebasar a Lucien, rebotada en su caballo una, otra, y otra vez, inclinándose hacia delante, sujetando las riendas con fuerza, moviendo sus piernas al compás que las de su caballo color blanco, su casco estaba estorbándole demasiado, no se lo había puesto bien, ya que sus ansias de cabalgar hoy y ganarle a Lucien eran grandes, pero, lo de ganar no le había resultado tan bien.

Lucien festejó mientras alzaba su mano izquierda hacia arriba y se quitaba su casco negro con la otra con mucha agilidad, haciendo que su cabello rojo brillara con la luz del medio día, algunos mechones estaban pegados en su rostro por el sudor. Limpió su frente con su guante blanco. Y la sonrisa de victoria que tenía el día de hoy por segunda vez era molesta para Calam. Brillante y radiante. Ganando. Triunfando.

Calam reveló su cabello oscuro, estaba aplastado por el casco, pero solo hizo falta revolverlo un par de veces para que regresara a la normalidad. Le dolía sus manos por la fuerza de la rienda, se le había olvidado sus guantes ese día, no importaba, solo estaban en entrenamiento.

—¿Qué pasa con esa expresión? Deberías de estar feliz, solo fueron dos veces esta vez, al sábado anterior fueron tres.— Lucien le provocó.

—Ja. Ja. Tuviste suerte, me distraje por unos segundos.

—¿Con mi mirada?

Calam le sacó el dedo de en medio.
Lucien rio y bajaron los dos de sus caballos.

—¡Ustedes dos! ¡Les dije destreza física!

El entrenador se acercaba a los dos chicos con una expresión de querer golpearlos.

—Eso fue lo que hicimos, destreza física.— dijo Lucien.

—¡Pero de ustedes, no del caballo!

—Oh...

El entrenador suspiró.

—Déjenlos en el establo, lo pasamos para el siguiente fin de semana, y Lucien...— el entrenador lo miró.— buen trabajo.

—¡Oiga, solo me distraje por unos segundos!

Calam se enojó haciendo que Lucien sonriera.

—Y esa distracción te hubiera hecho perder en la clasificatoria del siguiente mes, ahora, retírense y regresen a su trabajo, mi hermano está como loco buscándolos.

Lucien y el entrenador rieron. Calam solo tomó la rienda de su caballo blanco y empezó a caminar hacia los establos, él pelirrojo lo alcanzó con su caballo negro después de despedirse del entrenador.

Todo estaba en un mismo sitio. Su trabajo, el hipódromo donde entrenan con sus caballos, y el establo donde descansan. Trabajan en un casino, donde las personas más ricas de Estados Unidos llegan a beber, perder dinero, perder dignidad, hacer el ridículo para obtener a una persona y tratar de llevársela a la cama. Si, ese tipo de casino, igual a muchos, con las mismas funciones tal vez, pero en este casino, lo diferencia de una sola cosa, es un casino gay. Uno donde puedes besarte al quien quieras sin ser mal visto por la sociedad, puedes ser tú mismo, puedes descubrirte tal vez, llamar la atención de alguien muy diferente a tus gustos, pero que al final, consigue enamorarte. Si, esa clase de casino.

Matrimonio FicticioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora