Cuarenta y cinco

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                    Jungkook;

—¿Cómo...que-? —sonreí de lado incrédulo y aún procesando lo que me había dichoTaehyung. Pasé mi mano por mi pelo presionando mis labios—. ¿Estás realmente seguro?.

—Félix acabó de decírmelo —fue su respuesta—. Es aparentemente la mano derecha de Xiumin.

Incrusté con fuerza mi mano sobre la madera de mi mesa de trabajo apoyando mis manos sobre estas bajando mi cabeza mientras suspiraba profundamente cerrando mis ojos por unos segundos.

—Es lo último que me faltaba —sisee entre dientes.

—Me parece que sé lo que está pasando —habla Jimin y lo observo—. Sung se unió a Xiumin para tener seguridad ante ti. Estoy seguro de que ese ha sido su plan. Es decir...¿por qué más se uniría a Xiumin?. No tiene sentido. Esta claro que lo hizo para protegerse de ti.

Chasquee con fuerza mi lengua.

—Sólo que...no creo que esté enterado de que su hermana es tu novia. Y que ahora soís cuñados —prosigue él y humedezco mis labios.

—¿Que vas a hacer? —pregunta Taehyung captando mi atención nuevamente—. ¿Cambiarás los planes?.

—No —respondí inmediatamente—. No cambiaré nada. Todo lo que se haga o se vaya a hacer se hará. Sung se equivocó una vez mas.

—Debes decírselo a Hyeri —habla Jimin y lo miro de reojo—. O...¿no lo vas a hacer?.

Presioné mis labios sobando mi frente y me encogí de hombros sin saber que decir, sin saber que responder exactamente. Miré nuevamente a Taehyung.

—Continúa. Olvidate de Sung. Él ya trabaja para Xiumin. Es enemigo. Ahora más que nunca —dije finalizando y el asintió para salir nuevamente de la oficina.

—Jeon —intentó hablar Jimin pero levanté mi mano indicando que no dijese nada.

—Antes que me preguntes —lo miro—. Sí. Sé lo que estoy haciendo. Y tampoco cambiaré de idea –sentencié. Él se me quedó viendo y asintió entonces. Sin decir nada.

Rodee mi mesa abriendo uno de los cajones de esta sacando una cajetilla con cigarrillos. Saqué uno y con el encendedor lo encendí. Calé de este, mientras millones de pensamientos rodeaban mi cabeza. Me puse frente a la ventana mientras miraba hacia fuera y expulsaba el humo hacia arriba aún analizandolo y pensando en todo.

Sabía que algún día pasaría algo así.
Pero no me imaginé que fuese tan pronto.

                     Hyeri;

—¿Pero no te dijo donde está? —me pregunta Aisha preocupada y niego. Aún con el malestar dentro de mi.

Yirem salió de la cocina dandome un vaso con agua y le agradecí en un susurro para tomar un poco de esta. Sentía mi garganta tan seca.

—¿Se lo dirás a Jungkook? —Yirem se sienta en la mesita frente a mi. La miré, sujetando entre mis manos el vaso y sujeté con fuerza este encongiendome un poco de hombros.

—No sé —musité—. Aunque...¿y si el ya lo sabía?. Y no me lo dijo.

Aisha y Yirem se miraron entre ellas.

—No lo creo Ri —dice Aisha—. ¿Por qué no te lo diría? Él sabe que quieres mucho a tu hermano.

—Lo sé —musité—. Pero son tantas cosas de por medio que no lo sé. Yo...no sé que pasa por la cabeza de Jungkook cuando se trata de sus asuntos, sus cosas.

—Si quieres saber, ¿por qué no lo llamas? —Yirem me extiende el celular observándome. Miro este por varios segundos—. Preguntale. Y así sales de dudas.

Never Be The Same #𝟏 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora