Never Be The Same #𝟏 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔

Cuarenta y ocho

                     Jungkook;

Tomé un poco de mi vino observando a los chicos charlar tan animadamente con Hyeri. De hecho, desde que pedimos la cena, todo se había vuelto muy agradable, acogedor y además, bien familiar. Todos mis amigos en seguida se relacionaron amablemente con Hyeri quién -para mi-, siempre era e iba a ser una dulzura y no dejaba de sonreír divertida ante los comentarios y anécdotas de ellos.

Miré a Hyeri, riendo de algo que le estaba contando Jin y que todos estaban super interesados en aquello. Ella rió divertida ante las palabras de mi amigo, y ladee disimuladamente mi cabeza fascinado con cada detalle de ella. Con cada gesto, expresión. Todo de ella me fascinaba.

De como sonreía, colocaba mechones de su pelo detrás de sus orejas, presionaba sus labios y trataba de no reírse de ciertas cosas que realmente si le hacían gracia pero ella al parecer queria parecer "seria". Observé como una de sus manos estaba junto a la mía. Con nuestros dedos entrelazados y como estaba tan cómoda con ello; así como yo. Como a veces apretaba suavemente mi mano y la movía sin darse cuenta.

—¿Viajaste a la luna? —Hoseok me saca de mis pensamientos.

—Solo observo lo bien que ustedes la están pasando —respondo sinceramente.

—Mhm. Seguro —dice con diversión.

—Bueno, deberiamos brindar —habla Jimin—. Antes de pasar el postre.

Todos asentimos de acuerdo, cogiendo con nuestras manos las copas  con la bebida.

—Yo brindo por...tener más días de esta forma —comienza diciendo Namjoon.

—Por nosotros —añade seguidamente Hoseok.

—Porque nuestros planes futuros tengan éxito —continúa Jin.

—Por nuestro imperio —dice Yoongi.

—Por la felicidad —dice la amiga de Hyeri, Aisha.

—Amor —dice Yirem.

—Por todo lo que hemos conseguido y que continuaremos consiguiendo —sigue Taehyung.

—Por nosotros de nuevo —dice Jimin con una sonrisita—. Porque somos los mejores –guiña un ojo y sonreímos.

Le correspondía a Hyeri y ella sonrió tímida.

—Yo brindo por...estar aquí con ustedes hoy —empezó a decir—. Y por continuar de esta forma.

Todos le sonrieron y finalmente me tocó a mi.

—Salud —elevé mi copa y todos hicieron lo mismo para darle un sorbo a la bebida.

Los chicos apladieron emocionados y al instante varios camareros empezaron a traer el postre. Aprieto suavemente la mano de Hyeri captando su atención.

—Ven —le digo. Ella confundida se levanta conmigo y la hago caminar hacia afuera del restaurante. Justo había una puerta que nos llevaba hacia un balcón de la misma planta. Se usaba más para disfrutar un rato tranquilo y de una, además, hermosa vista nocturna de Seúl.

—¿Que ocurre? —me pregunta un poco confundida.

—Cierra los ojos —le digo. Ella frunce su ceño sonriendo un poco. Y hace caso a mi indicación.

Adentro mi mano dentro de uno de los bolsillos delanteros de mi pantalón sacando la cajita que contenía el colgante de Tiffany & Co.
Abrí la pequeña cajita verde y extraí el colgante. La rodee a ella y aparté cuidadosamente su pelo hacia un costado. Extendí el colgante hacia delante poniéndolo en su cuello mientras lo ajustaba por detrás.