Cincuenta y tres

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                       Hyeri;

Había ido a trabajar al club a pesar de que realmente de lo único que tenía ganas era de encerrarme en mi cuarto, mi departamento, taparme con la sábana, y dormir por eternas horas. Pero sin embargo no podía. Y además, tenía la sensación de que si me quedaba encerrada en mi cuarto me terminaría atormentando más. Así que lo mejor era que viniese al trabajo y así desconectaba más.

Por primera vez, trabajar en ese club, me propinó un descanso. No sé si es que el mundo decidió dejar de darme golpes por el día de hoy y tuve la maravillosa suerte de que ninguno de los hombres del club hayasen sido impropios y hayan acosado de mi de forma verbal. Pude trabajar bien, no estar tan estresada. Y olvidando un poco el tema que me tenía tan pensativa.

Cuando me regresaba a casa, realmente no pensaba encontrarme al hombre de la camioneta seguir detrás de mi cuidándome. No tenía ni ganas de discutir o de llevarle la contraria a alguién. Y sí. Sabemos quién es ese alguién.
Así que continué caminando hacia mi departamento tranquilamente y sintiéndome segura de las calles de Seúl.

Al día siguiente, suspiré mientras lavaba mi boca frente al lavabo. Miré, el post it pegado en el espejo, y lo tomé arrugándolo y tirando este en el cesto. Continué lavando mi boca, y entonces observé el colgante que me había regalado. Terminé de lavar mi boca, y limpié mi rostro con una toalla para dirigirme a mi habitación y quitarme el colgante. Lo dejé encima de la mesita y entonces tomé mis cosas para salir.

;;;

—Estar peleada con él de esta forma no te hace bien, Hyeri —me mira Aisha acercándome un americano.

—No me estoy muriendo —respondí y tomé un poco del americano.

—Pues no —contestó ella—. Pero tampoco tienes la mejor cara del mundo.

—Ya se me pasará —respondí—. Además tengo otras cosas importantes de que preocuparme. Como, que dentro de tres días es la tesis. Y dentro de una semana nos graduamos.

—No puedo creer que realmente vaya a pasar eso. —suspira Yirem—. Al fin graduadas.

—Uno se queja de lo cansado y agotador que es asistir a la secundaria, preparatoria y universidad. Pero no hay nada más satisfactorio que llegar a la graduación con un merecido título y con un futuro lleno de oportunidades —dice Aisha con una sonrisita de felicidad.

—Tienes razón —concordé yo—. Siempre es bueno lograr ciertas metas en la vida.

—Hyeri —vuelve a hablar Yirem y la miro—. No es que quiera sacarte el tema todo el tiempo, pero debes hablar de esto. Y decirnos que harás.

—¿Con respecto a que? —pregunte con un suspiro. Estaba realmente cansada de darle vueltas al asunto. Y que la pelea con Jungkook me hayase afectado más de lo que yo pensaba.

—Con respecto a tu hermano —dice ella viéndome—. Con respecto a Jungkook. Tu relación con él —bajo mi mirada—. ¿Como queda todo eso?.

—No sé —dije sinceramente incapaz de responder a sus preguntas. Preguntas que yo me hacía todo el tiempo y me exhigía a mi misma encontrar las respuestas pero me era imposible. Volví a mirar a mis amigas que me observaban y me encogí de hombros; con ganas de llorar una vez mas—. N-no lo sé.

                  Jungkook;

—Jungkook deja de beber —Jimin intentó quitarme la botella pero lo evité. Trague fuertemente sintiendome un poco mareado. Lo señalé, serio.

—Aquí quién dá ordenes sssssoy yo —dije, arrastrando las palabras y balbuceandolas.

—Lo sé. Sé que eres el jefe. No tienes que repetirmelo. Pero es por tu bien. Dame la botella —intentó una vez más y lo esquivé harto.

Never Be The Same #𝟏 |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora