Castle| pjm. ✓

011

Después del grito aterrorizado de JiMin, que había logrado despertar a todos y hasta Georgiou lo había oído que tenía tapones en sus oídos, todos miraron en dirección de la chica que solo observaba a todos con miedo de que la tiren del avión en ese mismo instante por asustar al príncipe. Su serpiente, Essie, no es mala, la rescató hace unos años y había logrado educarla para no morder ni atacar a nadie, de hecho, era muy cariñosa.

⎯ ¡Suéltala Cleo, te envenenará!⎯ gritó JiMin detrás del asiento de su padre.

⎯ No, no...ella es buena, es mi mascota.⎯ explicó la pelinegra con el animal en la mano, que veía a todos y se acercó al pecho de la chica para esconderse, ganando un suspiro ahogado de Seoun al pensar que le mordería el cuello.⎯ Se llama Essie.

⎯ ¿En serio es buena?⎯ preguntó HoSeok con miedo, pero ella no le entendió y fue trabajo de Georgiou traducir las palabras.

⎯ Sí, es buena, estuvo en mi pierna toda la tarde y no me lastimó. Vean.⎯ hizo el intento de levantar su vestido para mostrar el muslo, pero rápidamente el príncipe la detuvo. No era correcto que muestre su cuerpo a personas que no sean su esposo.

⎯ Déjame verla.⎯ pidió el maestro de idiomas con algo de calma, aunque internamente estaba con pánico de ser atacado y envenenado. Cleo asintió mientras tomaba a la serpiente. Era pequeña, no medía más de 10 centímetros, completamente de color negro y con una piel escamosa.

⎯ No la lastime, por favor.⎯ pidió.

Georgiou se colocó sus lentes para ver al animal mejor mientras la pelinegra la sostenía. Se dió cuenta que no era venenosa porque no tenía el cascabel en su cola, además de que si tuviera veneno, ya los habría mordido, más que nada a Cleo que la tuvo tanto tiempo en su pierna. Una serpiente, por mucho amor que le demuestren, atacará en cualquier momento si se siente amenazada o tiene que sobrevivir.

⎯ No es venenosa, pero aún así tendríamos que llevarla con un especialista para asegurarnos.⎯ comunicó a los demás que suspiraron de alivio. Cleo se sintió algo incómoda al darse cuenta que nadie le creía a ella, y sí al señor, no tenía intenciones de lastimar a nadie.

Horas después, con ese largo e interminable viaje, habían llegado al castillo de los Park, luego de dejar a HoSeok en su hogar ingresaron a la gran estructura que Cleo veía con sorpresa, no podía creer que viviría ahí para toda su vida, si es que todo salía bien. Aún así, se encontraba algo decaída porque la única persona que le hablaba, o por lo menos directamente, era JiMin, y aún seguía con el miedo por la mascota de la pelinegra. En todo el vuelo el príncipe se sentó lejos de ella, y al final Cleo tuvo que dormir sola porque todos estaban alejados y alertas por la serpiente.

El lugar era precioso. La estructura tan bien hecha, arcaica, con todos los detalles posibles, le encantaban a Cleo. Las paredes tenían todas las tonalidades de dorado y un poco de marrón, dando la impresión que estaban hechas de oro o algún material por el estilo, hasta uno que otro lugar tenía brillo, la chica no sabía si era por la espectacular limpieza o porque la pintura que aplicaron tenía esos brillos.

Los empleados del castillo la miraban con asombro, logrando que ella se sienta incómoda al pensar que tenía todas las miradas sobre su anatomía por el vestido para nada costoso, porque era una extraña, o porque JiMin tomaba su mano. Los empleados murmuraban entre ellos, algunos sonreían cuando se hablaban y otros miraban de manera despectiva a la chica.

⎯ ¡Escuchen!⎯ habló el príncipe y todos pusieron la atención sobre él.⎯ Ella es Cleo, estará en el castillo por un tiempo indeterminado hasta que yo lo decida. Les pediré que la traten con todo el respeto posible, porque será la futura reina de nuestro país.