Castle| pjm. ✓

029

⎯ S-sabes quien...⎯ tartamudeó JiMin, con la respiración agitada y mucha tristeza.

Desde el día que Irene se reportó como muerta estuvo investigando todo el tiempo a las personas que habitan en el castillo. Día y noche quemándose las pestañas pensando en quién había sido el maldito que la arrebató de su lado a su propia madre, para después de tanto tiempo, saber que su padre todo este tiempo fue consiente de quien había matado a su mujer, sin hacer justicia.

Miró a su padre, quien se le caía la cara de vergüenza por haber confesado algo que planeaba tener en secreto toda su vida. Sabía que decirle a JiMin la verdad solo complicaría las cosas, podía hacer que su hijo tenga el mayor ataque de ira de toda su vida, y no era el momento cuando en la mañana siguiente estaría viajando a Francia para tener su luna de miel. Siempre supo que su hijo no era estúpido, buscaba por todos los lugares posibles alguna prueba del asesino de Irene, pero TaeHyung siempre estuvo un paso más adelante.

⎯ ¿Quién fue?⎯ preguntó con los ojos cerrados. Tenía lágrimas acumuladas y estaba a tan solo microsegundos de explotar.⎯ ¡¿Quién mierda mató a mi madre?!

Lo próximo que vió el ex rey fue como todo lo que estaba sobre su mesa había caído al suelo, el mueble inclusive. La taza con café frío que tenía encima ahora se encontraba rota, y el líquido mojaba unos cuantos papeles. JiMin cuando tenía uno de esos ataques sacaba fuerza de donde sea, en todo el castillo, si se miraba con atención, en las paredes se podían ver sus puños marcados cuando le ocurría esto, y las paredes tienen más de 100 años, por lo que es complicado hacerles una marca imborrable, pero el nuevo rey lo logró hacer.

Pero entendía a JiMin, él reaccionó igual cuando supo quién había arrebatado al amor de su vida, tal vez de una manera más sigilosa solo para no asustar a su hijo. El menor estaba descontrolado, con las lágrimas corriendo por su rostro mientras en lo único que podía pensar era que su padre siempre supo y nunca fue capaz de decirle, era un derecho como hijo que le correspondía saber del homicida de su madre. Lo que haga o no con aquella persona ya es algo que a su padre no lo concierne.

Su madre no había recibido la justicia que merecía, nadie había encarcelado a su homicida y seguramente la persona seguía libre por quién sabe dónde. Claro que en ese momento pensó que la misma persona que asesinó a su madre es la misma que intenta hacerle daño a Cleo, pero no lo permitirá, la historia no iba a repetirse y él no volvería a hundirse en depresión sin saber quién fue el o la homicida.

No comprendía como su padre nunca le había dicho nada, y dudaba mucho que el homicida esté entre las rejas sin que se haya armado un revuelo, así que la respuesta era más que obvia; seguía libre. Simplemente... no le entraba en la cabeza el hecho de que TaeHyung no hubiera vengado a su mujer, de cualquier manera, pero sí a JiMin le pasara lo mismo con Cleo, apenas supiera donde está la persona que le quitó la vida, le devolvería la tortura unas mil veces hasta que el homicida le suplique por morir, y quizás ahí, si era demasiado bueno, lo terminaba de asesinar de una manera rápida, sino alguna tortura antigua podría implementar de todas las que estaban en los libros ocultos de la biblioteca.

⎯ ¡JiMin detente!⎯ exclamó su padre con molestia.

⎯ No me puedo calmar si sé que...⎯ soltó un sollozo tembloroso, le costaba tan siquiera mirar a su padre y dirigirle la palabra. Además de pensar que era un hijo de puta por ocultarle algo tan importante a su hijo por años, lo consideraba un asesino, y si bien así no era, en ese momento JiMin no tenía mucha claridad en su mente.⎯ ¡Dios!⎯ gritó enfurecido mientras sujetaba su cabello. Cuando vió que su padre quiso acercarse se movió con rapidez lejos de él.⎯ Eres un cómplice de asesinato.

⎯ Sé quien fue hace solo un año, JiMin, no desde el momento que Iren-

⎯ ¡No pronuncies su nombre!⎯ lo interrumpió. Apenas dió un paso hacia adelante para decirle las próximas palabras con asco total:⎯ No te atrevas nunca más en tu maldita vida a decir el nombre de mi madre cuando estás cubriendo a su asesino.