Castle| pjm. ✓

007

⎯ ¡¿Te has vuelto loco?!⎯ exclamó entre susurros, JiMin suspiró cerrando los ojos, se esperaba esa reacción gracias a que Oliver se lo advirtió.⎯ Nos conocemos hace menos de un día, ¿Cómo sabes que puedo ser una buena reina? O mejor dicho, ¡¿Cómo sabes que no puedo asesinarte mientras duermes?!

Obvio que a Cleo le tomó por sorpresa lo que el príncipe le dijo, es decir, no todos los días llega un joven con rostro bello a decirte que quiere que seas la reina de su país, ¿Cómo esperaba que se lo tome?

Si hay algo que ella y su familia saben es que no tiene nada de modales, y nunca se esforzó en tenerlos porque no los veía necesarios. Toda su vida vivió en un pequeño hogar, rodeada de caballos, su humilde familia, y pasto, no más que eso, apenas tiene contacto con la sociedad, y precisamente no iba al bazar a entablar amistades o conversaciones. Si JiMin pensaba hacerla reina de un día para otro, terminarían echándolo a él y a ella de los puestos, porque Cleo ni vestirse adecuadamente sabe.

Y claro que lo veía como una locura, no conoce de nada a JiMin, se preocupaba hasta por su propia integridad, ¿Qué le aseguraba que el príncipe no era un caníbal, violador, o algo por el estilo? ¿Y si ese "quiero hacerte mi reina" en realidad era un código secreto que quería decir "voy a asar tus pulmones en el horno de mi castillo"?

⎯ Escucha, sé que es una locura y todo pero te pido que lo entiendas.

⎯ No puedo entender que de un día a otro quieres dejarme todo un país en mis manos, JiMin.⎯ confesó mirándolo con pánico, y muy pocas veces los ojos de Cleo reflejaban ese sentimiento.⎯ Entiéndeme tú a mí.

⎯ Salgamos de aquí y te explico todo con lujo de detalles.⎯ terminó diciendo mientras suspiraba y hacía una seña mirando por el pasillo, Cleo no sabía cómo reaccionar, la sacarían de la celda, pero a qué costo.

Sus ojos brillaron cuando vieron las brillantes llaves abriendo la reja que la tenía prisionera, pero todo brillo se fue cuando recordó que JiMin dijo "si aceptas mi trato te sacamos de la celda". Ella aún no había dicho que sí ni que no, ¿Cómo JiMin estaba tan seguro que ella aceptaría para sacarla en ese momento? ¿Y si ella se negaba, qué pasaría? ¿Volvería a la cárcel?

Eso ni loca.

⎯ ¿Por qué no sales, ratita?⎯ preguntó el guardia y ella solo lo miró mal por el apodo.⎯ Encima que te sacan de aquí sin tener que poner tú un mísero centavo te quieres quedar.

⎯ ¿Cómo sabes que aceptaré lo que me dijiste?⎯ le preguntó directamente al príncipe, ignorando al guardia.

⎯ Simplemente sé que aceptarás.⎯ respondió seguro de si mismo, con una sonrisa ladeada en su rostro.

Treinta minutos después Cleo y JiMin se encontraban fuera de la prisión de Grecia, y si bien había sido difícil sacar a la chica de allí, puesto que repentinamente había preferido cumplir una condena de por vida antes que irse con el príncipe, pero pudieron sacarla. Y ahora se encontraban camino al castillo de Alyssa, pero para hablar con el padre de JiMin. Los reyes y princesa de su país no tenían nada que ver.

Cleo se negaba a ser pareja de JiMin por varias razones, muchas para contarlas con los dedos de las manos, pero las dos principales eran que no sabía ser reina. No tiene modales, nunca le interesó aprender cosas de reyes y reinas porque nunca se vió en esa posición, así que su aprendizaje en todo eso es nulo. Y la otra razón era que, no conoce de nada a Park. Sí, podía ser un príncipe lindo y demás, pero ¿Cómo sabe que no es un príncipe y solo la está engañando para secuestrarla y violarla en algún lugar?

Definitivamente la cabeza de Cleo en ese momento iba a mil por hora, con setenta mil pensamientos cruzándose.

Finalmente llegaron al castillo, y Cleo entró con JiMin tapándole la boca y sosteniendo su cuerpo como podía, porque la morocha no quería pisar ese lugar ni aunque le den todo el dinero del mundo. No quería cruzarse a la idiota de Alyssa, mucho menos a los padres, y claro que se lo hizo saber a JiMin, pero él solo hizo que ingresaran por una puerta trasera para que nadie la vea. Después de eso fueron a su habitación, donde Cleo se asustó pero no lo demostró.