Según esta teoría el término "enfermedad mental" en realidad está inventado, y las personas con este tipo de padecimiento ven al mundo como es en verdad. Por ejemplo, las alucinaciones y voces que escuchan los esquizofrénicos si existen en nuestra d...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Cuantas cosas perdemos por miedo a perder Primera Parte
Mi padre es una prisión, mi madre un sistema, soy lo que ustedes me hicieron. Los miro y me digo: ustedes quieren matarme y yo ya estoy muerto. Toda mi vida estuve muerto.
Charles Manson.
...
La sangre de Marina salpicó a Samuel y Martín por ser los más cercanos, un charco del rojo líquido comenzó a expandirse por el suelo de madera de la cabaña, que a su vez comenzó a inundarse de se olor metálico que provocó una segunda ronda de vómitos de muchos.
─Salgamos de aquí─ dijo Dri reteniendo las lágrimas y a la ves las ganas de vomitar.
Todos estaban ya afuera.
Alma permanecía en shock, como la mayoría, y con razón.
─¿Por qué hizo eso Martín?─ inquirió Samuel con los ojos llorosos. Como si su novio tuviera la respuesta de lo que le pasaba a la chica por la cabeza
Manuel pidió que lo dejaran solo con ella. Una vez cerrada la puerta solo escucharon sus desgarradores gritos.
─¡Marina!.
Dri no lo soportó más y comenzó a llorar. Alma fue y la abrazó, para su sorpresa su hermana se lo permitió.
─Alma, no lo soporto más─ sollozó─ quiero morirme, ya no lo aguanto.
─Ey Dri, no digas eso ¿si?.
─Si continuamos negándolo será peor, ya aceptemos que no tenemos escapatoria, tarde o temprano ese asesino nos matará a todos.
Un incómodo silencio se apoderó del lugar, todos sabían, muy en el fondo que eso era cierto.
Alma la abrazó, no dijo nada más.
─Ey papá─ Gui se acercó.
─¿Si?.
─¿Tú sabías lo de Teresa?
─Claro que no, estoy tan sorprendido como tú.
─Lo que sorprende más es que lleves tantos años conviviendo con ella y jamás te hayas dado cuenta de algo raro.
─¿Estás dudando de mi Gui?.
─No, solo digo que es raro.
El desafío de ambos estaba claro en sus ojos, el lobo y su cría, al parecer el alumno no tardaría en superar al maestro, sino era que ya lo había hecho.
Teresa fue con su hija.
─Devi andartene da qui. (Tienes que irte de aquí).
─Non voglio tornare in quel posto. (No quiero volver a ese lugar).
