---Soy Liam Dunbar.
---Scott él es...
---No, él no es BlueEyes33 -dice muy bajito para que no nos oiga el profesor.
Entonces éste debe ser un chico que llegó el mismo día que el otro por coincidencia... No, nada de lo que pasa en este pueblo es casualidad. El chico nuevo me está viendo, pero no es la misma mirada de odio que sentí en mi cuarto la mañana de hoy. La mirada de este chico es atractiva, linda y tierna, pero yo conozco sobre el mundo sobrenatural desde que supe que Derek era hombre lobo, por eso es que siento que este nuevo compañero de clase no es ordinario, y tampoco tiene buenas intenciones.
---Bueno Liam, escoge un asiento -indica el profesor.
Conmigo no conmigo no conmigo no.
---Mira ahí, donde está Stiles hay uno vacío. -Gracias maestro.
El chico Liam viene, se aproxima, se sienta a mi lado. Puedo sentir su aura, no es humana, bueno sí se siente humana pero...
---Bueno como decía, durante el año de 1861 Abraham Lincon... -Empieza la clase.
Pasa rápido, pero algo incómodo. Suena el timbre.
---Vamos a comprar algo Scott -le digo a mi amigo ya con todas mis cosas en la mochila listo para salir lo más rápido posible del salón.
---Claro. -Scott se levanta y ambos ya estamos por salir del salón.
---¡Scott!
Mi amigo y yo volteamos rápido para ver quien a gritado el nombre de mi amigo.
---Perdón. -Ha sido Liam-. Quería sacarlos de onda para preguntarles algo.
Se está acercando a nosotros.
---¿Cuál es tu duda? -pregunta Scott y yo no quiero estar más tiempo cerca del chico nuevo.
---Bueno pues quería saber qué horarios tenemos. -Liam mira de un modo curioso a Scott, entre tierno, coqueto y curioso y maldad.
---Debieron dartelo en la dirección ¿No? -Parece que Scott tampoco tiene mucha confianza.
---Pues de hecho no, por eso es que les pregunto a ustedes ya que, bueno, si tengo dudas, los tendré más cerca en el salón. -¿Acaso piensa usarnos como sus secretarias?
---Bueno, te lo diré amigo. -Scott ha aceptado, no estoy de acuerdo pero tampoco hay que ser groseros, no sabemos si en realidad es un ente sobrenatural.
Pasa un rato y mi amigo ha terminado de decirle el horario y algunas otras cosas.
---Gracias. -Liam sonríe de manera amplia a Scott y mi amigo le devuelve el gesto. Yo pongo cara sería.
---De nada -dice Scott.
---Los veo en la próxima clase. -Liam tiene todas las clases con nosotros.
Scott y yo caminamos hacia la cafetería.
---¿Qué te pareció el chico nuevo? -pregunta mi amigo.
---Pues, me da desconfianza, no hay que hablarle tanto ---me sincero buscando mi dinero en todos lados de mi cuerpo.
---Me parece que es educado y lindo -declara Scott. Yo junto las cejas-. Pero no más que mi chico neoyorquino -Suspira-. Que por cierto ¿dónde está? Le llamaré.
Scott mira su celular mientras camina y yo lo hago de reversa.
---Entonces te decía que la maestra nueva me amenaza por cualquier mínima cosa que hago ---reclamo molesto.
---Ya sé -responde pero sigue viendo su celular.
---¡Scott! -Me he golpeado con alguien-. Oh perdón...
El chico que está frente a mí, el que he chocado es igual a la descripción de Scott, es...
---¡Isaac! -exclama mi amigo emocionado y lo abraza.
---Scott. -También está feliz de verlo.
---¡¿Isaac?! -exclamo después de cinco minutos de shock o eso me pareció.
---¡Stiles! -grita Isaac y suelta a Scott con cuidado y me abraza a mí. Mas yo no hago nada y dejo que me abrace.
---¿Cuánto tiempo? -pregunta con verdadera emoción de volver a verme.
----¿Se conocían? -interroga Scott y noto un sutil punto de celos en su mirada.
---Sí -digo yo bajito e Isaac me menequea.
---Nos conocimos hace casi un año, cuando Derek lo raptó para llevarlo a Nueva York, en ese entonces yo era ayudante de Derek, hasta que renuncié -explica sonriente Isaac.
Supongo que no les conté que después de ese viaje a Nueva York no supe nada más de Isaac hasta ahora. Y eso porque ya sospechaba que era la persona de la que hablaba Scott, sólo que me pareció un poco demasiado imposible pero...
---¡Pero que pequeño es el mundo! -exclama emocionado Scott.
---¿Saben que es la mejor parte de esto? -susurra Isaac enredando a mí y amigo cada quién con un brazo-. Que me mudé a Beacon Hills -sisea con mucha maldad y lo siento de nuevo, la aura oscura, el miedo, la desesperación, el odio, el poder-. Y ahora estoy en esta escuela inscrito también desde hoy. -Su tono de voz vuelve a ser normal.
---¿Y en qué salón te toca? -pregunto nervioso.
---Pues en mismo que el de ustedes. -¡Diablos!
---Bueno Isaac, tengo que ir a comprar algo antes de que el... -El timbre suena-. Mejor voy antes de que me cierren la puerta del salón.
---Te acompaño -dice Scott.
---Espera. -Isaac lo detiene, lo ve a los ojos, le susurra algo al oído, le mira el cabello con cariño, me mira, sigue susurrando, por fin lo suelta. Sonríe.
---Te espero en el salón -grita Isaac y Scott y yo caminamos hacia la cafetería.
---¿Notaste que cuando dijo que se había mudado al pueblo su voz cambio? Incluso se hizo más grave -le informo y acelero el paso.
---No... -Suspira de nuevo-. Sigue igual de hermoso que simpre. -Parece que lo han idiotizado. Sólo falta que tenga corazones en ves de ojos.
Estamos en las filas de la cafetería pero, no avanza. Mejor regreso.
---Vámonos Scott -le digo y le golpeo el brazo con suavidad.
Caminamos rápido, la puerta del salón está al final del pasillo. Scott y yo corremos. Yo saco mi trabajo final, está hecho con la mejor perfección del mundo, para convencer a la maestra que no soy un inútil como yo creo que piensa ella.
De pronto Liam Dunbar se estampa contra mí, veo su yoghurt de fresa volar en el aire y embarrar mi trabajo final que me partí en hacer. Caigo al suelo y mi trabajo cae al suelo literal se oye como lo que es, asqueroso papel mojado contra el piso. Siento la ira, el desasosiego, irritación, odio.
---¡¿Eres idiota Dunbar?! -reclamo y me levanto con violencia y raudez.
---Perdón no fue a propósito. No quería...
---¡Cállate idiota! -Lo empujo hacia atrás con demasiada rudeza y coraje, se resbala con el yoghurt, cae al suelo de forma muy estrepitosa y dolorosa.
Se ve bastante dolido. Algo se rompe en mi interior, es arrepentimiento pero también siento una columna de triunfo me siento asqueroso, orgulloso y poderoso.
---Maestra Jennifer, lo siento, tenía el trabajo ya hecho, pero llegó este fulano, por favor deme otro poco de tiempo para volver a entregarlo... -Casi tirándome de rodillas frente a ella.
---No Stiles, dejé claro que era para hoy, mira que asco de trabajo. -Toma mi trabajo empapado de yoghurt y con las manos lo rompe a la mitad, lo lanza al suelo de nuevo-. Y será mejor que te pongas a limpiar ese yoghurt y le pidas una disculpa a tu compañero Liam.
---Pero, pero el yoghurt era de él y además él fue el que me chocó, ¡es su culpa no mía! -La voz se me iba y el aire también.
---Ahora. O te bajaré dos puntos de tu calificación final. -Su voz suena amenazante.
---¡No puede hacer eso! -exclamo y agito los brazos.
---Claro que puedo porque soy tu maestra y tutora y tengo el poder y tú no. -Se gira llena de orgullo. Se pone en frente del pizarrón a escribir-. ¿Qué esperas?
---Ya voy, perdón Liam. -No lo puedo creer.
---Está bien Stiles. -Se oye sincero. Me abraza. Siento su aura, no se siente humana, es como madera húmeda incluso, huele a... ¿bosque?
Lo suelto y camino raudo. Estoy enojado, maldito nuevo. Además Isaac que tiene que hacer aquí hoy. De todas maneras, iba a reprobar esta materia.
Al final del pasillo viene sola Malia. Con sus libros contra su pecho sujetado por sus brazos. Se ve normal. Nadie más le hace caso. Algo así como yo hace dos años.
---Hola Stiles -dice con timidez.
---Hola Malia -respondo.
---¿Cómo estás? -pregunta y se apena.
---¡Estoy mal! ¡¿De acuerdo?! -exploto y otra vez tengo esa sensación de su suciedad y poderío.
---Oye pero... -Se ve lastimada.
---¿Podrías dejarme solo? -pregunto apretando los dientes mucho.
Ella quiere decir algo , pero no lo hace y se aleja demasiado veloz.
Con mi mechudo limpio ese desastre del suelo frente a todos, unos se ríen de mí y otros me miran con mucha lástima, no sé que es peor.
Pero Isaac está adentro del salón y está sentado donde estaba Liam y éste donde estaba yo, está haciendose amigo de mis amigos y también de algunos del grupo que se acercan curiosos para ver a los nuevos compañeros.
Termina la escuela. Me dirijo a casa. Enojado por lo que pasó en la mañana. Abro la puerta de mi Jeep y entro a la casa. Hago mi camino a la sala y dejo mis cosas ahí. Y voy a la cocina a hacerme unos huevos. Durante el proceso me acuerdo de Derek... Ya sé no tiene nada que ver, pero me recuerda a los desayunos "Estilo Derek" donde los huevos eran lo único que sabía hacer a la perfección, le quedaban exquisitos, lo cual sería imposible dado que es un platillo muy simple.
Mi celular suena, veloz llego a la sala, busco en mi mochila mi teléfono, lo tomo y contesto.
---Hola ¡Stiles al mando!
---...
Se oye una respiración forzada, tenebrosa, siento la casa sumirse en la oscuridad, incluso se ve todo un poco más oscuro. Han colgado. Y la luz está volviendo a mi hogar y siento la necesidad de salir a ver a la calle sólo por si hay alguien. Tocan a la puerta... Tengo un poco de miedo, supongo que es mi instinto de protección y detección del peligro. Camino otra vez más lento hacia la puerta. Tocan la puerta más fuerte, más bien la golpean con rudeza. Mis piernas tiemblan un poco demasiado. Mis manos sudan. Toco el picaporte, puedo oír una respiración impaciente del otro lado, ansiosa. Abro la puerta rápido.
---¡¡AAA!! -grito con todo el aire que tengo.
---¡¡AAA!! -grita también el, cartero...
---¡Es usted! -exclamo agarradome el pecho apenas recuperando el aliento. Me sostengo del marco de la puerta.
---¡Sí adolescente loco! -Se nota que el cartero también se espantó.
---¿Y a qué vino? -pregunto ya más tranquilo.
---Te llegó esta carta. -Me entrega el documento en las manos.
---Gracias. -Cierro la puerta pues el cartero camina hacia su moto.
Veo la carta de sobre blanco con un sello rojo con las letras "H" esto & y mi "S". Saco la hoja del sobre y noto que tiene un rastro de su aroma.
Yo llego hasta la sala y me paro junto a un sillón al mismo tiempo que leo la carta. Dice:
---Hace días no sé de ti, es que el trabajo me ha tenido muy ocupado, y aunque bien pude haber llamado a tu celular el día de hoy, no quise porque se me ocurrió algo muy genial. Enviarte cartas cada inicio de semana y cada fin. Porque es más especial que recibas cosas de mi puño y letra especialmente para ti con todo mi cariño y amor. Bueno pues antes de irme mande a arreglar el loft, porque así, ya ves que estaba destruido por lo que pasó... Pero ahora tiene un toque elegante y lo diseñé yo, notarás que tiene muchos efectos visuales, bueno cuando vengas lo verás. Y te extraño mucho... toda la semana pensé tantas cosas para ti que escribiría en esta carta pero ahora no se me ocurre nada *Risa nerviosa* y quiero abrazarte y besarte y decirte cosas al oído, mi corazón puede llegar a acostumbrarse, pero mi alma no. Y espero tú estés bien, socializa, sal con tus amigos, diviértete, come bien, no te mal pases, haz tu tarea, cepilla tus dientes, bañate diario, no sé que más decir... No abandones tus sentimientos por mí. Mejor cortaré aquí antes empezar a llorar. *Risa nerviosa otra vez*
♥ Te ama por siempre, Derek Hale.
Agarro la carta contra mi pecho, con cuidado para no arrugar el papel, una lágrima se sale por mi ojo sin mi permiso y vienen otras más. Me dejo caer al suelo, deslizando mi cuerpo contra la pared.
---Te extraño Derek... ¡Te amo...!
No lo puedo controlar a pesar de que me he mantenido fuerte por varios días, una persona como yo no aguanta tanto, ya es hora de desahogarme.
Ha pasado un rato y ya me siento con más ánimos, estoy sentado en el sillón, viendo la televisión. Cuando una vez más llaman a la puerta.
Me acerco, esta vez sin miedo alguno.
Abro la puerta esperando que sea el cartero de nuevo, pero ahora hay algo en el suelo de mi pórtico. Rosas negras. Con una etiqueta que dice: Para Stiles Stilinski. De parte de Lo desconocido.
Por puro instinto pateo las rosas muy lejos de mí.
Cierro la puerta y me aterra saber que alguien que me acosa y que pueda atreverse a tocar la puerta y dejar algo. Y sólo ahora es tocar, ¿qué hará después? Debo de tener mucho cuidado de ahora de en adelante, tener los ojos abiertos ante cualquier amenaza. Derek no está aquí para protegerme, así que debo protegerme yo solo.
》 》 》
Han pasado varios días desde esa carta y yo aun pienso que escribir en la mía. Aparte desde que Liam e Isaac se han vuelto los más populares del salón y que no decir del grado también, se han vuelto inseparables, pero no sólo ha sido eso, me han sustituido en mi grupo social, me han alejado de Scott con discreción pero con efectividad. La única carta de Derek que tengo es la quese me ha mantenido en pie de eso y de la maestra Jennifer Blake, esa maestra la trae contra mí. Y lo peor es que en los últimos días todos parecen darle la razón. Es como si todo mundo se hubiera puesto de acuerdo para darme la espalda.
Pero me he portado de manera correcta ante todo esto, y también ya platico más con mi padre y he estado más con él.
Camino hacia mi salón, y me acuerdo de lo que le dije a Malia, debo admitir que la he ignorado varias veces antes de eso, y ahora después de lo ocurrido no me ha vuelto a hablar. Es más, ha desaparecido por completo, mas no la he visto desde hace varios... ¡O por dios! ¡¿qué es eso?!
Malia viene caminado con ¡¿Jackson?! y los dos se ven como, literal, son estrellas. Malia está muy cambiada, tiene unos lentes de micas color sepia oscuro, cabello castaño brillante ondulado, una falda algo corta estilo colegial, chaqueta de cuero negra, zapatos negros, calcetas blancas cerca de la rodilla.
Jackson se ve incluso más alto, ya no se ve como la última vez que lo vi, delgado, enfermo y vomitando negro. Se ve con mucho más músculos que antes, además tiene unos lentes negros puestos. Pantalón negro ajustado, tenis azules con estilo, camisa abierta con las mangas arremangadas hasta los codos.
Ambos poseen remeras blancas que dice en letras grandes y negras: Nunca serás como yo. Se verían ridículas en otras personas pero en ellos se ven espectaculares y don lógica.
Ambos se ven tan radiantes que son demasiado atractivos para ser reales.
Y de los pasillos de rededor se une Liam desde la izquierda a lado de Jackson e Isaac desde la derecha de lado de Malia.
Se acercan a mí. Mis piernas tiemblan. Tengo nervios de que estas personas se acercan a mí. De seguro me veré como una insignificancia cerca de ellos.
---Miren a Don Nadie -ríe Malia y su voz no suena tan igual como antes.
Los demás la acompañan en su satisfacción.
---¿Qué haces Stiles? -Pone la punta de su dedo en mi hombro, camina alrededor de mi, me mira escrutadoramente de pies a cabeza. Desborda sensualidad, y peligro.
---¿Qué te pasó Malia? -pregunto con la voz más dura que tengo ocultando así mi miedo.
---Antes no me querías porque no era lo suficiente atractiva para ti, pero lo que nadie conoce me ha cambiado, ahora soy una belleza para ellos y para todos. -Malia susurra mi oreja y muerde lo lóbulo de una manera que Derek no ha hecho nunca, pero se siente demasiado bien-. Te gusta lo que hago ¿no?
Lo que me hace pensar es que si Derek está lejos, todo el mundo se aprovecha para abusar de mí en diferentes formas.
---Tú decides Stiles, puedes hacerte uno de nosotros, o puedes seguir siendo del ganado -dice Jackson y aun no puedo creer que él esté aquí.
Isaac me está viendo a la cara, con una ceja alzada y los labios apretados.
Tal vez tengan razón, con Derek me va bien, pero cuando se va, sólo soy otra persona más que no importa.
Me hacen recordar que mi popularidad de hace mucho (cuando Derek regresó a Beacon Hills) ha desparecido. Tal vez la quiera de vuelta. Si pudieran mirar a los demás se darían cuenta como admiran a estas personas. Pero pienso en Derek y me doy cuenta, que él me quiere como soy, y si me quiere así, entonces no debo cambiar quien soy.
---No gracias, yo, soy feliz como soy. -Supongo que he sido sincero. Con las manos tomo los tirantes de mi mochila, me giro y camino.
---¿Estás seguro? ¿Enserio eres feliz? -pregunta Jackson-. Por qué ser adorado por una persona cuando puedes ser adorado por todos.
No sé que responder. Sus argumentos suenan sólidos en mi cabeza. Tal vez sólo es mi nerviosismo.
---Piénsalo Stiles -dice Malia a la distancia y yo sigo caminado lejos.
Y de pronto, siento personas correr atrás de mí.
Volteo y veo a los jugadores del equipo de lacrosee corriendo hacia mí.
Está pasando rápido. Siento sus duros hombros en los míos. Las cosas que tenía en mis manos vuelan al viento al igual que yo. Me giran en el aire. Mi pecho es lo primero que se impacta con el suelo. Lo siento, el dolor en mi cuerpo, y sin embargo a todos los que me rodean les parece divertido.
---¡Stiles! -Isaac se acerca a mí, a toda velocidad. Me gira y pone su mano en mi frente, y me mira a los ojos. Sus ojos azules se ponen unos instantes más bellos y me refiero a que hay algo que me hipnotiza, no puedo dejar de verlos e incluso parece que se vuelven más brillantes y más nítidos-. ¿Estás bien?
---Sí -respondo aún aturdido por su mirada entorpecedora.
---Sólo déjame levantarte. -Me ayuda a levantarme del suelo.
Me siento un poco demasiado mareado y con dolor de cabeza.
---Gracias -digo en voz baja y caminó fuera de la escuela.
En mi Jeep ya, conduzco hasta mi casa.
Está lloviendo de pronto. Pienso en Derek otra vez en lo que va del día. Me gusta hacerlo. Recordar su cabello negro. Sus tupidas cejas. Su sonrisa acompañada de sus dientes peculiares y limpios. Sus ojos y miradas. Sus brazos fuertes y protectores. Sus manos. Su piel suave y ligeramente morena. Sus detalles. Su aroma personal. Sus caricias. Sus tiernos besos, siempre lentos, con cariño, con amor...
Todavía recuerdo el día que Derek y yo le dijimos a mi padre sobre de que somos novios. Tenía mucho miedo y mis manos sudaban. Mi estómago se volvió loco. ¡Mis pierna! No las podía controlar, temblaban a nueve grados Richter. Al principio pensé cosa terribles que podrían pasar pero... No fue así, gracias al cielo.
Abro la puerta de la casa y veo a mi padre parado cerca de donde estoy con la cabeza agachada.
---¿Papá...? -Cierro la puerta con cuidado.
---Debemos hablar. -Su tono de voz es demasiado, misterioso.
---¿De qué? -Esto no se siente bien.
---Eres Homosexual, cuando me enteré, quería golpearte, y gritarte. -Sigue con la cabeza hacia abajo, con los hombros subiendo de arriba a abajo-. Yo pensé que mi hijo sería como los demás chicos, que tendría una novia. Pero llegas y Derek Hale es tu novio. Repugnante. Me daba asco verlos juntos. Pero ya no aguanto más esto -Se rie, tengo terror. Este no es mi padre. Es. Es. No...-. Quiero que lo cortes - Su tono de voz cada vez se oye mas agresivo-. ¡Quiero que seas normal! O si no... ¡¡Largate de mi casa!! -Levanta la cara, tienen una ojeras terribles-. ¡¡Largate de mi casa!! ¡¡Demonio!!
No puedo mover mis piernas. Están hechas de mármol. Mi sistema respiratorio queda inservible. Mi cuerpo tiene espasmos de pánico. Mis ojos están muy abiertos. De alguna manera mi espalda choca contra la puerta. Quiero gritar y correr porque él viene hacia mí. Derek...
---¡¡Largate de mi casa!! -Está apretando mi cuello.Nota de Autor: Hola feliz Martes(Mi segundo día favorito). Espero y les haya gustado este capítulo. Ahora si van a encontrar los horarios para los próximos capítulos y comenten.
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Toda Una Vida
FanfictionEn un universo alterno de Teen Wolf, Stiles conoce a Cora la hermana del siempre serio y gruñón Derek Hale, cuando sólo tenían cuatro años de edad. La madre de Stiles muere un año después, entonces este niño con la necesidad de nunca callarse tiene...