Reyes del golf (parte dos)

4K 348 3
                                    

---Se hace así ---él tomó mis manos con las suyas y con ellas el palo. El tiempo se sentía que iba lento. Cerré los ojos y mi respiración era agitada. Cuqndo el silencio se quebró. El gemido conmovido de Isaac ante la escena, El silbido del aire, El canto de los pájaros,  El poco pero salvaje ruido del tránsito, La respiración un poco irregular de Derek en mi oreja y mi propia voz que rezaba "Vive el momento" en pelea con otra que gritaba ahogadamente desesperada "No vuelvas a caer en sus sucias trampas" todo eso en conjunto fue subiendo sus desibeles con tropezones airados hasta que todo se hizo una mezcla inentendible que enconaba mis sentidos y terminé casi gritando ---Alto al ruido---. Mi sentido de alarma  se sintió golpeado y actúe desesperado empujando a Derek hacia atrás con mis codos.
---¿Ruido? ---habló Isaac interrogante. En realidad todo estaba en paz y yo exageraba.
---¿Qué pasa Stiles? ---me preguntaba Derek aún más confundido que Isaac.
---Nada, puedo hacerlo sólo ---El oxígeno abandono mi cuerpo con tan solo decir esa oración---. No, espera, mejor primero veré que tu lo hagas, para aprender.
---Yo te estaba enseñando cómo.
---No, mejor quiero ver como se hace.
---Bueno ---yo me alejé para poder verlo mejor, Entonces él tomó una posición que se veía bastante profesional, la boina le tapaba el rostro, entonces Derek levantó la cabeza mostrando su cara, el blanco de su ropa brilló con el sol y sus ojos también, sonrió---. Observa y aprende ---entonces atropelló la pelota con el palo y la pequeña pero imperfecta esfera se fue aún más desviada que la mía, yo obviamente comencé a carcajear.
---Wow ahora ya puedo fallecer feliz después de ver el tiro más profesional que he visto en toda mi vida ---aplaudí muy fuerte y creo que Isaac reía conmigo.
---Yo le dije que no usara el Driver  ---habló Isaac.
---Creí que ya sabías jugar golf ---me burlé una vez más.
---Tampoco soy el mejor jugador, no soy novato pero tampoco soy profesional. De acuerdo dame el madera 5, Isaac ---entonces el chico le pasó otro palo,  y le devolvió el palo de madera que tenía---. Ahora si verás como se hace  ---me avisó. Se aproximó  y puso una pelota de nuevo en el... en el... ¡En el Tee! Ya me acordé. Le pegó y esta vez hizo hoyo en uno. Bueno además esta es la parte inicial así que fue más fácil que lo lograra. Estábamos muy cerca del mendigo hoyito.
---Eso se ve fácil ---le dije cogí mi palo estándar, Derek yuxtapuso otra pelota en el tee y yo imité su posición, al golpear la pelota sólo llegó a la mitad del camino.
---Uy que fácil ---se burló Derek de mí.
---Soy principiante déjame.
---Principiante de amor.
---Ay si tú, como si ya hubieras pasado por... ---me detuve antes de continuar al recordar de que su novia más amada había dado el último suspiro en sus  brazos y que el día que iba a contraer matrimonio con Kate pues pasó literalmente una masacre.
---Sí, bueno, sigamos jugando ---habló serio.
---Lo siento no quería...
---Esta bien,  no te preocupes ---recogió el tee del campo y caminó en dirección hacia el pasillo.
---¿Ya nos vamos? ---pregunté.
---No, voy por las llaves para los carritos de golf, las olvidé y debemos ir más lejos ---explicó fingiendo una sonrisa, caminó y se adentró por el pasillo por donde habíamos salido.
---Ay Isaac ahora ya me siento culpable.
---Mmm y ¿qué quieras que diga? ---me cuestionó sin sonar grosero.
---Yo que sé, dame un consejo.
---Sólo no te tardes mucho.
---¿Tardarme en qué?
---Ya lo entenderás. Derek me llama ahora vuelvo ---Isaac extrajo un aparato extraño del bolsillo de sus vaqueros, parecía un celular, pero era claro que no era esa clase de artículo.
Isaac se fue y después de un rato, regresó con Derek, cada quién en un carrito de golf.
---Stiles súbete en el que trae Isaac y él irá por otro y nos alcanzará ---dijo Derek.
---Bueno ---me subí por primera vez a un carrito de golf y Derek me explicó que era lo mismo que manejar un auto,  poco a poco le agarré la onda y fuimos a una velocidad aceptable hasta llegar a la parte que Derek quería. Después llegó Isaac y una hora más tarde de que Derek me ganará en todas las rondas  y tuviera ese lenguaje todo raro de pasame el madera 5, el hierro 8, el sand wedge, y el putter, yo determiné que era momento de sentarme aunque sea en la amoldable y seguramente cómoda trampa de arena. Así que aquí va Stiles a sentarse en la trampa de arena.
---Uy está caliente ---dije yo.
---¿Entonces querías sentir algo caliente en tu trasero? debiste decirme primero para... ---empezó a parlotear Derek en frente de mí creando sombra.
---Cállate no termines esa oración ---exclamé rápido sabiendo a donde quería llegar Derek---. Además ya me aburrí, el minigolf es más fácil y más divertido.
---¿Quieres hacer algo divertido? ---Derek e Isaac se miraron como si fueran los criminales más pillos del viejo oeste.
》      》      》
---¿Bien participantes ya tienen todo bien colocado? ---preguntó Isaac.
---Sí ---exclamamos Derek y yo al unísono, ya tenía puestos mis guantes de cocina super gruesos y mis rodilleras.
---Explicaré las reglas una vez más ---decía Isaac a la derecha de nosotros---. Los participantes tiene que buscar las llaves en estos montones de paja, después pasan a la mesa donde tiene que acabarse todos  los trece Hot Dogs y un vaso de agua, una vez hayan terminado eso correrán hasta los carrito carrito de golf y atravesarán de extremo a extremo del campo hasta llegar a el  pasillo trasero de la recepción, cuando lleguen tienen que ponerse unos patines, y tendrán que patinar por todo el pasillo hasta que lleguen a la meta donde yo los estaré esperando. Todo esto en menos de veinte minutos. A la cuenta de cinco. Uno, dos, tres...
Los nervios me ganaron y me lancé hacia el montón de paja buscando mi llave.
---Cuatro, cinco ---Acabó de decir Isaac pero Derek también también ya estaba buscando su llave. ---Nos pos nos
Yo buscaba por cada pedacito de paja que recogía, pero no veía nada, entonces Derek gritó. ---¡La he encontrado!
---Demonios ---exclamé. Quién encuentra tan rápido unas llaves en un pajar, eso no es de dios. Pero por gracia de Dios de pronto vi mis llaves justo cuando Derek ya estaba comiendo dos Hot Dogs. Rápidamente con mis manos dentro de los guantes, me metí dos Hot Dogs en la boca así de tajo, o al menos sólo se metieron la mitad de cada uno, pero yo podía. Nunca había comido como loco de esa manera a pero sí,  ya llevaba cinco, pero él ya iba a por los nueve, tenía que darme prisa, entrecerré los ojos, y mastiqué  como si fuera un cascanueces robot muy veloz. Derek se acabó sus trece Hot Dogs y su vaso de agua, se levantó de la silla y por alguna razón él torpe a cayó al suelo de cara, él se quedó ahí, yo me quedé estático como una estatua de piedra con las mitad de mi último Hot Dog en la boca. Tonto acabate ese Hot Dog ahora. Cuando me levanté, me lancé el vaso de agua en la cara y corrí dejando a Derek atrás el cual apenas se levantaba del suelo. Encendí el carrito y aceleré como el infierno, pero Derek ya me alcanzaba, y por alguna razón había una pera en mi carrito. Agarré la pera sin dejar de conducir a toda velocidad.
---Vas perder ---gritó él, a la izquierda de mí---. Y tendrás una cita conmigo.
---Sobre mí peraver ---por alguna razón se me enredaron dos palabras, Derek hizo cara de confusión y yo como pude lancé la pera en su cabeza.
---Auch eso dolió ---exclamó él agarrando su cabeza con una mano.  Yo me reí al ver que  tenía la mitad de la pera embarrada en el cabello. Y también tenía la cara llena de pasto y tierra al igual que su eximpecable ropa blanca. Vaya que había caído fuerte al suelo hace rato. El resto de la pera se había quedado en su carrito, en el momento que él la vio como pudo la tomó con su mano derecha y me lanzó en mi mano izquierda. Ambos teníamos una mano en el volante,  yo sacudía mi mano izquierda del dolor y al mismo tiempo tratando de quitar el jugo de fruta de ella y él  tenía su mano derecha quitando los restos de pera de su cabeza. Nuestros carritos flotaron un momento en el aire  al pasar por una duna a toda velocidad y yo también floté, me aferré con las dos manos al volante. El carrito cayó del golpe en el suelo, y yo me golpeé el trasero con el asiento al mismo tiempo que veía como Derek  también se mordía el labio inferior y su carrito empezaba a volcarse pero Derek se empujó a sí mismo hacia el lado derecho y logró poner las cuatro ruedas del carrito en el campo de nuevo. ¿Cuánta fuerza se necesita para eso? Yo ya me habría volcado. Ya veía el maldito túnel cerca y a Isaac llegando a él, cuando se bajó, corrió hacia adentro. El acelerador estaba a todo lo que daba, dejé a Derek atrás pero una vez más sentí que debía bajarme y correr como un maníaco, hasta la linea de meta, y por muy tonto que parezca eso hice, detuve el coche y me bajé,  corrí sin mirar atrás, y sentí el aire que causó el carrito de Derek al pasar a un lado de mí y moverme la ropa ---¡Ya perdiste! ---gritó él. De todas maneras sólo me faltaban diez metros los cuales completé en un santiamén, entonces vi que Derek se estaba quitando unos patines.
---Eso son tuyos me dijo, me apretaban demasiado ---eran unos patines de linea, apenas se acaba de quitar el primero al desamarrar el fuerte nudo que le había hecho.
---Que tonto ---me reí y tomé sus patines, bueno los que le tocaban a él.
---Oye ¿Qué haces? ---me preguntó desde el suelo.
---Me pongo tus patines  ---dije cuando por fin los tenía puestos. Ambos estábamos en la entrada del pasillo de cristal y suelo de mármol. Era mi cuarta vez en patines, la primera vez no caí al usarlos ninguna vez así que esta tampoco estaba saliendo tan mal. Yo patinaba  por el pasillo, me daba cuenta que entre más abría las piernas más rápido iba, Derek se adelantó a mí, riendo volteando a verme mientras me rebasaba. Ya casi llegábamos a la línea de meta cuando lo quise empujar, yo ya estaba a su derecha lo empujé pero él es varias veces más pesado que yo, así que me empujé mí mismo, perdí el equilibrio, los patines me quedaban grandes y mi pie se fue como de lado, estaba a punto de caer, cuando Derek me jaló de un brazo y me atrajo hacia su cuerpo, a él se le enredaron los pies y ambos atravesamos la linea de meta cayendo al suelo.

Él aún me sujetaba de los brazos, y yo tenía mis manos en su pecho.
Él estaba abajo de mí, y yo sobre él.
Él miraba mis labios, y yo miraba sus ojos.
Ambos respiramos el mismo aire.
---¿Por qué tenía que ser encima de ti? ---me quejé sin sonar grosero.
---Así es el destino... ---dijo él esta vez viendo a mis ojos, perforando mi estómago.
---Maldito destino ---escondí mi rostro en su cuello y me bajé de él, por lo tanto quedamos bifurcados. Ahora estaba a su lado, ambos mirando el cielorazo del pasillo. Hasta que después habló Isaac y me di cuenta de lo absurdo que había sido el momento al final de cuentas nadie había ganado, los dos atravesamos al mismo tiempo. Bueno talvez él la atravesó primero pero éramos como un solo cuerpo, no piensen mal.
---Te gané ---dijo Derek viéndome a la cara, pero yo veía el techo.
---No nadie ganó esta vez.
---Yo atravesé primero.
---Lamento decir que no entró en tiempo, aunque Derek hubiera entrado primero no gana ---explicó Isaac parado atrás de nuestras cabezas.
---Me parece que no tendrás una cita conmigo ---le presumí.
---Claro que sí, porque gané el otro juego ---frunció el seño.
---Bueno pero tendrás que comprarme algo.
---Claro.
---Necesito que me compres un pase que me excluya de esa cita.
Me reí de su expresión y me levanté del suelo. Derek se levantó atrás de mí sacudiendo su ropa de la tierra y el pasto que se le había embarrado en la vestimenta. Se rascó la nuca levantando su brazo dejando ver un músculo grande. Tenía tierra en la mejilla. Por cierto su boina se había extraviado desde que nos lanzamos en los montones de paja.
---¿Por qué  esto se me hace sexy? ---dije entre mí---. Stiles ya cállate ---hablé en voz alta mientras los otros dos me desoían.
---Bueno es hora de cenar pues ya es de noche ---dijo Derek conduciendo la voz hacia a mi.
Cena. Derek. En la noche. Esto no me agrada.

Nota de Autor: Hasta el viernes que nos leamos y ta subí el primer capítulo del minifanfic Te conocí en esa fiesta.

Toda Una VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora