Toda Una Vida

El amor nunca se sintió tan bien

Sirenas alumbran mi cara. Rojo y azul se turnan para hacerlo. Estoy en estado de shock. Otra vez. Parrish está delante de mí. Con una cara de terror. Tengo sangre en mis manos. Se oyen gritos adentro de mi casa. El día se agota, muy lento. Personas sacan el cuerpo de mi padre de nuestro hogar. Lo meten en la camioneta/ambulancia. Veo como lo hacen. No tengo familia. Estoy solo.
---Te llevaré a la comisaría. Y me contarás como estuvo todo. ¿De acuerdo? -pregunta Parrish.
---Sí -acepto con un hilo de voz. Casi no audible. Mi mirada está fija en la camioneta donde se llevan a mi padre. Mis ojos arden.
---Ven. -Me levanto y me meto en la patrulla.
Llegamos ahí. En silencio entro.
---Stiles ¿quieres que llamemos a alguien? ¿a Derek? -interroga tímido el ayudante de mi padre.
Derek... ¿Por qué ha mencionado a Derek?
---No llames a nadie. Así estoy bien.
En mis recuerdos sólo pienso en la pasó después de que me atraparan en el loft de Derek.
Estaba en mi habitación, con las manos amarrados por cuerdas y mi boca tenía un trapo metido en mis labios.Y mi frente sudaba y empecé a gemir para pedir ayuda pero sólo salían de mi boca bufidos. Entonces llegó mi padre. Con una mirada perdida en la locura. Me daba miedo. Se acercó mucho a mi, olía raro. A infección, a miel. No lo sé.
---Tú mataste a tu madre... -susurro muy cerca de mi cara.
Yo gemí negando con la cabeza, porque sus palabras me lastimaban más que antes. Grité alto, tanto que creí podía romper vidrios. Pero mi padre gruñó más fuerte.
---¡Tú la mataste! ¡Tú la mataste! ¡Y ahora te mataré a ti aberración! -Su saliva salpicó muy cara.
Sé imaginan que un día, tus amigos te rechacen. Tu mejor amigo quiera abusar de ti. Y tú padre te quiera matar. Se siente horrible. Muchas agujas perforan tus pulmones una y otra vez hasta que se deshacen.
Pero ya no quiero esos recuerdos. No ahora.
---Stiles, puedes dar tu testimonio ahora -decía Parrish con la voz muy baja como si con su voz normal fuera a romperme.
---Parrish... Adiós... -Me levanto algo lento de la silla. Camino más rápido hacia la puerta.
---¡Espera! -grita y viene por mí.
Me giro de manera violenta.
---¡No voy a volver! -grito y mis lágrimas son visibles otra vez.
Él se acerca mucho que mí.
---Tú sabes a dónde voy. Y no quiero que se lo digas a nadie. Si en verdad eras amigo de mi padre. Mantén mi ubicación en secreto. Prometelo -exigo en voz muy alta y dolida.
Parrish, un tal vez no tan viejo amigo de mi padre, pero gran sujeto. Se había ganado nuestra confianza. Y ahora me abrazaba.
---Lo prometo. Y... lamento tu pérdida. Nuestra pérdida -dice también con dolor.
Entonces es posible que Parrish sintiera algo más por mi padre. No lo creo, no lo sé.
En el loft otra vez metiendo cosas rápido. Muy desesperado quiero escapar ya. Quiero abandonar este sitio. Aunque sea de Derek este loft.
Estando al pendiente de cada movimiento a mi alrededor. No quiero que nadie se atreva a ponerme un dedo encima de nuevo con la intención de lastimarme.
Pienso en los recuerdos de mi padre y mi madre y yo. Donde no tenía miedo a mi corta edad. Los tres en el parque. Yo siendo perseguido por mis padres, yo huyendo. Los tres riendo, con amor, no con miedo. Y ahora todo se había disuelto, y solo tenía ese recuerdo de mi infancia.
Por un momento me acuerdo de la llamada que tuve con Derek, mi segunda y última llamada con él desde que se fue. Le había informado sobre algo atrás de mi foto con él. Antes de mencionarlo, disfrute de su risa, de su pena al decir que cuando él tenía quince quería esa foto con cariño. Pero ahora la adora. Entonces le mandé por mi celular una foto de la parte trasera de ésta. Pregunté si sabía que era, pues las letras estaban escritas con símbolos extraños. Y él me dijo que lo iba a investigar bien y después me avisaría. Fue una llamada emotiva pero no quiero distraerme mucho en recordar eso, igual y me podría pasar lo de Hush Hush donde atacan a la chica en el auto de su amiga.
Por fortuna todo el camino estuvo tranquilo. Al llegar al aeropuerto, hay muchas personas y me siento tranquilo de nuevo. Aunque sigo vigilando. Compro mi boleto de avión para la ciudad a donde voy. Abandonaré California y no volveré.
Después de esperar un buen rato y hacer todas las cosas necesarias para el viaje. He subido al avión, sentado alrededor de muchas personas pues no pude ahorrar mucho dinero para otra clase de lugares pero no importa, de alguna manera siento que estar en medio de muchas personas nadie puede hacerme daño sin que los otros se den cuenta. Aunque intento pensar en que "lo desnococido" no puede estrellar un avión. Bueno, si puede creo.
Pienso... en Derek. Ese nombre tan sexy y tan de él. Con su hermosa actitud de macho alfa gruñón y enojón, pero al mismo tiempo cariñoso. Tan varonil, pero a veces también dócil.
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P.O.V. Derek.
---Entonces esto es lo que escribió mamá en la foto. Creo... que tiene mucho sentido ahora... Aun así no veo en que me puede convenir.
Estoy en mi oficina en mi edificio en Nueva York. Stiles me ha mandado una foto de algo que encontró detrás de ésta. Entonces había dejado un poco la investigación al darme cuenta de que no iba conseguir mucha información sobre esos símbolos extraños. Pero hoy en la mañana mientras espiaba a los hipopótamos del zoológico de Central Park desde mi oficina con mis binoculares, y de paso también veía a una familia estar en esa zona, me di cuenta de algo. La frase estaba formada por diferentes lenguas y formas de lenguaje. Fue algo difícil de descubrir pero por fin tengo el significado y se lo podré decir a Stiles.
Stiles ese chico que amo. La mayoría de la gente ve a alguien como yo, y piensa: "Ese muchacho de ser un casanova" "Debe haber tenido muchas novias en su adolescencia". Cosas por ese estilo, pero en realidad me gusta un chico, un inusual chico de nombre extraño pero autoapodado Stiles. Supongo que es una verdad diferente a la que todos piensan sobre mí. Una vez una chica me tiró la onda, al final tuve que decirle con quién estaba en realidad, y se enojó y decía que ella era mejor en todos los sentidos. Entonces me indignó eso y me fui, pero si hubiera podido decirle por qué es que amo a Stiles, se lo habría dicho.
Y amo a ese chico porque sus ojos son de un color predominante en la tierra pero con un toque especial. Lo amo porque es diferente a los demás. Lo amo porque cuando intenta hacerme detalles como los que yo le hago le sale mal y siempre lo descubro. Lo amo porque me gusta la manera en la que se ríe y hace la cabeza hacia atrás. Lo amo porque es lindo verlo ponerse rojito de pena cuando lo atrapo haciendo ejercicio para tener un cuerpo como el mío. Lo amo por su dulce olor. Lo amo porque siempre parece estar feliz incluso cuando su mente esta pérdida en la tristeza. Lo amo porque siempre se ve guapo, no importa cuál sea su estilo. Lo amo porque sé que nunca sería capaz de besar a alguien más que a mí. Y claro que me gusta todo su cuerpo. Me estremezco al pensar en sus dedos recorriendo mi piel. Quisiera verlo... Quiero saber qué está pensando. Qué estará sintiendo... ¡Tengo una idea!
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P.O.V STILES
He llegado al aeropuerto de Nueva York hace frío. Busco mi dinero. Trato de encontrar mis llaves del loft, no puedo contenerme más tiempo de pie aquí en este aeropuerto. Ni siquiera quiero tomar un taxi, hay demasiado tráfico, aunque tal vez tarde lo mismo en llegar si voy corriendo pero quiero hacer algo. Así que estoy comenzando a correr. Aun contengo las lágrimas que intentan escapar de mis ojos. Siento el aire frío y algunas gotas de agua de lluvia en el rostro. Son cerca de las siete de la noche. Llego al edificio donde está nuestro loft. Subo las escaleras de tres en tres escalones. Abro la puerta de departamento. Y ahí está él, mis lágrimas de felicidad por fin salen de mis ojos. Suelto mis maletas y caen al suelo. Está medio sentado en un escritorio de color café muy oscuro. Tiene un pantalón de vestir negro y zapatos grandes y puntiagudos color azabache brillante. Una camisa blanca. Su corbata está medio acomodada, más desordenada que otra cosa. Su cabello un poco bajado. Su barba luce igual que siempre. Sus cejas, por dios las amo.
Tiene una hoja en su manos. Me mira confundido y se pone de pie.
---¿Stiles? -dice y se talla muy fuerte los ojos.
Entonces yo corro hacia él. Derek abre los ojos y me atrapa en su brazos.
---Derek -por fin digo. Lo abrazo fuerte y él me carga. Enredo mis piernas en su cuerpo.
---¿Por qué lloras? -pega su rostro al mío lo mueve lento. Yo cierro los ojos.
---Te extrañaba demasiado. -Pero antes decir esto pensé en muchas cosas.
---No llores. Sorpredentemente estás aquí, conmigo. -Pega su frente a la mía. Con ella empuja la mía para levantar mi cara y de pronto en medio de mis lágrimas, siento la tibieza de sus labios con los míos. Ha pasado tanto de no probarlos que me causa una revolución en la boca del estomago. Es magia entrando por mi venas. Me emociono porque pienso en lo afortunado que soy ahora.
Nos separamos un poco. Sonrio de felicidad.
---¿Qué haces aquí? -pregunta con una sonrisa-. Más bien, ¿por qué no avisaste que vendrías?
---Quería que fuera una sorpresa. -En cierta manera estoy mintiendo pues en verdad no quería que nadie interceptara la llamada y escuchara sobre mis planes de venir aquí.
Me sigue cargando. Camina hacia el sillón y se sienta ahí y yo en él.
---Pues en verdad que lo lograste. -Me besa de nuevo-. También te extrañé mucho -dice muy bajito. Curiosea en mi cuello, inhala profundo y me aprieta más fuerte contra él. Cierro los ojos, alzo un poco la cabeza. Me recorre un hormigueo desde la espalda baja hasta la parte más alta de mi cuello. Me empieza a besar la piel y los lunares en ésta-. Hueles diferente. -Se detiene.
No sé a qué se refiere. Puede que el olor de Scott aún esté en mi cuerpo (porque lo besé), en mi vestimenta, pues traigo su ropa puesta (porque dormí con él)
---¿A qué te refieres? -pregunto demasiado nervioso.
---A terror, ansiedad, depresión. ¿Por qué? -No sé si sentirme aliviado o no. Me ve preocupado. Como el noventa por ciento de las miradas que he recibido las últimas semanas.
---Es que, mi padre fue... asesinado. -Agacho la mirada.
---Lo siento, yo no sabía. -Se disculpa-. ¿Hay algo que pueda hacer para que estés alegre?
---Bueno hay algo que no hemos hecho aún. -Ya no quiero pensar en el pasado.
---Pero.
---¡A! -le pongo un dedo en la boca.
---Pero yo.
---¡A! ¡A!
---Yo aún no estoy listo.
---¿Por qué?
---Soy un hombre lobo, que tal y no sé, con mis garras superfilosas te arrancó un ojo sin querer -dice haciendo muchos gestos.
---¿Por qué lo harías? -pregunto un poco intimidado.
---Soy un licantropo. Las emociones fuertes pueden hacer que mi lobo interior salga y puedo perder la conciencia de mis actos. -Me mira a los ojos.
---Confío en ti. -Beso su frente.
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Estoy acostado en la cama. Recargado en ella con los codos. Mirando a Derek quien a puesto la canción "Escape (The Piña Colada Song)". Se está desnudando muy lento haciendo caras raras que más que producirme exitación sexual, me da risa, pero de igual manera los disfruto. Según él está haciendo un baile sexy, pero no le salé. Tal vez sólo porque le da pena conmigo.
---¿Te gusta? -pregunta mientras se sigue moviendo.
Yo me río mucho, me paso una mano por el cabello y hago mi cabeza para atrás.
---¿De qué te ríes? -Se oye algo decepcionado.
---Me en-can-ta. -Me muerdo el labio.
---¿Dónde está tu erección? -interroga y levanta una ceja.
---Ven aquí y hagamoslo. -Sin dudarlo dos veces apaga la música y se pone encima de mí.
Me besa de forma apasionada. Entonces siento su virilidad sobre la mía. Ambas intentando/desendo con desesperación rozarse aunque sea un poco. Me quita el pantalón.
---Sabes que te ves jodidamente deseable con eso boxers rojos ajustados ¿verdad? -dice en tono fogoso. Me pone boca abajo-. Ese trasero se te ve tan saboreable -susurra en mi oreja.
Hace mucho que deseaba poder sentirme tan sucio de sexo como él me estaba poniendo.
Y besaba mi nuca mientras él frota su pene desnudo y duro en mi trasero y eso me puso unas diez veces más.
---¿Así? -preguntó.
---¡Ajá! -exclama abriendo demasiado mi boca. Pues mi miembro al mismo tiempo se frotaba contra la cama.
Entonces me dio la vuelta de nuevo.
---Ponte de pie -ordenó.
Entonces eso hago. Detecto sus sucias intenciones. Intento quitarme la ropa interior.
---No lo hagas -demanda otra vez.
Me muerde muy suave por encima de la tela, acariciando mi pene con sus dientes. Me saca el miembro de donde lo tenía escondido. Lo acerca a su cara y me siento muy duro. La piel de su rostro se toca con la mía.
---Está muy caliente y huele bien. -Mueve la boca por mi pene mientras habla.
---Me bañé antes de venir y no he ocupado esa parte de mi cuerpo en todo el día y no he sudado tampoco... mmm... -Ha metido dos dedos en mi boca, mi propio gemido me ha encendido un poco más y creo que a él también porque está lamiendo el tronco de mi miembro muy rápido. Entonces siento como besa la punta. Lame desde mis relajados testículos hasta la cabeza y siento como lo introduce en su boca.
Se siente como marihuana y LSD. Me relajo y activo a la vez. Salen un iris más en cada uno de mis ojos. Todo está doble por un momento corto. Y la habitación se mueve. Y las paredes sólo son lonas pintadas que ondean. Es todo un viaje en mis ciudades de cristal que conforman mi cerebro. Lo siento en todo mi cuerpo. Es liberador. Es astral. Es otra dimensión en el placer.
---Más rápido -oigo que gritan. Y me doy cuenta que fui yo quien lo hizo y además de eso estoy sujetando los cabellos de la cabeza de Derek, moviendo ésta de atrás para adelante.
He llegado el clímax y viajo de Miami a los Ángeles en segundos. Miles de agujas pinchan cada nervio de mi cuerpo de forma placentera. Grito de la deliciosa sensación que estoy teniendo. Chorros de semen caliente se alojan en la boca de Derek y él sigue chupando, haciendo que el placer sea insoportable de nuevo pero me gusta me gusta me gusta demasiado.
Derek deja de hacer su trabajo. Entonces yo caigo en la cama cansado. Derek se acerca a mí y empieza a besarme con todo lo que salió de mí. Me habría resultado un poco asqueroso antes. Pero ahora estoy demasiado cachondo e incluso me parece excitante de todas formas. Me pone boca abajo. Con los dientes retira mi ropa interior y me muerde un glúteo. Me siento vivo. Quiero más, ansío lo que sigue.
Derek abre para llegar mejor a mi entrada y empieza a lamer un poco suave y después rudo. Se siente tan bien que quiero cantar.
Después de un rato de hacer eso creo que me ha dilatado un poco. Entonces Derek mete dos de sus grandes dedos en mi entrada. Me duele un poco, había llegado a meterme uno solo y mío, no de Derek y sus manos son grandes. Se posiciona entre mis piernas.
---Stiles. Ya sabía que algún día serías mío. Ya eres mío -susurra y y me ve con cariño. Y creo que para Derek esto es más que sexo salvaje. Es más que cumplir mi capricho adolescente.
Me besa de nuevo los labios. Ahora viajando lento hasta mi cuello. Disfrutando del sabor de mi piel. Quitando botón por botón de la camisa de Scott. Besando cada centímetro de mi piel que era expuesto. Sus pétalos en mi pecho y en mi abdomen se sienten tan frescos y me producen un rico escalofrío en la espalda. Besa mis pezones. Con la ayuda de sus brazos se impulsa hacia arriba para poder verme mejor y yo también lo veo. Me causa mucha excitación verlo con la camisa blanca ya desabrochada. Una pequeñas chapitas rojas en sus mejillas. El cuerpo perlado de sudor. Sus músculos pectorales, abdominales, y brazos se ven más grandez con la luz tenue. Veo las pequeñas gotas de sudor caminar por aquella piel morena que tanto me facina en él. Mi maestra de español decía que sudar no era "sepsy" pero esto era una excepción. Sobre Derek era más que sexy.
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P.O.V Derek.
Lo vi desde arriba. Me fascinan sus ojos. Sus pestañas que le dan un toque de delicadeza a su mirada. Sus deliciosos, delgados y definidos labios color rosa pálido. Su desnudez que a pesar de no tener un cuerpo marcado y musculoso como el mío, está algo fibrado y le queda tan bien.
Su cara comienza a enrojecer, más de lo que ya estaba, pues se ha dado cuenta que lo veo demasiado tiempo. Entonces estoy seguro que haber esperado tanto ha valido la pena. Tal vez no es el día que quería que ocurriera, pero no hay marcha atrás atrás y estoy listo. Posponer esto ha sido difícil, pero ha de tener una gran recompensa. No nos veo haciendo esto en otro tiempo o lugar, pues éstos son los perfectos. Hoy es el día adecuado para que nos volvamos un solo ser. Empiezo a quitarme la poca ropa que me queda hasta estar igual que él. Me apoyo de mis antebrazos para recostarme sobre Stiles sin aplastarlo, para no lastimarlo. Con mi mano derecha atrapo su muñeca izquierda, en ella hay una pulsera de MUSE que le regalé hace años y parece que la encontrado de nuevo. Esa simple pulsera de tela decora de manera provocadora su brazo. Beso sus dedos lento. Recorro con mis labios todo su brazo y él se mueve debajo de mí por lo que está sintiendo. Llego a su hombro y noto que nuestras respiraciones y los latidos de nuestros salvajes corazones están sincronizados. Además hace un calor abrazador. El infierno del placer.
Le beso en la boca de nuevo, muy lento con amor. Siento la brisa de verano. El abre sus hermosos ojos color avellana clara. Ve los míos. Su mirada denota cariño, pena (de la buena), amor, felicidad. Y no hay palabras porque con nuestras miradas nos decimos todo. Sé que él entiende todo lo que yo quiero expresar y también lo siente.
Estoy introduciéndome en él. Amo a este chico. Soy adicto a él. Mi querido futuro esposo. Sí.
¿Cómo pude soportar tenerte lejos toda mi vida?
Cada vez que me dices que me amas yo te amo más. Quiero tenerte a mi lado toda la eternidad.
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P.O.V Stiles.
Él se está moviendo. Nuestra pasión es tan fuerte que siento que en cualquier momento nos prenderemos en llamas. La mirada verde que tiene me ve con muchos sentimientos bellos. Me vuelve loco y salvaje tener contacto con su piel dorada y bronceada y que brilla tanto...
Siento que todo va algo rápido y quiero que quede una hermosa cicatriz de esto en mi cerebro y memoria.
Nos acercamos insoportablemente lento al orgasmo. Ya quiero que llegue, es una súplica desesperada.
Mi cuerpo se relaja en una cama infinita de flores que cantan como ángeles. Mis gemidos son suaves pero fuertes. Todo mi mundo es Derek.
Se empieza a mover más rápido. Sin despegar nuestros cuerpos cambiamos de manera ágil de posición.
Él acostado y yo sentado en su cuerpo. Pone sus manos en mis caderas. Mis movimientos no son tan expertos como los de Derek pero nos causa un delicioso placer, en especial cuando la punta del caliente pene de Derek golpeaba mi punto de placer sentía mi miembro vibrar de manera hercúlea.
Así, sin más, él grita mi nombre y se viene dentro de mí, chocando muy fuerte contra mi próstata. Yo grito el suyo estallando en mil colores sobre sus abdominales.
Recopilar cada una de las cosas que me han llevado a amar a este hombre me hace sentir aún más tranquilo. Lo amo por las cosas que ya he mencionado antes. Lo amo porque a pesar haber sufrido en el amor nunca perdió la esperanza. Lo amo porque nunca nadie lo ha visto, pero sabe sonreír. Lo amo porque su sonrisa es bella y cálida. Lo amo porque se deja abrazar. Lo amo porque es fuerte. Lo amo porque se ve demasiado tierno cuando es dócil, tanto que no puedo detenerme al sonreír. Lo amo porque me gusta como besa. Lo amo porque siempre trata de que tengamos momentos tiernos e íntimos. Lo amo porque me atrae su físico. Lo amo porque me ama como nadie lo ha hecho.

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P.O.V. Derek.
El calor se ha vuelto suave, delicioso, soportable, agradable y arrullador. No sólo en el exterior sino también dentro de nosotros.
Después de incendiarnos en placer, minuto tras minuto, nuestros besos son cada vez más cálidos, sinceros, y castos. Stiles está alentando el paso. Nuestras lenguas se tocan, acarician y danzan una melodía cálida, elegante y en cierta forma apasionada. Sus labios se han detenido. Se ha recostado por completo sobre mí.
---Te amo... -susurra a ojos cerrados.
---Yo aún más Stiles -respondo en voz alta-. En verdad es amor lo que siento por ti -murmuro muy bajito como si alguien fuera a cachar esas palabras y las fuera a destrozar.
No oigo respuesta, Volteo a ver a mi chico y noto que ya se ha quedado dormido, lógico. Se ven tan hermoso cuando lo hace, con la boca ligeramente abierta.
Nos cubro con las mantas a ambos. Protejo con mis fuertes brazos su delgado y níveo cuerpo.
---No sé que te haya pasado en realidad Stiles... pero yo te protegeré con mi vida. -Beso su frente. Y me duermo con los labios en su cabello.

Nota de Autor: me demoré un poco pero ya la subí y Está muy largo ya sé, pero quería todo esto en un solo capítulo.