Daemon me empujó aún con la daga clavada dejándome caer en los brazos de Jace que me miró sin saber qué hacer.
-Ahora que ya todos los presentes sabemos cuál es tu punto debil espero que esta vez seas tú el que no insulte nuestra inteligencia- Daemon caminó hacia Aemond y sonrió al ver el cuerpo sin vida de Ser Criston Cole en el suelo.
-Jace, llévatela de aquí- dijo Aemond sin apartar la vista de Daemon- no continuaré hablando mientras ella siga aquí.
-Llevala con el maestre- dijo Rhaenyra.
Jace suspiró y me cogió en sus brazos sacándome con rapidez de aquella sala mientras yo me retorcía de dolor.
-No, no...-sollocé- vuelve dentro.
-No- Jace me miró de reojo lleno de preocupación- ya has hecho suficiente.
Lloré hundiendo mi cabeza en su pecho.
-Dime que no le van a matar-intenté zafarme de sus brazos- déjame volver con él.
-Necesitas ser atendida-ignorándome me dejó encima de mi cama- quédate aquí, yo iré a buscar al maestre.
Eché la cabeza hacia atrás adolorida e intenté controlar mi respiración mientras Jace se iba en busca de ayuda.
Mi corazón latía con fuerza y mi cuerpo temblaba aterrorizado de solo pensar que Daemon pudiera matar a Aemond en aquélla sala.
¿Cómo iba a impedirlo yo si no podía ni moverme?
-Jace- lloré con fuerza cuando regresó- diles que no le maten, te lo suplico.
Él se agachó a mi lado sujetando mi mano mientras el maestre revisaba mi pierna.
-No puedo hacer nada-dijo con semblante serio- él mató a Luke, a nuestro hermano.
-Por favor....-dije en un hilo de voz.
Y apreté con fuerza la mano de Jace cuando el maestre arrancó la daga de golpe provocando que echara la cabeza hacia atrás y cerrara los ojos mareada.
-Visenya no te duermas- dijo Jace golpeando mi rostro con delicadeza- estás perdiendo mucha sangre y si te quedas...
Y dejé de escucharle, comencé a sentir como su voz se iba alejando poco a poco de mi, como yo me perdía en la oscuridad y llegaba con seis años llorando a moco tendido a un enorme castillo repleto de desconocidos.
Ser Criston Cole tiraba de mi mano obligándome a seguirle por los pasillos hasta que entramos en una gran sala en la que mis ojos de inmediato se posaron en el enorme trono repleto de espadas.
-Ella es, alteza- dijo Ser Criston Cole.
Y ahí fue cuando vi a una hermosa mujer vestida de verde que cruzada de brazos me observaba detenidamente.
-¿Seguro que el fuego no afecta a su piel?- preguntó.
Pero cuando Ser Criston Cole fue a contestar, la puerta de aquella enorme sala volvió a abrirse dando paso a dos niños que peleaban entre ellos.
-¡Basta!-elevó el tono de voz la mujer.
Los dos se quedaron en silencio y solo entonces se percataron de mi presencia.
-Viste como un chico- río el más alto de los dos.
El otro chico se quedó en silencio observandome, tal vez porque yo llevaba haciendo lo mismo desde que entró en la sala, o tal vez por simple curiosidad.
Su mirada estaba sumida en una terrible tristeza. ¿Acaso era por la cicatriz aún cicatrizando de su ojo?
Pero mientras el alto se quejaba a su madre y hablaba sin parar, yo continúe mirando al chico de la cicatriz hasta que él apartó la mirada desviandola esta vez hacia su madre.
-¿Quién es?- preguntó.
Todos los presentes me miraron.
-Es Visenya, la hija bastarda de Rhaenyra.
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La semilla del dragón// Aemond Targaryen 💚
RandomFANFIC House of the Dragon Aemond Targaryen